Balladur cede ante las protestas de los estudiantes y retira su reforma educativa

El pasado martes, todo el sistema educativo franc¨¦s fue a la huelga, y hubo manifestaciones en vanas ciudades. Ayer hubo nuevas marchas. Eso bast¨® para que el primer ministro y candidato a presidente, ?douard Balladur, emprendiera otra de las retiradas que distinguen su estilo de gobierno. Balladur anunci¨® ayer la suspensi¨®n de una circular sobre las universidades t¨¦cnicas, origen del conflicto, y afirm¨® que toda la reforma educativa se negociar¨ªa hasta alcanzar "el consenso necesario".

La protesta universitaria, r¨¢pidamente extendida a los dem¨¢s niveles educativos, parvulario incluido, comenz¨® por una circular ministerial que hac¨ªa casi imposible para los alumnos de los Institutos Universitarios T¨¦cnicos (carreras profesionales de tres a?os) proseguir estudios hasta obtener la licenciatura superior.Ayer hab¨ªa nuevas manifestaciones convocadas y, justo antes de que comenzaran, durante el acto de inauguraci¨®n de la Escuela de Minas de Nantes, Balladur anunci¨® su retirada. Lo hizo en nombre de "la libertad" y la formaci¨®n t¨¦cnica, hacia la que dijo sentir "un enorme apego". En plena campa?a electoral, y cuando su correligionario gaullista Jacques Chirac y el socialista Lionel Jospin concentraban sobre ¨¦l sus ataques, la marcha atr¨¢s adquiri¨® una enorme repercusi¨®n pol¨ªtica.

Desde el bando de Chirac se Celebr¨® la reculada como una victoria y se se?al¨® que el "inmovilista" Balladur era "obviamente incapaz" de acometer, desde la presidencia, las reformas necesarias para Francia.

"Cobard¨ªa archidemostrada"

Un portavoz socialista se refiri¨®, a su vez, a la "cobard¨ªa archidemostrada" por el primer ministro. En el entorno de Balladur se insisti¨®, por el contrario, en que no se pod¨ªa "imponer la reforma" a los franceses y que todos los cambios deb¨ªan ser comprendidos y aceptados. Para reforzar su argumentaci¨®n, los balladuristas esgrimieron los sondeos: tras casi dos a?os abundantes en retiradas y rectificaciones de ¨²ltima hora, la popularidad del primer ministro se mantiene en niveles alt¨ªsimos.

Balladur se ha convertido en un aut¨¦ntico especialista en recular ante las manifestaciones y ante cualquier protesta que pueda empa?ar su imagen. Llevaba apenas unos meses al frente del Gobierno cuando, en octubre de 1993, los trabajadores de Air France se sublevaron ante el anuncio de despidos masivos e invadieron violentamente las pistas de los aeropuertos: Balladur sustituy¨® al presidente de la compa?¨ªa y encarg¨® una reestructuraci¨®n sin despidos.

En febrero de 1994, los pescadores se enfrentaron a la polic¨ªa e incendiaron el hist¨®rico Parlamento de Breta?a: Balladur les dio subvenciones y, sin buscar responsabilidades, orden¨® que se reconstruyera el edificio.

A finales de marzo, fueron otra vez los estudiantes quienes protagonizaron una serie de manifestaciones contra el llamado Contrato de Inserci¨®n Profesional: nueva y sonad¨ªsima retirada, aderezada con una recepci¨®n en el palacete Matignon para los l¨ªderes estudiantiles.