Dos, en el s¨®tano
Dos grandes en el s¨®tano. El Joventut meti¨® ayer en el furg¨®n de cola, junto a ¨¦l, al Estudiantes. Est¨¢n ambos pr¨¢cticamente obligados a ganar los siete partidos de Liga que les quedan. Y a¨²n as¨ª dependen de terceros. Es m¨¢s si pierden m¨¢s partidos de la cuenta pueden quedar condenados a jugar las eliminatorias de descenso.El fracaso de la pol¨ªtica deportiva de Estudiantes viene de lejos y qued¨® reflejado por una frase de su ex t¨¦cnico Miguel Angel Mart¨ªn, "Esto no funciona. Hay jugadores que no se enteran. No s¨¦ qu¨¦ hacer para que se aprendan los sistemas", La frase sigue teniendo vigencia si se tiene en cuenta que Mart¨ªn dej¨® el equipo con nueve derrotas por siete triunfos en la Liga y una derrota m¨¢s en la Copa Korac, Jos¨¦ Vicente Hern¨¢ndez, totaliza diez triunfos y diez derrotas entre ambas competiciones.
Una de las claves del fracaso de Estudiantes es la floja respuesta de los extranjeros fichados para la presente campa?a: Michael Smith, Harper Williams y Mijail Mijailov, que proced¨ªan de equipos en los que triunfaron plenamente: Pamesa, Le¨®n y la selecci¨®n rusa. El equipo del Magari?os se ha despersonalizado poco a Poco con la salida del mismo de Pinone, Ant¨²nez, Azofra y Vecina.
Caso de consumarse su ya virtual eclusi¨®n para disputar las eliminatorias por el t¨ªtulo, el Estudiantes dejar¨ªa de participar en las Copas de Europa por vez primera desde la temporada 1989-1990 y despu¨¦s de haber sido d¨¦cimo en la Liga anterior.
El Joventut -¨²ltimo en su grupo en la Liga Europea tras ganar dos de los 16 partidos que disput¨® y eliminado en cuartos de final de la Copa del Rey- si no lo arregla en un gran sprint final se quedar¨¢ sin disputar ninguna competici¨®n curopea la pr¨®xima temporada, hecho que no sucede desde la 1984-1985.
Pero el caso badalon¨¦s es extremo: en una misma temporada ha pasado de campe¨®n de Europa y tercero de la Liga a posiciones de cola en ambas competiciones.
No existe una raz¨®n ¨²nica para su descalabro, pero la econ¨®mica es una de las principales. Arrastra la entidad badalonesa un d¨¦ficit de m¨¢s de 200 millones y baraja como medida para paliarlo una ampliaci¨®n de su capital social.
Los directivos de ambos equipos constatan que no hay equipo grande que no se libre de pasar por tiempos dif¨ªciles. Los ejemplos est¨¢n a mano: el Madrid fue quinto en 1991 y el Barcelona, s¨¦ptimo en 1992. Un mal consuelo para ambos ya que en principio part¨ªan con presupuesto y con potencial suficiente para haber estado en las posiciones delanteras del campeonato.
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