Pretorianos del medio ambiente

Los tres nuevos socios de la UE son la guardia pretoriana del medio ambiente. Sus leyes verdes son m¨¢s exigentes que el promedio de los Doce. Sobre todo en Suecia, que desat¨® la guerra contra el mercurio - de las bater¨ªas, el cadmio en los fertilizantes y las emisiones sulfurosas, e impuso altas tasas al anh¨ªdrido carb¨®nico. Tem¨ªan armonizarse a la baja. Y pactaron, en sus actas de adhesi¨®n, el camino de enmedio: ni ellos reduc¨ªan sus est¨¢ndares ecol¨®gicos, ni los Doce aumentaban los suyos, atendiendo a que la s¨²bita mejora del medio ambiente empeora los costos empresariales, va en detrimento de la competitividad.

La presi¨®n verde perjudica m¨¢s al crecimiento econ¨®mico de los m¨¢s retrasados y menos ecol¨®gicos -Espa?a entre ellos-, aunque el Fondo de Cohesi¨®n se estableci¨® precisamente para paliar sus dificultades. Este equilibrio entre los Doce y los tres nuevos durar¨¢ cuatro a?os. Y despu¨¦s, ?qu¨¦ va a pasar?. Despu¨¦s, a lo mejor las nuevas tecnolog¨ªas resuelven algunos problemas mediambientales.

La tensi¨®n pol¨ªtica est¨¢ asegurada. Se dirimir¨¢ en la Comisi¨®n y en el Consejo. En ¨¦ste, Austria y Suecia disponen de 4 votos, Finlandia, de 3. Total, 11. Si se suman a los 18 del informal bloque verde (Dinamarca, Holanda y Alemania),-suman 29. Es decir, dos m¨¢s que la minor¨ªa de bloqueo y suficientes para impedir las decisiones que se toman por mayor¨ªa cualificada (62 de los 87 votos totales). Mandar¨¢n, y mucho.

Algunos temen en Bruselas que los nuevos socios caigan en la tentaci¨®n de recurrir a una estratagema jur¨ªdica: utilizar el art¨ªculo 104-4-A del Tratado de Maastricht -en combinaci¨®n con el 36- para constituir por la puerta de atr¨¢s una suerte de opting out ecol¨®gico. Aunque dif¨ªcilmente el Tribunal lo admitir¨ªa.