Disminuye la influencia de las asociaciones de espectadores contra los programas pol¨¦micos en EE UU

Ahora que en Espa?a arrecia la campa?a de las asociaciones de telespectadores m¨¢s conservadoras en, contra de determinados programas, las grandes firmas publicitarias norteamericanas han iniciado el camino de vuelta. En Estados Unidos ya no hacen tanto caso a las amenazas de boicoteo de los consumidores-telespectadores, y los anunciantes vuelven a insertar su publicidad en los espacios que realmente ve la audiencia, al margen de que irrite a los moralistas. Hace un a?o, Polic¨ªas de Nueva York era vetada en un 20% de las emisoras del pa¨ªs, y su espacio publicitario se vend¨ªa en la secci¨®n de oportunidades. Hoy los precios de sus anuncios se 6otizan m¨¢s alto que nunca. El telefilme sobre la coronel lesbiana Margareth Cammermeyer fue tambi¨¦n v¨ªctima de duras campa?as, pero su estreno en enero le ha proporcionado a la cadena NBC suculentos ingresos.El caballo de batalla es saber si el n¨²mero de clientes que una marca pierde por anunciarse en un programa vetado es mayor que los que gana, por hacerlo. Y. a muchos de los anunciantes que hasta ahora tem¨ªan aparecer en la lista de infractores no les salen las cuentas. Es verdad que las agencias de publicidad miran con lupa cada episodio de una serie por si hay algo qu¨¦ pueda herir susceptibilidades. Algunos disponen de sus, propias compa?¨ªas consultoras, que dan puntual cuenta del lugar m¨¢s adecu¨¢do para insertar un anuncio. Pero una cosa es tener en cuenta que no debe haber conductores ebrios cerca de anuncios de cerveza suicidas con tranquilizantes cerca de productos farmac¨¦uticos, o demasiada sangre mezclada con el anuncio de una pizza, y otra muy distinta es calcular si el beso homo de Roseanne (que en Espa?a emiten las auton¨®micas) o las palabrotas de Polic¨ªas de Nueva York (Tele 5) son suficientes argumentos como para perderse la emisi¨®n con m¨¢s audiencia en el pa¨ªs.

Como hace cinco a?os, cuando un ama de casa de Michigan puso en marcha una campa?a de enorme resonancia contra Matrimonio con hijos (en La 2, los s¨¢bados por la noche) "por la explotaci¨®n de la mujer y el sexo y la actitud antifamiliar" de esta telecomedia. Pero, en 1995, Matrimonio... sigue emiti¨¦ndose en la Fox sin que le falten anuncios que llevarse a la boca, al Igual que ha ocurrido con Los Simpson (Antena 3), tambi¨¦n protestada y denostada.