Hachuel regresar¨¢ hoy a la Audiencia para declarar sobre el 'caso Banesto'
El juez de la Audiencia Nacional Manuel Garc¨ªa Castell¨®n tom¨® declaraci¨®n ayer durante cuatro horas al financiero Jacques Hachuel por su relaci¨®n con varias operaciones incluidas en el caso Banesto. Hachuel, citado en calidad de testigo y que visitar¨¢ hoy de nuevo la Audiencia, manifest¨® al salir de declarar que el interrogatorio se centr¨® en la operaci¨®n de Carburos Met¨¢licos y que ahora no ten¨ªa relaci¨®n con Conde.
El juez buscaba el esclarecimiento del destino de 1.344 millones de pesetas procedentes de la prima que abon¨® la empresa norteamericana Air Products por una opci¨®n de compra sobre Carburos, Met¨¢licos. El contrato fue suscrito en abril de 1990 por Arturo Roman¨ª y aunque Air Products certific¨® el pago de la citada cantidad en un banco suizo, el dinero nunca entr¨® en Banesto ni en su Corporaci¨®n Industrial.Mientras eso suced¨ªa en la Audiencia Nacional, Mario Conde y Arturo Roman¨ª iniciaban su primer d¨ªa tras salir de la prisi¨®n de Alcal¨¢-Meco. Al parecer, el aval que ha permitido la salida del ex presidente de Banesto se ha garantizado en parte con fincas y cuadros. Conde no durmi¨® demasiado, ya que Roman¨ª y uno de sus abogados, Antonio Gonz¨¢lez Cu¨¦llar, abandonaron la vivienda del ex presidente de Banesto a las seis de la ma?ana. Se levant¨® "animado" y "tranquilito" Mario Conde. As¨ª lo dijo una empleada del servicio dom¨¦stico, que sali¨® de la casa supervigilada del banquero a la una de la tarde para comprar naranjas, baguetes y un paquet¨®n de biscotes. Conde aprovech¨® el primer d¨ªa en libertad para meterse en su despacho a trabajar, seg¨²n dijo tambi¨¦n la empleada, acosada por la veintena de periodistas que hac¨ªan guardia en la calle de Triana, n¨²mero 63, domicilio del banquero.
A la ajardinada casa gris, de ventanas blancas, lleg¨® ayer una invitaci¨®n de la Agencia A, empresa encargada de la imagen de financiero Javier de la Rosa. Tambi¨¦n recibi¨® la familia Conde un goteo de telegramas -unos 15 iban a las cinco de la tarde- y visita de allegados y familiares. Diez en total, que acudieron en parejas, unos para el almuerzo Y otros para los caf¨¦s. Hab¨ªa dulces, porque una se?ora de mediana edad acudi¨® por la ma?ana s¨®lo para entregar un bizcocho casero y el Audi 100 azul de Conde entr¨® sobre la una de la tarde con el ch¨®fer y una bandeja de pasteler¨ªa. A media tarde todos continuaban en la caldeada vivienda, mientras una veintena de periodistas permanec¨ªan apostados en la calle cubierta por la niebla.
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