Retrato de Jordi, de Pujol y de Soley
Canal + emiti¨® el domingo su retrato de Jordi Pujol, un paseo bastante completo por su vida presentado con la intenci¨®n de explicar a los espectadores que el personaje es algo m¨¢s que un President. El reportaje, en efecto, relata con voluntad de precisi¨®n muchos de los principales acontecimientos que han marcado la vida, formado la personalidad y decantado el pensamiento de Jordi Pujol. Su ni?ez, su juventud, su militancia religiosa, su nacionalismo, sus amigos, su mujer, su familia, sus acciones, las reacciones que despertaron y la persecuci¨®n de que fue objeto y que le cost¨® c¨¢rcel y destierroToda la primera parte del reportaje repasa la vida de Pujol antes de que accediera en 1980 a la presidencia de la Generalitat. Lo hace con profusi¨®n de buenos documentos y mediante numerosos testimonios. Uno de ellos, compa?ero ole militancia nacionalista y cat¨®lica cuenta incluso c¨®mo fue torturado el joven Pujol y c¨®mo volvi¨® a la celda, tras el interrogatorio, con moratones que le imped¨ªan sentarse.
Si bien pr¨¢cticamente nada de todo eso resulta muy novedoso para el p¨²blico catal¨¢n, que en quince a?os ha tenido tiempo de sobras de conocer al detalle la vida y la obra de su presidente, s¨ª debe de serlo para el del resto de Espa?a. Si tomamos como representativo de cierto estado de la opini¨®n p¨²blica el term¨®metro de las tertulias radiof¨®nicas, habr¨¢ que convenir en que el documental de Canal + habr¨¢ dado un poco de densidad y color al clich¨¦ en puro blanco y negro que suele darse del personaje. Lo m¨¢s cr¨ªtico que se llega a decir es el viejo chascarrillo de que el president consulta sus decisiones con Jordi, con Flujol y con Soley (o sea, con ¨¦l mismo).
El documento da voz a adversarios pol¨ªticos de Pujol, sobre todo socialistas. La coyuntura no est¨¢ sin embargo para ejercicios de cr¨ªtica y tanto el vicepresidente Serra como el ex ministro Lluch o el veterano Revent¨®s intervienen con gran comedimiento en los calificativos. Hablan de Pujol como habla un pol¨ªtico de su aliado. No se les puede negar que predican con el ejemplo: ?no ped¨ªan sosiego? Tres tazas.
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