El Prado duplicar¨¢ su superficie en el a?o 2000
Unos 500 arquitectos acudir¨¢n al concurso de ideas, que incluye una nueva entrada
El Museo del Prado tendr¨¢ una superflicie de 40.000 metros cuadrados -el doble de la actual con el edificio Villanueva y el Cas¨®n del Buen Retiro- en el a?o 2000, cuando terminen las obras de ampliaci¨®n y reforma. El Prado XXI surgir¨¢ de las aportaciones de unos 500 arquitectos en un concurso internacional de ideas, cuyo decreto est¨¢ listo para aparecer en el BOE, que contar¨¢n con dos nuevas construcciones, adem¨¢s del Museo del Ej¨¦rcito y el claustro de la iglesia de los Jer¨®nimos, en la zona cercana al Retiro madrile?o.
La ministra de Cultura, Carmen Alborch, presentar¨¢ hoy en el Senado el plan general de museos, con un nuevo esquema de gesti¨®n de los estatales en las comunidades aut¨®nomas, y el mi¨¦rcoles explicar¨¢ en el Congreso el concurso internacional de ideas para la ampliaci¨®n y reforma del Museo del Prado. Los dos actos corresponden al compromiso pol¨ªtico de buscar el consenso con los grupos parlamentarios, establecido con el plan de necesidades del Prado.El Prado se ha convertido en un "asunto de Estado", por encima de las estrategias de los partidos pol¨ªticos. El portavoz de cultura del Partido Popular (PP) en el Congreso, Miguel ?ngel Cort¨¦s, ha declarado que, tras el acuerdo general sobre las prioridades del museo, va a proponer el mi¨¦rcoles una votaci¨®n de compromiso de los grupos sobre el futuro del Prado.
Las bases del concurso se aprobaron el viernes en un pleno del patronato. En el mismo acto se conocieron los trabajos de siete arquitectos para la restauracion de las cubiertas del edificio Villanueva, por encargo del Ministerio de Cultura, una de las prioridades acordadas sobre el museo.
Aunque el texto para la orden ministerial ya est¨¢ listo, salvo la fecha, la redacci¨®n definitiva del texto incluye algunos reparos del patronato, sobre todo la insistencia en que el edificio hist¨®rico "no se vea perturbado en su imagen arquitect¨®nica actual" y que los dos nuevos "edificios" que prev¨¦ el concurso se difundan como "construcciones".
Firmas para jurado
La entrega del material del concurso, que incluye 20 documentos gr¨¢ficos e hist¨®ricos sobre la zona, se retrasa dos meses sobre el calendario anunciado en diciembre. Los arquitectos podr¨¢n trabajar entre el 15 de mayo y el de noviembre para que el jurado decida a finales de diciembre de este a?o. El proyecto definitivo tendr¨¢ que estar en julio de 1996. El Gran Prado podr¨¢ ser inaugurado en el a?o 2000, tras la realizaci¨®n de unas obras con presupuesto de 20.000 millones de pesetas, al precio actual de construcci¨®n.
Unos 500 arquitectos acudir¨¢n al concurso, seg¨²n c¨¢lculos de profesionales, atra¨ªdos por el nombre del Prado y la situaci¨®n actual de crisis de proyectos. Ya han manifestado su inter¨¦s firmas como Norman Foster o Santiago Calatrava, aunque el primero prefiere el sistema de concurso restringido y no el elegido de trabajos an¨®nimos. Otros nombres, como el portugu¨¦s ?lvaro Siza, que ha declarado su ausencia, se intenta su incorporaci¨®n como miembros del jurado. En el jurado de 14 miembros habr¨¢ siete arquitectos extranjeros, de acuerdo con las normas de la Uni¨®n Internacional de Arquitectos (UIA), y ya se han cursado invitaciones a Isozaki, Ando, Hollein, Wilford, Siza, Macary, Pelli y Salmona.
La novedad del concurso se centra en la parte este del edificio actual, con una construcci¨®n con una gran vest¨ªbulo de entrada al museo con todos los servicios p¨²blicos, junto con la nueva construcci¨®n en el claustro de los Jer¨®nimos, que, tras una dura negociaci¨®n, se han aceptado las condiciones del arzobispo de Madrid. En esta "restauraci¨®n o reconstrucci¨®n del claustro" ir¨¢n los servicios internos. El edificio Villanueva se dedica s¨®lo a exposici¨®n (se gana espacio para 500 cuadros) y se rehabilitan el Museo del Ej¨¦rcito (para obras del XVII) y el Cas¨®n (con el XIX).
Los nuevos accesos, en la zona de la calle de Ruiz de Alarc¨®n -ahora aparcamiento de autobuses-, figuran en las necesidades urgentes del museo, y han aparecido en otras propuestas anteriores, como en la conexi¨®n con los Jer¨®nimos, de Chueca, y la m¨¢s reciente, de tres plantas subterr¨¢neas, de Partearroyo.
Seg¨²n expertos consultados, el ¨¦xito del concurso depende de la credibilidad del jurado, y en el mismo se aportar¨¢n m¨¢s soluciones formales que espectaculares. Los modelos posibles son la gran pir¨¢mide del Louvre de Par¨ªs y la ampliaci¨®n de la National Gallery de Londres.
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