Un juez ve indicios de irregularidades la Caja Rural Sevilla

El juez de Instrucci¨®n n¨²mero 7 de Sevilla, Fernando Mart¨ªnez, que investiga la presunta comisi¨®n de varios delitos econ¨®micos en la Caja Rural de Sevilla, remiti¨® un oficio al Banco de Espa?a informando de las irregularidades detectadas. Hasta ahora no, se conoce si el banco central ha realizado una inspecci¨®n, seg¨²n se?alaron ayer fuentes del caso.Estos medios indicaron que la informaci¨®n dirigida a la sede central del Banco de Espa?a fue remitida posteriormente a la direcci¨®n de la entidad en Sevilla, y que s¨®lo tienen constancia de la investigaci¨®n anual que el banco emisor realiza en todas las entidades financieras. Las mismas fuentes se?alaron la posibilidad de que, una vez se levante el secreto judicial que pesa sobre las actuaciones, se persone en la causa un acusador particular ejerciendo la acci¨®n popular.

Por otra parte, el subdirector del ¨¢rea jur¨ªdica de la Caja Rural, Fernando Acedo Trujillo, se?al¨® ayer que la entidad mantiene su "total confianza" en el interventor general Jos¨¦ Fernando Campos Aparicio, a quien se imputa un presunto delito de defraudaci¨®n a, la Hacienda P¨²blica, as¨ª como en el resto de directivos de la Caja Rural que han sido llamados por el juez para prestar declaraci¨®n como testigos. "No existe ni el m¨¢s m¨ªnimo indicio de responsabilidad de ning¨²n tipo en los directivos de la caja", indic¨® Acedo Trujillo, que se encuentra personado en las diligencias como abogado de los directivos.

El letrado agreg¨® que la ¨²nica irregularidad es la del empleado del departamento de Obras y Contrataciones, que fue despedido un mes despu¨¦s de conocida la denuncia. "Todo lo dem¨¢s son elucubraciones que no se atienen a la realidad", asegur¨® Acedo Trujillo.

Por otro lado, un portavoz de la Caja Rural indic¨® que la auditor¨ªa realizada por Arthur Andersen, que est¨¢ incluida entre la documentaci¨®n de la instrucci¨®n, eval¨²a la apropiaci¨®n del empleado Jos¨¦ Asenjo Sedano en 239 millones de pesetas, cifra muy superior a la por ¨¦l confesada en su autoinculpaci¨®n, que ascend¨ªa a unos 70 u 80 millones.