Hasta que nos hagan gol

Ataque. El Athletic no prepar¨® el partido pensando en el ataque. Su idea principal fue esperar que el rival no consiguiera gol. Tan s¨®lo Ciganda mantuvo una posici¨®n adelantada. El Barcelona atac¨® con m¨¢s de tres hombres. Con las l¨ªneas adelantadas siempre consegu¨ªa ganar el centro del campo y desde all¨ª proyectarse en ataque. Durante el primer tiempo abus¨® de intentar penetrar por el centro, donde m¨¢s jugadores defensivos hab¨ªa y, por tanto, m¨¢s complicado resultaba. Gica Hagi, en la segunda parte, consigui¨® abrir la defensa bilba¨ªna.Defensa. El Barcelona dispuso s¨®lo de tres defensores. Aunque Koeman iniciaba desde atr¨¢s, estuvo m¨¢s tiempo de centro-campista que de libre. En el centro del campo tan s¨®lo Guardiola y Amor manten¨ªan posiciones, los dem¨¢s ten¨ªan libertad de movimientos. Muchos jugadores amonton¨® el t¨¦cnico del Athletic, Javier Irureta, en defensa. Prepar¨® dos l¨ªneas defensivas en el borde de su ¨¢rea. All¨ª esperaron a los catalanes y no se permitieron ninguna alegr¨ªa. Regalaron mucho espacio los bilba¨ªnos al Barcelona.

?Por qu¨¦? El Athletic de Bilbao estuvo escondido en su campo durante todo el partido. Sus componentes apenas ten¨ªan intenci¨®n de salir de su ¨¢rea. Las jugadas eran destellos de individualidad, sin ninguna convicci¨®n de ¨¦xito. Al recibir el gol, todo cambi¨®. El equipo bilba¨ªno adelant¨® las l¨ªneas. Sus jugadores arriesgaron mucho m¨¢s en las combinaciones. Se pas¨® a jugar en el campo del equipo azulgrana. Y lo m¨¢s importante, el Athletic domin¨® el juego de ataque. En el f¨²tbol hay que demostrar siempre lo que puede hacer un equipo. No depender s¨®lo de lo que el contrario sea capaz de conseguir. Durante 82 minutos s¨®lo el Barcelona pudo lograr el gol. El Athletic de Bilbao s¨®lo dispuso de ocho minutos para ofrecer tal sensaci¨®n.

Algo m¨¢s. Jugador carism¨¢tico. Punto de mira de muchos espectadores. Julen Guerrero pas¨® por el Camp Nou inadvertido. Situado en el terreno de juego en zona de no participaci¨®n. Sin entrar en la din¨¢mica del partido. Totalmente ajeno a lo que estaba sucediendo. Disfrut¨® del partido desde una situaci¨®n privilegiada. El jugador vasco es joven. Sus posibilidades f¨ªsicas y t¨¦cnicas son grand¨ªsimas. Sin embargo, en el aspecto f¨ªsico, su aportaci¨®n al conjunto es escasa. Se limita a correr cuando el bal¨®n est¨¢ cerca. Tambi¨¦n cuando su equipo llega a las cercan¨ªas del ¨¢rea rival. Buscando mucho el hacer gol, circunstancia que da mucha notoriedad de cara al aficionado, pero que no refleja de forma fehaciente su esfuerzo durante el partido. Hay que exigir m¨¢s a un jugador que act¨²a en ur¨ªa posici¨®n muy c¨®moda y que no quiere asumir ninguna responsabilidad.