De la Rosa avala la libertad de Cruells y Pi?ana
"?Qui¨¦n me ha avalado, mi hermano?". "No, Javier". Al atravesar la puerta de salida de la c¨¢rcel Modelo de Barcelona, Arturo Pi?ana a¨²n no sab¨ªa qui¨¦n hab¨ªa avalado su fianza de 40 millones de pesetas. Los amigos que acudieron a recibirle le sacaron de su error: el avalista no hab¨ªa sido su hermano, sino el propio Javier de la Rosa, queen el aval que obtuvo del Banco Popular incluy¨® 40 millones adicionales para lograr la libertad de Cruells y otros tantos para sacar de la Modelo a quien le ha sido fiel desde hace dos d¨¦cadas: Arturo Pi?ana, antes conserje de la Banca Garriga Nogu¨¦s y ahora apoderado del financiero. Ambos abandonaron, la c¨¢rcel, Modelo a primera hora de la tarde.
Javier de la Rosa Mart¨ª ha pasado casi cuatro meses privado de libertad. Desde que ingresa ra en la Modelo el 19 de octubre de 1994, hasta que abandon¨® ayer la prisi¨®n de Can Brians, a 25,kil¨®metros de Barcelona, el que fuera hombre fuerte de KIO en Espa?a ha pasado 117 noches privado de libertad. Han sido cuatro meses en los que se ha sabido poco, de sus actividades en la c¨¢rcel. El bocadillo que desencaden¨® su traslado de la Modelo a Can Brians por motivos de seguridad, el env¨ªo de telegramas m¨¢s o menos amenazadores a per sonalidades pol¨ªticas record¨¢ndoles su privaci¨®n de libertad, la emisi¨®n casi obsesiva de comunicados de prensa a trav¨¦s de su hermano, Antonio o de sus portavoces oficiales, la Agencia A, las espor¨¢dicas visitas a los juzgados para volver a declarar han salpicado su estancia entre rejas.La cautividad de Javier de la Rosa empez¨® a media ma?ana del 18 de octubre pasado, cuando fue detenido por la polic¨ªa en un aparcamiento pr¨®ximo a. los juzgados de Barcelona. Tras pasar esa primera noche en los calabozos del juzgado, al d¨ªa siguiente fue trasladado a la c¨¢rcel Modelo, donde ingres¨® a ¨²ltima hora de la noche.
De la Rosa apenas pas¨® 10 d¨ªas en la Modelo. Fueron los peores, llenos de angustia y depresi¨®n. Varias fotograf¨ªas publicadas por la prensa causaron alarma entre los funcionarios de prisiones de la Generalitat. La m¨¢s, llamativa le retraba hincando el diente a un bocadillo -de chorzio, aseguran las malas lenguas- mientras se asomaba por la ventana de su celda. El financiero dej¨® la t¨¦trica Modelo por la, moderna prisi¨®n de Can Brians.
Su estancia en Can Brian, no mejor¨® su estado de ¨¢nimo, No faltan comentarios de que all¨ª Javier de la Rosa beb¨ªa casi m¨¢s de lo, que com¨ªa. En cualquier caso la ingesta de alimento, no le era tan provechosa como en sus tiempos de libertad. Su segunda salida de la prisi¨®n -la primera hab¨ªa sido pocos d¨ªas despu¨¦s de su encarcelamiento-, el pasado jueves, permiti¨® comprobar que hab¨ªa adelgazado bastante, aunque conservaba gran parte de su considerable humanidad
Su estancia e n la c¨¢rcel no le ha impedido permanecer al corriente de la actualidad. All¨ª pod¨ªa leer la prensa o ver la televisi¨®n -Can Brians est¨¢ abonada a Canal Plus- y recibi¨® adem¨¢s numerosas visitas de sus familiares y sus abogados. Desde la prisi¨®n, a trav¨¦s de su hermano Antonio o de sus portavoces de la Agencia A, ha ido contestando una por una las, imputaciones que se le iban haciendo a medida que avanzaba el sumario.
De la Rosa no se limit¨® a contestar las informaciones de prensa que la ata?¨ªan. Desde la c¨¢rcel envi¨® dos series de tele gramas a pol¨ªticos y personalidades, record¨¢ndoles su situaci¨®n de privaci¨®n de libertad.
En prisi¨®n, el antiguo hombre fuerte de KIO en Espa?a nunca lleg¨® a coincidir con sus tres colaboradores tambi¨¦n encarcelados. De la Rosa dej¨® la Modelo sin tiempo de cruzarse en las galer¨ªas con su mano derecha, Narciso de Mir -en libertad sin fianza desde el 31 de enero-, con su hombre m¨¢s fiel, Arturo Pi?ana, y Joan Cruells, que le sucedi¨® en la presidencia de Grand Tibidabo. Cruells parece al m¨¢s afectado de todos por la estancia en la prisi¨®n.
El jueves pasado, cuando acudi¨® al juzgado para una declaraci¨®n complementaria, se le vio demacrado, muy delgado, con la mirada perdida. De la Rosa cruz¨® ese mismo pasillo casi a c¨¢mara lenta, con semblante altanero y de profundo desprecio hacia los reporteros que le filmaban y fotografiaban. Ayer pos¨® ante esos mismos reporteros a las puertas de su domicilio familiar. Ya en libertad condicional bajo fianza de 1.000 millones de pesetas. La mitad de lo que pag¨® Mario Conde...
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