Por un aut¨¦ntico archivo de la guerra civil

Convertir el Archivo Hist¨®rico Nacional de Salamanca en el aut¨¦ntico archivo de la guerra civil espa?ola que re¨²na el material disperso en distintos archivos estatales y la reproducci¨®n digitalizada de la restante documentaci¨®n, es la soluci¨®n que, con voluntad de consenso, proponen los autores de este art¨ªculo. Se trata de cinco reconocidos investigadores catalanes de historia contempor¨¢nea de distinta procedencia acad¨¦mica y pol¨ªtica. Su intervenci¨®n se produce tras la pol¨¦mica, que califican de desdichada, sobre el retorno de los documentos de la Generalitat republicana a Catalu?a, retorno que los firmantes, as¨ª como historiadores extranjeros, defienden frente a la postura de destacados colegas del resto de Espa?a.

Este art¨ªculo pretende ser una propuesta realista y concreta que contribuya a superar la est¨¦ril pol¨¦mica actual sobre el Archivo de Salamanca, y a facilitar una soluci¨®n racional y justa para todos los implicados en ella. Consideramos que si bien es cierto que debe huirse del fetichismo con que a veces se habla de los documentos originales, habiendo como hay procedimientos de reproducci¨®n altamente ¨²tiles, hay cuestiones que por la naturaleza pol¨ªtica del hecho que las origin¨® -la incauta ci¨®n franquista de 1939- no pueden ser tratadas como meros problemas archiv¨ªsticos.

Pensamos que ser¨ªa muy positivo que la actual Secci¨®n de Salamanca del Archivo Hist¨®rico Nacional se convirtiera en el aut¨¦ntico archivo de la guerra civil, cosa que actualmente no es. Y que fuera un centro que tuviera la mayor arte de los -fondos originales sobre la guerra que hoy est¨¢n dispersos en diferentes archivos estatales y la reproducci¨®n digitalizada de la restante documentaci¨®n. Y que adem¨¢s ese archivo se convirtiera en el centro de informaci¨®n m¨¢s completo sobre todas las cuestiones bibliogr¨¢ficas documentales relativas a la guerra civil. Para poder llegar en un futuro no demasiado lejano a este ambicioso objetivo pensamos que ser¨ªa positivo reflexionar sobre las siguientes cuestiones.

1. No es l¨®gico que en dicho archivo haya documentaci¨®n que no corresponde a la ¨¦poca de la guerra civil. Es absurdo, por ejemplo, que para consultar una documentaci¨®n de principio de siglo, o incluso del siglo pasado, sobre una cooperativa agr¨ªcola andaluza o un ateneo obrero catal¨¢n el investigador deba desplazarse a Salamanca. ?No ser¨ªa m¨¢s razonable que esa documentaci¨®n, que nada tiene que ver con la guerra civil, estuviera depositada en los archivos hist¨®ricos m¨¢s id¨®neos del territorio en el que estaba ubicada la entidad cuesti¨®n?

2. Los fondos de la ¨¦poca de la guerra civil que forman parte de la documentaci¨®n de instituciones pol¨ªticas existentes hoy y que disponen de archivos propios que pueden garantizar su custodia, conservaci¨®n y libre consulta, ?no ser¨ªa m¨¢s justo y coherente que fueran devueltos a sus propietarios? Proceden de una incautaci¨®n pol¨ªtica y es de justicia acabar con el expolio, Esto podr¨ªa afectar, por ejemplo, a la documentaci¨®n de la Generalitat de Catalu?a, a la del Gobierno vasco y a la del Partido Socialista Obrero Espa?ol. En el Archivo de Salamanca deber¨ªa quedar depositada una copia en CD-ROM de todos los fondos sobre la guerra civil devueltos a sus leg¨ªtimos propietarios.

3. La restante documentaci¨®n sobre la guerra civil existente en el Archivo de Salamanca deber¨ªa ser catalogada siguiendo criterios archiv¨ªsticos y no policiales y constituir la base inicial del nuevo archivo. Eso afectar¨ªa, por ejemplo, a la documentaci¨®n sobre las Brigadas Internacionales, las milicias, las colectivizaciones, los refugiados de guerra, y a la de los sindicatos, partidos y entidades hoy inexistentes o que no disponen de archivo propio.

4. No es l¨®gico que haya documentaci¨®n sobre la guerra civil dispersa en diferentes archivos estatales sin que ello responda a un criterio archiv¨ªstico coherente. ?No ser¨ªa m¨¢s razonable que se depositara toda ella, o en el peor de los casos una copia en CD-ROM, en el Archivo de Salamanca? Pensamos, por ejemplo, en la documentaci¨®n sobre la Junta T¨¦cnica del Estado y la del primer Gobierno franquista de Burgos que est¨¢ actualmente en el Archivo de Presidencia de Gobierno, en los fondos militares de Ia guerra -franquistas y republicanos- existentes en el. Servicio Hist¨®rico Militar o en la documentaci¨®n de la Causa General que, dependiente del Ministerio de Justicia, est¨¢ depositada en el Archivo Hist¨®rico Nacional, en Madrid. El objetivo final ser¨ªa que, a medio plazo, el Archivo de Salamanca reuniera toda la documentaci¨®n, original o en CD-ROM, que hoy existe en Espa?a sobre la guerra civil.

5. Actualmente el Archivo de Salamanca tiene una importante biblioteca sobre la guerra civil. ?No ser¨ªa positivo completarla con duplicados existentes en numerosas bibliotecas p¨²blicas y privadas y con adquisiciones hasta convertirla en la m¨¢s completa biblioteca especializada sobre ese tema? Igualmente pensamos que ser¨ªa conveniente que se proyectara la elaboraci¨®n, en la propia sede del Archivo de Salamanca, de una base de datos bibliogr¨¢fica que incluyese todos los libros y art¨ªculos de revista publicados en el mundo sobre la guerra civil. Para ello se podr¨ªa contar con el asesoramiento del Centro de Documentaci¨®n Cient¨ªfica (CINDOC) del CSIC, que hace a?os que trabaja en esta l¨ªnea. Igualmente podr¨ªa, y deber¨ªa, potenciarse la elaboraci¨®n d¨¦ una base de datos sobre la documentaci¨®n extranjera existente en torno a la guerra civil (diplom¨¢tica, de partidos, de la III Internacional, etc¨¦tera). Aqu¨ª se podr¨ªa contar con la ayuda del Centro de Informaci¨®n Documental de Archivos (CIDA) del Ministerio de Cultura, que ya ha realizado un excelente vaciado de la documentaci¨®n que sobre la guerra civil hay en diferentes archivos espa?oles.

6. El Archivo de Salamanca dispone actualmente de una importante hemeroteca que deber¨ªa potenciarse y completarse, con originales o reproducciones. Algo semejante podr¨ªa hacerse con sus secciones de carteles pol¨ªticos y de folletos. Incluso se podr¨ªa pensar, en una fase m¨¢s avanzada, en crear una cinemateca y una fonoteca especializadas en la guerra civil.

Como puede deducirse f¨¢cilmente, la idea b¨¢sica de nuestra propuesta es potenciar el Archivo de Salamanca hasta el punto de convertirlo en un lugar de visita obligada para todo investigador o estudioso de la guerra civil. E incluso, quiz¨¢ ya en una segunda fase, podr¨ªa ser la sede de un gran centro de estudios sobre el conflicto de 1936-1939. Y eso es totalmente compatible con el retorno de una parte de la documentaci¨®n que hoy posee a sus leg¨ªtimos propietarios.

No es ocioso recordar que la guerra civil es el episodio de la historia colectiva de los espa?oles que no s¨®lo ha generado una mayor producci¨®n bibliogr¨¢fica, sino que a¨²n despierta mayor inter¨¦s entre los historiadores del mundo entero. Raz¨®n de m¨¢s para que las diferentes entidades p¨²blicas que han terciado en el debate pasen de la ret¨®rica propagand¨ªstica a la acci¨®n pr¨¢ctica. Porque es realmente poco edificante contemplar que en la mayor¨ªa de las declaraciones realizadas con motivo de la desdichada pol¨¦mica, tanto por parte de pol¨ªticos como de historiadores y archiveros, han predominado argumentaciones en extremo defensivas y patrimonialistas en las que la voluntad positiva y la perspectiva de futuro han brillado por su ausencia.

No ser¨ªa m¨¢s razonable que todo lo relativo a la guerra Civil se depositara en el Archivo de Salamanca?