La zaga de plastilina

El otrora guardameta goleador del Legan¨¦s Supermario fue ayer un inocente juvenil; el invencible Rambo de la defensa pepinera Mesas parec¨ªa Heidi triste porque no estaba su abuelito, y el debutante lateral Molina, con fama de figura, un manojo de nervios. Con esta trasposici¨®n de papeles, el Mallorca se encontr¨® con tres goles sin apenas pesta?ear. La llegada de la plastilina a la defensa madrile?a trae una consecuencia dram¨¢tica: el Legan¨¦s se apoltrona en el furg¨®n de la cola con seis negativos.Aunque hab¨ªa optimismo en la grada por la buena racha (de los ¨²ltimos ocho puntos hab¨ªa conseguido cinco), los primeros s¨ªntomas de debilidad defensiva en el Lega causaron los primeros pitos, que. se acrecentaron cuando lleg¨® la pifia de Mesas y Mario. "Est¨¢ cachonda hoy la defensa, ?eh?", "?Qu¨¦ barbaridad!", "Esto es de chirigota", gritaban los aficionados madrile?os. Y no les faltaba raz¨®n. En el primer tiempo se mont¨® una especie de circo en el ¨¢rea del Legan¨¦s. La feria comenz¨® en el minuto 1: el reci¨¦n llegado de la cantera madridista Molina dejaba una pasillo para que el elegante Milojevic hiciera el primer gol. No hab¨ªa pasado la media hora cuando Mesas cedi¨® un bal¨®n envenenado a su portero, como si la noche anterior le hubiese quitado la novia. El gol fue clamoroso.

Pero faltaba lo mejor. Hab¨ªa acortado distancias el Lega por la eficaz cabeza de ??igo y se lam¨ªa el empate, cuando lleg¨® un bal¨®n a las manos de Mario. El cuero iba a velocidad de tortuga y el contrario m¨¢s pr¨®ximo estaba a cinco metros. Pero Supermario comenz¨® a temblar, sus manos se doblaron y sus piernas se quebraron. Por all¨ª pas¨® el bal¨®n, y el delantero mallorqu¨ªn Juanjo lo mand¨® a la red. En fin, despu¨¦s de esta nueva charlotada, s¨®lo faltaba el bombero torero.

En el segundo periodo, Aguilera sustituy¨® a un destrozado Mario, que incluso se lesion¨®, y ya no hubo tantos fallos. Lo contrario hubiese sido sospechoso. Pero el Legan¨¦s no reaccion¨®.

Ni siquiera la expulsi¨®n del veterano Serna a los cinco minutos de la continuaci¨®n sirvi¨® para que el Legan¨¦s se acercara en el marcador. El conjunto de Luis ?ngel Duque se empe?¨® en buscar el gol con lanzamientos desde fuera del ¨¢rea. Lo intentaron Andr¨¦s, Mesas y Tocho, pero no hubo manera.