Una multiltud despide entre aplausos al concejal asesinado

Bajo los cipreses del cementerio de Polloe se alinearon ayer en dos filas miles de ciudadanos para acompa?ar el f¨¦retro de Gregorio Ord¨®?ez al pante¨®n en el que fue enterrado a las 16.30. Simult¨¢neamente, en numerosas localidades de Espa?a se guard¨® un minuto de silencio. El presidente de Anmist¨ªa Internacional envi¨® al PP una carta de p¨¦same en la que recuerda que Ord¨®?ez formaba parte de la red de apelantes contra la pena de muerte.

La comitiva parti¨® de la explanada del Ayuntamiento donostiarra, seguida por tres camiones cargados con coronas de flores, que hab¨ªan sido enviadas desde la mayor¨ªa de las comunidades y ayuntamientos espa?oles. El f¨¦retro fue extra¨ªdo del coche f¨²nebre por cuatro amigos y tres concejales de la corporaci¨®n de San Sebasti¨¢n.El alcalde Od¨®n Elorza y los ediles de todos los partidos, salvo los de HB que permanecieron alejados del Ayuntamiento desde primeras horas de la tarde del lunes, se fueron turnando a lo largo de m¨¢s de un kil¨®metro para llevar en hombros al que fuera su compa?ero.

La corporaci¨®n encabez¨® la comitiva seguida de los familiares de Ord¨®?ez y de representantes pol¨ªticos e institucionales. La esposa de Ord¨®?ez, Ana Iribar, acompa?ada de los padres y la hermana del concejal, se mantuvo serena hasta el momento en el que el f¨¦retro fue introducido en el pante¨®n. En ese instante comenz¨® a llorar y se abraz¨® a la madre de Gregorio Ord¨®?ez.

Ana Iribar se encontraba a escasos metros de la esposa del presidente del Partido Popular, Ana Botella, que ocultaba su ojos llorosos tras unas gafas negras. Cuando la l¨¢pida sell¨® la tumba en la que qued¨® Gregorio Ord¨®?ez, los m¨¢s de 3.000 ciudadanos que se encontraban en el cementerio irrumpieron en un sonoro aplauso que se prolong¨® durante varios minutos.

La familia del parlamentario vasco estuvo acompa?ada en esos momentos por toda la ejecutiva del Partido Popular y por varios presidentes de comunidades aut¨®nomas populares y socialistas. El ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, se qued¨® a varios metros del pante¨®n ante la imposibilidad de acceder al lugar, debido a la gran cantidad de personas que se hab¨ªan concentrado.

Decenas de donostiarras se acercaron a los familiares para expresar su condolencia y su repulsa ante el nuevo atentado de ETA. El simpatizante del PP Ricardo Garc¨ªa Damborenea dijo, una vez finalizado el sepelio, que hab¨ªa acudido para manifestar su rechazo al asesinato. "Han asesinado a un ciudadano y estamos aqu¨ª los ciudadanos del Pa¨ªs Vasco para protestar".

Damborena expres¨® su confianza en que ETA no gane la batalla. "Todos confiamos en que el Partido Popular sabr¨¢ armarse de coraje, apretar los dientes, cerrar filas y seguir adelante".

Los actos de repulsa por el asesinato de Ord¨®?ez se repitieron en varias ciudades espa?olas. En el Senado y en el Congreso de los Diputados guardaron un minuto de silencio por el asesinato del pol¨ªtico vasco.

La Federaci¨®n Espa?ola de Municipios hab¨ªa pedido a los ayuntamientos que mostraran p¨²blicamente su repulsa. La petici¨®n fue seguida por numerosos municipios de todo el territorio nacional. En Madrid, cuyo alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa Alvarez del Manzano, viaj¨® a San Sebasti¨¢n, la corporaci¨®n municipal suspendi¨® todos los actos oficiales, y en la Asamblea los diputados guardaron un minuto de silencio. Las banderas ondearon a media asta en los edificios oficiales.

El presidente de Amnist¨ªa Internacional remiti¨® una carta de p¨¦same al presidente del PP, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. En ella recuerda que Ord¨®?ez era miembro de la red de apelantes contra la pena de muerte de esta organizaci¨®n.