Un mo?o como 'pa la boa'

En la recta final del enlace regio, Sevilla ha incorporado ya el tema de la boda a su peculiar lenguaje: "Anda, ni?a, que te han hecho un mo?o como pa la boa", le dicen las clientas a Antonia Saravia, due?a de una poller¨ªa en el mercado del Arenal, cercano al puente de Triana. "Pa la boa, todav¨ªa no. Es para la cena de la caseta de Feria, pa reunir el money". Sin embargo, Antonia a?adi¨®: "Pa la boa me lo volver¨¢n a peinar, que pienso verla en primera fila".Do?a Antonia la ver¨¢ en la calle, detr¨¢s de una de las numerosas vallas, pero es de esperar que las damas espa?olas que asistan a la ceremonia luzcan tambi¨¦n, en de forma natural o mediante postizo, semejante aditamento capilar, imprescindible para apuntalar la inevitable peineta con mantilla. Seg¨²n el peluquero Carlos Rete, que en el hotel Alfonso XIII peinar¨¢ todo tipo de testas, las invitadas extranjeras optar¨¢n previsiblemente por la pamela, que es tan elegante en las bodas como misteriosa para testificar en los juicios cuando eres una viuda asesina.

En el mencionado hotel, enteramente reservado por la Casa Real para hospedar a sus invitados, se trabaja a paso de marcha tanto en lo pr¨¢ctico como en la incorporaci¨®n del protocolo, que se?ala expresamente que las camareras no pueden exhibir m¨¢s que un leve maquillaje y ag¨¹ita de colonia, como mucho. Como si los tiempos estuvieran para que las chicas se atufaran con Chanel n¨²mero 5.

La ciudad anda ya fren¨¦tica de informadores -en total se han acreditado 1.925- que intentan averiguar cuantos detalles puedan del evento. "Yo he emitido ya 40 reportajes", contaba un colega de la radio, sevillano y transportado por la parapsicolog¨ªa del asunto. Hasta ha informado sobre las cualidades esot¨¦ricas de la catedral donde se celebrar¨¢ el matrimonio. Parece que bajo el arco central se re¨²ne cantidad de energ¨ªa positiva que ba?ar¨¢ a los novios en sus efluvios, y que la salida, de los reci¨¦n desposados, que se realizar¨¢ por la puerta Este, les conducir¨¢ hacia la espiritualidad. Entretanto, siguen lleg¨¢ndoles regalos algo m¨¢s materiales. Uno de los m¨¢s bellos, la cristaler¨ªa que la Fundaci¨®n Centro Nacional del Vidrio, radicada en la antigua Real F¨¢brica de Cristales de La Granja, ha elaborado especialmente para la infanta Elena. Consta de m¨¢s de 200 piezas y se ha realizado con los moldes originales del siglo XVIII. El tapiz que la Real F¨¢brica de Tapices manda tambi¨¦n es tradicional. Por su parte, los grandes de Espa?a obsequian a los novios con una cuberter¨ªa de plata y unas bandejas del mismo material encargadas a un prestigioso joyero madrile?o y valoradas en tres millones de pesetas. Claro que lo han pagado mediante colecta, que no est¨¢ la nobleza para muchas alegr¨ªas. Otros regalos, del tipo tur¨ªstico-art¨ªstico-patriotero (y puede que hasta haya republicanos infiltrados, dado el resultado), pondr¨¢n a prueba la bondad de los contrayentes: as¨ª, los voluntariosos retratos de la Infanta debidos a probos artistas semidesconocidos que la adornan con prendas propias y ajenas, y las reproducciones de monumentos locales, que forman por s¨ª solas una especie de Pueblo Espa?ol para enanitos.

La previsi¨®n de soponcios, tanto ilustres como del vulgo, ser¨¢ coordinada por el 061, gestionado por la Empresa P¨²blica de Emergencias Sanitarias (Epes), pero no se sabe a¨²n en qu¨¦ consistir¨¢ la instalaci¨®n de mingitorios, que es de suponer los habr¨¢, dado el estado prost¨¢tico de algunas dinast¨ªas. Los tres grandes hospitales de Sevilla permanecer¨¢n en actitud de alerta, dicen que para atender todo tipo de patolog¨ªas, aunque resulta poco probable que se contemple el apartado rehabilitaci¨®n. Aparte de todo lo que se ha escrito que la Infanta tendr¨¢ que soportar, no hay que menospreciar en absoluto el homenaje "hist¨®rico, l¨ªrico y musical" que pretende asestarle el Ateneo de Sevilla, surtido de un recital de canto y otro de poes¨ªa, y que se anuncia con una contundente sentencia de V¨¢zquez de Mella: "La Monarqu¨ªa es el sufragio universal de los siglos".