Un estudio cientifico estima necesaria la imposici¨®n de cuotas en el mar del Norte

La industria pesquera mundial tiene un impacto medioambiental cuatro veces superior a lo que se hab¨ªa estimado hasta ahora ' seg¨²n una investigaci¨®n publicada hoy en la prestigiosa revista cient¨ªfica Nature. El estudio, realizado por Daniel Pauly, de la universidad de la Columbia Brit¨¢nica (Vancouver, Canad¨¢), y V. Christensen, del Centro Internacional para la gesti¨®n de los recursos acu¨¢ticos vivos, de Manila, aconseja mayores regulaciones internacionales, como la imposici¨®n de cuotas de pesca en el mar del Norte y otras reservas sobreexplotadas.El impacto de la pesca en el medio ambiente se mide por la productividad primaria de los oc¨¦anos que acaba en las redes de pesca. La ecolog¨ªa marina se sustenta en el plancton, unas min¨²sculas algas que utilizan la energ¨ªa solar para convertir di¨®xido de carbono en alimento. Toda la vida oce¨¢nica depende del proceso fundamental por el que los animales que viven de comer plancton, como peque?as gambas, son, a su vez, devorados por animales mayores. En la c¨²spide de la cadena de alimentos est¨¢n predadores como el at¨²n y el bacalao.

Cada paso entre niveles va acompa?ado de una p¨¦rdida del 90% de la energ¨ªa, debido a que el valor energ¨¦tico de una gamba, por ejemplo, no se traduce directamente en carne de la sardina que se la come, ya que ¨¦sta disipa gran parte de la energ¨ªa en su actividad diaria, como nadar, cazar m¨¢s gambas y reproducirse. As¨ª, hacen falta diez cubos de gambas para hacer un cubo de sardinas, y as¨ª sucesivamente.

Cadena alimentaria

Pauly y Christensen han tomado datos de capturas mundiales entre 1988 y 1991, dividi¨¦ndolas en especies y asignando un valor ecol¨®gico a cada una en t¨¦rminos de la productividad primaria necesaria para mantenerla. El at¨²n, por ejemplo, tiene un valor superior al de los langostinos, porque est¨¢ m¨¢s arriba en la cadena de alimentos, y un at¨²n consume m¨¢s productividad primaria que una gamba. Tambi¨¦n han tenido en cuenta los deshechos mismos de la pesca: en las fechas consideradas, la capturas media anual fue de 94,3 millones de toneladas, de las que se descartaron 27 millones de toneladas.Los investigadores estiman que se requiere el 8% de la productividad primaria oce¨¢nica para mantener las pesquer¨ªas al nivel mundial actual. Pero lo peor es que este 8% es ¨²nicamente una media y en realidad la situaci¨®n es mucho m¨¢s preocupante.

La mayor¨ªa de las actividades pesqueras en el mundo se hacen en aguas superficiales, cercanas a las costas, zonas donde los nutrientes que afloran. a la superficie atraen a los peces. En estos lugares, la pesca absorbe hasta un 35% de la productividad primaria. La investigaci¨®n sugiere que el problema puede ser aliviado desviando la atenci¨®n hacia niveles inferiores de la cadena de alimentos, como las gambas.