El Metro censura un anuncio, por obsceno, del grupo rockero The Black Crowes

La empresa que gestiona la publicidad del Metro, Publi Sistemas, ha rechazado la campa?a publicitaria de la pr¨®xima actuaci¨®n en Madrid de los rockeros estadounidenses The Black Crowes, (Los Cuervos Negros), por considerar que podr¨ªa molestar a algunos de sus usuarios. En el cartel se puede ver una fotograf¨ªa de la pelvis de una mujer cubierta s¨®lo por un escuetotanga que deja asomar su vello p¨²bico. La imagen. corresponde a la portada del elep¨¦ Amorica, que el grupo presentar¨¢ en Madrid el 14 de febrero. Una versi¨®n depilada de la fotograf¨ªa tampoco fue aceptada.

Fuentes de la compa?¨ªa discogr¨¢fica RCA, encargada de la p7romoci¨®n y distribuci¨®n de los discos de The Black Crowes, aseguran que Publi Sistemas repudi¨® tambi¨¦n una segunda versi¨®n afeitada, en la que los pelos hab¨ªan sido eliminados del cartel.Finalmente, RCA y la empresa que contrata en exclusiva las vallas del suburbano acordaron mostrar una composici¨®n sin carne que reproduce el tri¨¢ngulo del biquini sobre fondo negro. ?sta es la versi¨®n que se exhibir¨¢ en los t¨²neles del Metro a partir del lunes.

"Inadecuada"

El director comercial de Publi Sistemas, Borja Pav¨ªa, asegura que no se ha producido ning¨²n tipo de censura: "No, hemos prohibido nada. Simplemente hicimos ver a la casa discogr¨¢fica que la campa?a nos parec¨ªa inadecuada, dado que en el Metro entra todo tipo de p¨²blico. Les sugerimos que la retocaran, conservando el mismo impacto publicitario. De la misma forma que los peri¨®dicos tienen derecho a no publicar anuncios que puedan disgustar a sus lectores, nosotros tenemos que velar porque la publicidad del Metro no moleste a sus usuarios".

Seg¨²n un portavoz de Metro de Madrid, "Publi Sistemas conoce las condiciones gen¨¦ricas que impone el Metro para su publicidad, y entre ellas est¨¢ que los anuncios no tengan contenidos ofensivos. Hay un mill¨®n y medio de usuarios, y hay que cuidar las formas en general".

RCA ha querido aprovechar el tir¨®n publicitario de estos hechos y ha incorporado en el cartel un r¨®tulo que dice: "Atenci¨®n: portada censurada. Busca el original en tu tienda de discos".

No es la primera vez que los Black Crowes tienen problemas con la portada de su disco. Los carteles exhibidos en el metro de Londres fueron censurados por empleados de seguridad de la compa?¨ªa con unas bandas adhesivas estrat¨¦gicas que tapaban los pol¨¦micos pelos p¨²bicos.

En Estados Unidos, la revista Rolling Stone rechaz¨® una costosa campa?a de promoci¨®n del ¨¢lbum despu¨¦s " de que varias empresas automovil¨ªsticas amenazaran con retirar sus anuncios si se publicaba. Finalmente se public¨® el anuncio igual que aparecer¨¢ aqu¨ª: el tri¨¢ngulo p¨²bico con la bandera norteamericana sobre fondo negro. La pol¨¦mica ha llegado a tal punto que en el Reino Unido se ha difundido el rumor de que la fotograf¨ªa retrata en realidad a un hombre que oculta sus genitales entre las piernas. Un portavoz del grupo revelaci¨®n. del pasado a?o ha tenido que desmentir este hecho, apuntando que la imagen fue copiada de un ejemplar de 1977 de la revista er¨®tica norteamericana HustIer.

'Pop art'

En su reciente visita promocional a Espa?a, el cantante de The Black Crowes, Chris Robinson, explicaba as¨ª los motivos que le hab¨ªan inducido a elegir esa ilustraci¨®n: "Para m¨ª es pop art. Me gusta la cantidad de cosas que puede provocar. No s¨¦ qu¨¦ significa, y por eso la escog¨ª". Respecto a la posibilidad, ahora confirmada, de que la portada fuera censurada, aseguraba: "?Qu¨¦ hay de malo en un cuerpo de mujer con un poco de pelo p¨²bico? Habr¨¢ gente que dir¨¢: 'Oh, Dios m¨ªo, qu¨¦ horror, una vagina'. ?Qu¨¦ pasa! Todo el mundo tiene una".