"No soy James, Dean, soy un rebelde con causa"
Hace cuatro a?os, cuando arremet¨ªan contra ¨¦l los guerristas, se puso a hacer las maletas, para quedarse. Ahora, cuando ha perdido una elecci¨®n por primera vez desde que fue delegado de facultad, apenas tiene que hacer maletas, dice. Volver¨¢ al Instituto Nacional de Estad¨ªstica. Pero se llevar¨¢ la pol¨ªtica.
Cumpli¨® hace poco 54 a?os. Y dentro de poco los ¨²ltimos 12 como presidente. No se le ve entristecido. Casi al contrario.Pregunta. "Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio", dec¨ªa Serrat. ?Lo ve as¨ª?
Respuesta. El pasado no tiene remedio. No conviene pararse ni un segundo para llorar por el agua derramada. Como dec¨ªa santo Tom¨¢s, "contra hechos no caben argumentos".
P. ?Qu¨¦ ha aprendido que no olvidar¨¢?
R. S¨¦ un poco m¨¢s de mis propias debilidades para evitarlas, y de las debilidades humanas. Conozco ahora mejor a la gente.
P. ?Qu¨¦ ha visto que la gente no perdona a los pol¨ªticos?
R. No perdona la demagogia, es decir, la mentira. Ni perdona la corrupci¨®n.
P. ?Y qu¨¦ perdona la gente que le sorprenda que perdone?
R. ?La incompetencia!
P. ?Conf¨ªa en ser un pol¨ªtico que puede volver a pasear tranquilamente por la calle?
R. Nunca he dejado de pasear por la calle. Ahora noto un trato m¨¢s directo, se acerca m¨¢s la gente, sin reverencias siempre. El trato en Madrid, al menos conmigo, es de igual a igual.
P. Cuando est¨¢ a punto de irse, ?empieza a sentir la necesidad de que le recuerden?
R. No. Sinceramente no.
P. ?Cree que hay alguna obra por la que le recordar¨¢n?
R. He procurado evitar en toda inauguraci¨®n que se pusiera, una placa con mi nombre. El mejor recuerdo es el uso de una obra por ejemplo, las 40.000 viviendas nuevas que dejamos hechas.
P. ?Dejar¨¢ que el Leguid¨² lleve, como quiere Ruiz Gallard¨®n el nombre de Centro Cultural Joaqu¨ªn Leguina?
R. Mientras yo viva, no.
P. ?Qu¨¦ deber¨ªa aprender cuanto antes Ruiz Gallard¨®n?
R. No voy a hacer una cr¨ªtica con lo que echo de menos en ¨¦l. Lo har¨¦ dentro de 20 a?os quiz¨¢. Lo que tiene que aprender cualquiera que pase de la oposici¨®n al Gobierno es que predicar no es lo mismo que dar trigo.
P. ?El PP tiene en Madrid un programa oculto?
R. Espero que no.
P. ?Gallard¨®n tiene una cara oculta?
R. No creo que sea hombre de doblez.
P. ?Qu¨¦ echar¨¢ de menos de ser presidente?
R. Pues a la gente que me ha rodeado estos a?os.
P. ?Y qu¨¦ no echar¨¢ en absoluto de menos?
R. La parafernalia.
P. ?Se ha tomado alg¨²n ant¨ªdoto contra el s¨ªndrome de hacerse m¨¢s izquierdista por el hecho de dejar el poder?
R. S¨ª. El izquierdismo, adem¨¢s de ser una enfermedad infantil puede ser tambi¨¦n una enfermedad senil. Ser de izquierdas es justamente no ser izquierdista.
P. ?Cu¨¢l era su patrimonio cuando lleg¨® a la presidencia?
R. Ten¨ªa un Seat 131 de segunda mano, y viv¨ªa en un piso en el barrio de Tetu¨¢n.
P. ?Y ahora?
R. Tengo un Opel de segunda mano y vivo en el centro, en un piso de menos de cien metros, como antes. El salto cualitativo es que ahora mi casa tiene dos ba?os. Y, sabe usted, esto en alguna ocasiones es muy conveniente. Ja, ja, ja. He comprado a unos amigos una casa de pueblo por seis millones de pesetas. Y en el banco creo tener otros cinco o seis millones. Pero tengo una hipoteca y antes no ten¨ªa.
P. ?El Partido Popular ha triunfado en la pol¨ªtica hecha espect¨¢culo?
R. Sin duda, y por goleada. Cuando montaron el programa de Hermida sab¨ªan lo que hac¨ªan. Ese programa es el enemigo p¨²blico n¨²mero uno del socialismo. M¨¢s que El Mundo, m¨¢s que el Abc. Porque es la trivializaci¨®n de toda la pol¨ªtica. Me parece deplorable ese tipo de tertulias donde todo se trivializa, todo el mundo parece saber de todo, nunca se habla de una reflexi¨®n o de un libro. Es puro espect¨¢culo, trasladado al sal¨®n-comedor, con una impunidad intelectual tremebunda. Y el PP ha sabido aprovecharlo. El PP es la internacional situacionista, porque nunca habla de pol¨ªtica, siempre de situaciones.
P. ?Se present¨® a estas elecciones porque crey¨® que pod¨ªa evitar el naufragio o porque pens¨® que no deb¨ªa saltar del barco cuando se avecinaba un naufragio?
R. Una tormenta. Me pidieron que me presentara, y s¨®lo por eso me present¨¦. El resultado ha sido una derrota en cuanto a poder institucional, pero en votos hemos sacado m¨¢s que en 1991, y cinco puntos m¨¢s que en las elecciones europeas. No me siento culpable, aunque s¨ª responsable.
P. ?Siente que le han dado a Gonz¨¢lez una patada en su culo?
R. Se la han dado al PSOE, aunque los que fuimos en cabeza hemos recibido los impactos.
P. Si Gonz¨¢lez le preguntara si ¨¦l debe presentarse a las pr¨®ximas elecciones, ?qu¨¦ le dir¨ªa?
R. Se lo dir¨¦ a ¨¦l, y por eso no debo decirlo en p¨²blico. Yo creo que ¨¦l debe hacer su propia reflexi¨®n, y ?ahora!
P. ?A Gonz¨¢lez le queda cuerda para rato, como ¨¦l dice?
R. S¨ª, le queda cuerda para rato, pero no necesariamente donde est¨¢. Lo que deb¨ªa evitar ¨¦l y nosotros es que se deteriore como un activo que es de ¨¦ste pa¨ªs y del PSOE.
P. ?Cu¨¢l ha sido el mensaje que los espa?oles han dirigido al PSOE con estos resultados?
R. Son varios. Pero el que debemos recoger como guante inmediato viene directamente de la internacional situacionista, del Partido Popular, y es el siguiente: marque usted el territorio, porque, si no, le vamos a mear a usted en todos los ¨¢rboles.
P. O sea, que le preocupa que no s¨®lo IU, sino tambi¨¦n el PP, ocupe terreno al PSOE.
R. Me preocupa muy poco, a medio, plazo, Izquierda Unida. Me preocupan algo ciertas actitudes de Anguita, m¨¢s propias del viejo anarquismo ib¨¦rico trufado con Stalin. Pero lo que de verdad me preocupa es que el PSOE debe repintar algunos blasones y se?alar cu¨¢l es su territorio pol¨ªtico. Que no consiste en echarse m¨¢s a la izquierda ni m¨¢s a la derecha.
P. ?En qu¨¦ consiste, pues?
R. En volver a las esencias, no. Marcar el terreno consiste en saber d¨®nde les aprieta el zapato, a las capas sociales a las que queremos dirigimos electoralmente, y liderar la b¨²squeda de soluciones. El PP tiene la pol¨ªtica del man¨¢: ?que a usted le aprieta el zapato? Le compro unos nuevos y m¨¢s grandes. ?Que quiere un vestido? Catorce. ?Un reloj? El de la catedral, como dec¨ªa Pepe Pinto, esposo de la Ni?a de los Peines.
P. Cuando ve que Borrell es promovido como un l¨ªder, usted, amigo suyo, ?le anima a que d¨¦ el paso o a que espere?
R. Si me preguntara, le animar¨ªa. Creo que tiene una gran capacidad intelectual, una gran capacidad de comunicaci¨®n, y es de los que marcan el territorio.
P. Hay carreras que si no aciertan con el momento pueden ser como las bengalas, destellantes y ef¨ªmeras, ?no?
R. Estamos en pol¨ªtica tambi¨¦n para fundirnos, de vez en cuando, por nuestras ideas. Yo le animo a ¨¦l y a otros. ?Qu¨¦ miedo reverencial tienen que tener ¨¦l u otros -Solana, Rodr¨ªguez Ibarra, Lerma o yo mismo-? No somos ancianos, tenemos una experiencia bastante plural y amplia, y algunas ideas.
P. Hablando de miedo reverencial, ?qu¨¦ resume mejor su personalidad pol¨ªtica: ser un rebelde, un librepensador?
R. Yo no soy James Dean. Mis rebeld¨ªas tienen todas causa. Me gusta el t¨¦rmino librepensador, aunque es un poco antiguo. Creo que soy reflexivo, un intelectual en definici¨®n vasca, porque he escrito m¨¢s de un libro, ja, ja, y creo que tengo instinto pol¨ªtico y puedo seguir siendo ¨²til al PSOE.
P. Entonces, ?deja el oficio de pol¨ªtico pero no la pol¨ªtica?
R. Dejo el oficio de presidente de la comunidad aut¨®noma, a la que Dios guarde muchos a?os. Pero no dejo la pol¨ªtica.
P. ?Hoy es m¨¢s marxista de Groucho o m¨¢s marxista de Carlos?
R. Yo, de Groucho, todo, de Carlos, una parte.
P. ?Presume de mayor porque ¨¦sa es una forma de seducir?
R. Hombre, es una coqueter¨ªa no lo voy a ocultar. Pero, no se crea usted... No pican.
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