La acusaci¨®n afirma que los servicios de seguridad de la discoteca no actuaron
, La discoteca Big Ben de Golm¨¦s (Lleida) abri¨® sus puertas ayer por la tarde de forma excepcional para reconstruir la brutal paliza que provoc¨® la muerte del joven leridano Marc Antoni Franc¨¦s la noche del 29 de agosto de 1993. La v¨ªctima, un estudiante universitario de 20 a?os, estaba bailando con su novia y un grupo de amigos en una de las salas del complejo cuando, por motivos que se desconocen, fue atacado de forma salvaje por cinco j¨®venes de etnia gitana, dos de los cuales son juzgados desde el mi¨¦rcoles en la Audiencia de Lleida.Esta diligencia judicial debe servir para determinar con mayor precisi¨®n algunas circunstancias relacionadas con el hecho que a su juicio no han quedado suficientemente claras en la instrucci¨®n de la causa ni en la fase testifical. El abogado de la familia de la v¨ªctima, que califica los hechos de asesinato, pretende demostrar que la pelea dur¨® m¨¢s tiempo del que dicen la mayor¨ªa de los testigos; que los agresores se ensa?aron con la v¨ªctima; que las distancias no se corresponden con las reales, y, fundamentalmente, que no funcion¨® el sistema de seguridad de la discoteca.
Javier Vico, abogado de la defensa, intent¨® demostrar que la pelea dur¨® pocos segundos y que la escasa luz que hab¨ªa en la sala imped¨ªa identificar con claridad a los agresores. Vico, que inicialmente solicitaba la libre absoluci¨®n de los acusados, modificar¨¢ la calificaci¨®n al haber reconocido ¨¦stos que golpearon a la v¨ªctima y basar¨¢ la defensa en una sentencia de la Audiencia de Barcelona que conden¨® por lesiones a los integrantes de una banda de skins que hirieron de gravedad a un inmigrante africano. El letrado que representa a la propiedad de la discoteca -declarada responsable civil subsidiaria- afirm¨® que la pelea no dur¨® m¨¢s de 30 segundos, tiempo insuficiente para que pudiera intervenir el personal de la seguridad.
En la reconstrucci¨®n, realizada a puerta cerrada por decisi¨®n de la Sala, participaron adem¨¢s de los acusados -Jos¨¦ Jim¨¦nez Ubal, El Pancho, y Pablo Jim¨¦nez Abell¨¢n, El Gordo,- los tres miembros del tribunal, la fiscal del caso, los letrados de la acusaci¨®n y de la defensa, familiares de la v¨ªctima y numerosos testigos, entre ellos varios empleados de la discoteca. Tambi¨¦n se utiliz¨® a varios figurantes para poder reproducir el ambiente que hab¨ªa en la sala denominada Planetarium la noche de los hechos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.