Sexto intento de robo en una misma peleter¨ªa empotrando un coche

La peleter¨ªa Pieleva, en la calle de Orense, 59, sufri¨® en la madrugada del s¨¢bado el sexto intento de robo en tres a?os. Y como siempre, los asaltantes estrellaron un coche robado contra el escaparate. El contundente sistema no dio resultado debido a las medidas de seguridad instaladas por el propietario, escarmentado de los violentos asaltos. Unas vigas de hierro frenaron la embestida del parachoques. Los delincuentes fueron detenidos cuando hu¨ªan a pie.

La peleter¨ªa familiar Pieleva, fue fundada hace 25 a?os. El negocio comenz¨® a tambalearse en 1989. Ese a?o una pareja de delincuentes hizo a?icos el escaparate al estrellar un coche en la fachada. En un minuto volaron prendas de piel valoradas en un mill¨®n y medio de pesetas. El susto se repiti¨® a los pocos meses. Otro turismo se empotraba contra la tienda. Pero los ladrones se fueron sin bot¨ªn al o¨ªr la alarma.Rafael Hortelano, de 34 a?os, y su hermano emprendieron la lucha contra sus atracadores nocturnos. Primero conectaron la alarma del establecimiento con una central de seguridad y luego se pasaron varias noches durmiendo en la peleter¨ªa. Nadie quebr¨®, sin embargo, esas noches de insomnio. Tambi¨¦n habilitaron una c¨¢mara acorazada.

Cuando menos lo esperaban, el robo se repiti¨®. "Yo no limpio los cristales, los cambio", bromea Rafael Hortelano. Luego coloc¨® una viga en el escaparate para frenar las embestidas. "La tienda poco a poco empezaba a parecerse a una c¨¢rcel", explicaba ayer el due?o del negocio.

Los vecinos del inmueble n¨²mero 59 de la calle de Orense se unieron tambi¨¦n a la batalla contra los atracadores. En uno de los asaltos, al escuchar el estallido de los cristales, varias personas comenzaron a lanzar macetas contra los atracadores. Su punter¨ªa no era buena. La pasada madrugada llegaba el sexto asalto. Como en los dos ¨²ltimos intentos, dos hombres rompieron los bolardos de las aceras y colocaron un banco frente al escaparate. Luego, pisaron a fondo el acelerador del coche para romper la puerta. El cristal y el cierre crujieron, pero la viga resisti¨®. En la huida les detuvo la Polic¨ªa Nacional. Seg¨²n los agentes, los detenidos pueden ser autores de numerosos asaltos con coches.

Pero Hortelano no se aflije. "Me lo tomo con filosof¨ªa, las ¨²ltimas veces nunca me han robado". Su compa?¨ªa de seguros tambi¨¦n aguanta: "De momento no me han dicho nada porque los destrozos no superan el valor del genero asegurado", concluye.