Los ex democristianos de izquierda no quieren que su la l¨ªder pacte con Berlusconi

Es probable que no se llegue a la escisi¨®n inmediata, pero resultar¨¢ dif¨ªcil encontrar un m¨ªnimo acuerdo para clausurar, hoy, el Consejo Nacional del Partido Popular Italiano (PPI) sin que se formalice la ruptura anunciada desde que el l¨ªder, Roce Buttiglione, comenz¨® a cooperar con Silvio Berlusconi y la poderosa izquierda ex democristiana reaccion¨® con la candidatura a primer ministro de Romano Prodi. Adem¨¢s de protesta contra el informe del secretario general, los contestatarios pro mueven un congreso extraordinario y un refer¨¦ndum para que la base del partido elija entre Berlusconi o Prodi

.Buttiglione les responde que la l¨ªnea pol¨ªtica del PPI ya qued¨® fijada -hacia el centro, insiste- en el congreso del pasado mes de julio, cuando los exponentes de la izquierda fueron derrotados. Pero no puede estar seguro de triunfar con un a iniciativa que favorece, en la pr¨¢ctica, el intento de Berlusconi de rehacer la mayor¨ªa parlamentaria perdida, poniendo a los populares y a bastantes tr¨¢nsfugas en el vac¨ªo creado por ' "la traici¨®n" de la Liga Norte. El secretario del PPI domina en el Consejo Nacional, pero no controla el partido. No domina, de hecho, el grupo parlamentario. Prueba de ello es que sus diputados votaran el pasado mi¨¦rcoles, junto a la Liga y al Partido Democr¨¢tico de, la Izquierda (PDS), una resoluci¨®n de la C¨¢mara sobre la familia en la que no se reconoce "el derecho a la tutela del feto", como pretend¨ªan Forza Italia y Alianza Nacional (AN).

L'Osservatore Romano, el peri¨®dico vaticano, expres¨® ayer su "profunda preocupaci¨®n" por este hecho. A presiones vaticanas han atribu¨ªdo Incluso algunos colaboradores pr¨®ximos a Buttiglione un giro hacia la derecha que parec¨ªa impensable hace s¨®lo pocas semanas, cuando el l¨ªder del PPI colaboraba con la izquierda para contrarrestar el peligro de totalitarismo".

La familia, el aborto, la ense?anza religiosa, son, al parecer, temas claves de la propuesta program¨¢tica que Berlusconi ha enviado a Buttiglione para consolidar una colaboraci¨®n que reproduce exactamente la estructura de la que ya fracas¨® con la Liga: Forza Italia, aliada simult¨¢nea de AN y del PPI, pero sin que estas dos formaciones tengan que considerse aliadas formales entre s¨ª. Una ficci¨®n para encubrir desacuerdos y evitar explicaciones embarazosas a los electores, que desemboc¨® en ruptura durante la experiencia precedente."El proyecto de organizaci¨®n del area moderada patrocinado por AN es distinto y alternativo al nuestro", dijo ayer Buttiglione, tratando de tranquilizar a sus cr¨ªticos, tras reiterar que "el ¨¢rea moderada se define", en cualquier caso, "como alternativa a la izquierda" y que el PPI debe construir el centro con Forza Italia, con la Liga y con otros partidos menores.