"Milagro de campos y bloques"
La patrona de Fuencarral bendice los l¨¢brantios que acoger¨¢n un nuevo barrio
"Bendice los campos de nuestro pueblo". Don Fernando, hisopo en mano, lanza agua bendita en direcci¨®n a las tierras. La mayor¨ªa est¨¢n bald¨ªas, pero pronto cosechar¨¢n edificios: el Ayuntamiento planea levantar aqu¨ª el nuevo barrio de Montecarmelo. Esto es Fuencarral, el distrito madrile?o que a¨²n se siente pueblo y ayer vivi¨® el d¨ªa de su patrona, la Virgen de Valverde. La ermita est¨¢ de bote en bote. Los 5.500 panecillos con queso para ganar indulgencias se han acabado en poco m¨¢s de una hora. "Le hemos pedido a la Virgen que los multiplicara, pero no ha hecho el milagro", bromea el presidente de la Hermandad de Nuestra Se?ora de Valverde, Dionisio Ar¨¦valo.
Poco antes de las 12.00 ya no queda ni una barrita en las banastas, pero s¨ª en los bolsillos. Reme y Jos¨¦, que han tra¨ªdo a la ni?a aunque falte al colegio, llevan un par de panes pata los abuelos. "Est¨¢n ya muy mayores para venir, pero si volvemos sin llevarles uno a cada uno, nos pelan". Y es que los fuencarraleros llevan muy dentro una tradici¨®n que arranca del siglo XIII. Aunque el barrio cambie, ellos la mantienen. Y por eso Gregoria trae en brazos a su nieta Alba vestida de pastora. "Antes ven¨ªamos andando, ahora hay hasta autob¨²s", dice.
Pocos son los romeros que han llegado andando hasta la ermita, en el kil¨®metro 13,6 de la autov¨ªa de Colmenar. El coche gana la partida, aunque se mantenga la procesi¨®n vespertina de la Virgen hasta el casco viejo de Fuencarral. Buena parte del cortejo discurre por la orilla de la v¨ªa r¨¢pida.
Churreros y feriantes se acomodan en las puertas de la iglesia, que pronto quedar¨¢ ribeteada por la M-40. "Nos. hemos librado de que hagan, un carril r¨¢pido delante de la ermita", se ufana el presidente de la hermandad. De lo que no parece que pueda librarse Fuencarral es de cobijar un nuevo barrio, Montecarmelo, que el Ayuntamiento proyecta en las inmediaciones de la ermita con 8.500 viviendas, chal¨¦s incluidos. "La devoci¨®n a la Virgen sal dr¨¢ ganando, porque con los bloques habr¨¢ m¨¢s habitantes", sentencia Dionisio. Y el sacerdote Eug"enio Montero le da la raz¨®n. "Esto se ver¨¢ corregido y aumentado, porque no hay pueblo don de no se mantenga la Virgen como patrciria. Tiene m¨¢s pegada que los santos".
Uno de los asistentes de m¨¢s edad, Jes¨²s Montero, s¨ª lamenta que el horizonte de Valverde pueda ce?irse con ladrillo. "Es triste que cada vez haya m¨¢s bloques", dice. Tambi¨¦n echa en falta la convivencia de antiguamente".
Los j¨®venes hacen menos c¨¢balas. Ver¨®nica Gonz¨¢lez, 21 a?os y romera desde los cuatro, llega vestida "de fuencarralera". Falda roja y corpi?o negro para bailar jotas a la Virgen. "Trabajo de contable, pero me dej¨¦ un d¨ªa de vacaciones para poder estar hoy aqu¨ª"
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.