Zubin Mehta defiende en Madrid la popularizaci¨®n de la m¨²sica cl¨¢sica
El director indi¨® inicia una gira por Espa?a
Zubin Mehta defendi¨® ayer en Madrid que los conciertos y discos de los tres tenores han servido para traer a mucha gente a la m¨²sica cl¨¢sica. "Muchos hijos de mis amigos escuchan ahora a los tres tenores, igual que a los Rolling Stones", se?al¨® el director de orquesta. El m¨²sico indio, de 58 a?os, conocido defensor de la paz y los derechos humanos, reconoci¨® que "para los m¨²sicos es muy frustrante hacer m¨²sica en estos momentos, en los que m¨¢s de cien guerras atenazan la paz mundial. Yo s¨®lo encuentro la paz cuando subo al escenario".
"Ten¨ªa la esperanza de que el tema de los tres tenores no surgiera en este encuentro, pero ya veo que no me puedo escapar", dijo Mehita horas antes del concierto de Madrid, quien a pesar de la contrariedad conserva la sonrisa y la simpat¨ªa que parecen no abandonarle nunca. "Cuando organizamos el primer concierto con los tres tenores en Roma, no pod¨ªamos imaginar que iba a adquirir esta fuerza. Para el concierto de Los ?ngeles [que clausur¨® los Mundiales de F¨²tbol en Estados Unidos] decidimos que ten¨ªa que ser m¨¢s ligero y liviano, m¨¢s popular, porque era en Hollywood y estaba Frank Sinatra entre el p¨²blico", explic¨® Mehta, que reconoci¨® algo que todo el mundo sabe: el disco ha producido millones y millones de pesetas en ganancias. A pesar de ello, Mehta cree que este fen¨®meno no afecta a la calidad musical y que s¨ª tiene un aspecto muy positivo: "Han atra¨ªdo a mucha gente a la m¨²sica cl¨¢sica, que antes la desconoc¨ªan".Si hay algo de lo que no se puede acusar a Zubin Mehta es de no tener los pies bien pegados a la tierra. Por eso, ayer le hubiera gustado ofrecer un concierto en Tokio, la capital japonesa, donde un atentado con gas letal ha producido ocho muertos y cerca de 5.000 envenenados. Como hizo en L¨ªbano, en el a?o 1982, poco antes de la invasi¨®n israel¨ª, o en el propio Israel, durante la guerra del Golfo, o en la mutilada ciudad de Sarajevo. ?Para qu¨¦ sirve la m¨²sica en esos momentos? ?Qu¨¦ utilidad tiene? "Para los m¨²sicos es muy frustrante hacer m¨²sica en estos momentos, pero estoy convencido, de que todo tipo de m¨²sica puede crear momentos de paz interna", dijo Mehta y record¨®: "Al menos en Sarajevo conseguimos dos horas de tregua en paz; en L¨ªbano, los ¨¢rabes a los que iba dedicado el concierto terminaron abrazados a los m¨²sicos israel¨ªes como verdaderos hermanos".
El director de la Filarm¨®nica de Israel y del Maggio Musicale Fiorentino est¨¢ convencido de vivir una nueva enfermedad social. "A veces pensamos que el mundo de los ordenadores nos lleva hacia adelante, hacia el progreso, pero cada vez vemos que hay m¨¢s pasos que nos llevan hacia atr¨¢s", se lament¨® Mehta, que dijo lamentar que ha cambiado el sentido de la guerra: "Las guerras de ahora no est¨¢n provocadas por confrontaciones ideol¨®gicas, como antes, sino que est¨¢n producidas generalmente por el enfrentamiento entre dos grupos que no quieren vivir juntos". Mehta, que inici¨® ayer en Madrid una gira por Espa?a con la orquesta del Maggio Musicale Fiorentirio y con el violinista Maxim Venguerov de solista, viajar¨¢ luego a Santiago de Compostela, Valencia y Barcelona.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.