El fiscal pide 20 millones para Paloma Hurtado por el tiro que desfiguro su cara
La actriz Paloma Hurtado, de 49 a?os, rompi¨® a llorar ante el tribunal. La Audiencia juzgaba ayer al polic¨ªa nacional que, involuntariamente, dispar¨® un tiro que desfigur¨® el rostro de la actriz cuando paseaba por la zona centro de Madrid, hace a?o y medio. Y los llantos de impotencia de la popular taca?ona del espacio de televisi¨®n Un, dos, tres ("sigo trabajando, porque si no, no cobro"; "me da verg¨¹enza que la gente me vea as¨ª, con el labio ca¨ªdo y sin poder levantarlo... ") debieron de enternecer al fiscal qu¨¦ intervino en el juicio: decidi¨® elevar a 20 millones de pesetas la indemnizaci¨®n que, a su juicio, debe abonarle el Estado por las secuelas y el da?o moral que sufre desde entonces. Inicialmente, el ministerio p¨²blico hab¨ªa fijado la indemnizaci¨®n en 12 millones.Paloma Hurtado result¨® herida el 28 de octubre de 1993. Paseaba con su marido y su perro (un yorkshire-terrier) por la calle de Los Madrazo -cerca de la sede de la Brigada Provincial de Documentaci¨®n- cuando a un polic¨ªa que prestaba vigilancia a las puertas de ese departamento se le escurri¨® el arma reglamentaria. Quiso evitar que se le cayera el fusil al suelo (no ten¨ªa puesto el seguro) y, accidentalmente, apret¨® el gatillo. Sali¨® un cartucho de proyectiles m¨²ltiples, que fueron a impactar en el rostro de Paloma Hurtado y en el de su perro, al que llevaba en brazos. El animal, por el que la actriz sent¨ªa devoci¨®n, muri¨® en el acto y con ello salv¨® probablemente la vida de su due?a. El fiscal ha tenido en cuenta tambi¨¦n esta desgracia; de ah¨ª que hayq solicitado 260.000 pesetas (que se incluyen en los 20 millones) por la muerte del can.
La actriz fue operada tras el suceso para extraerle los proyectiles, y le han quedado como secuelas una cicatriz en la mejilla derecha, que afecta al ojo y dificulta el cierre de su p¨¢rpado, y una ligera par¨¢lisis en la parte derecha del labio.
El juicio celebrado ayer fue algo at¨ªpico. El -acusado el agente Jos¨¦ Luis Alonso R¨ªos- pas¨® casi inadvertido para la mara?a de c¨¢maras de televisi¨®n y fot¨®grafos congregados en la sala: los objetivos estuvieron m¨¢s atentos a los gestos de la actriz que al asustado agente, que ni siquiera abri¨® la boca: acept¨® ser el autor del infortunado disparo y evit¨® con ello su interrogatorio.
PASA A LA P?GINA 3
Capacidad de interpretaci¨®n
El fiscal redujo a 75.000 pesetas de multa los 6 meses de c¨¢rcel que ped¨ªa para el polic¨ªa
El abogado del polic¨ªa, Juan Carlos Fern¨¢ndez, mostr¨® un rictus que aparentaba incredulidad ante los testimonios de los testigos que auguraban a Paloma Hurtado un desolador panorama profesional.En un intento de restar dramatismo a las fatales consecuencias -secuelas y depresiones- que la actriz confes¨® padecer desde el accidente, el abogado del polic¨ªa apel¨® a la capacidad interpretativa de la actriz para solapar sus lesiones ante el p¨²blico.
Los m¨¦dicos indicaron que la humorista tiene lesionados varios m¨²sculos de la cara y que, espor¨¢dicamente, sufre hemorragias nasales y dolores que afectan a parte de sus dientes debido a grup¨²sculos met¨¢licos que quedaron alojados en sus enc¨ªas tras el disparo.
A ninguno de los testigos le tembl¨® la voz a la hora describir el cambio que ha experimentado la carrera de la actriz. Tras el accidente, Hurtado ha trabajado espor¨¢dicamente para televisi¨®n. Los testigos hablaron de la inseguridad de la actriz ante las c¨¢maras y de los deslucidos enfoques que deben efectuar las c¨¢maras para disimular su cicatriz.'... La carrera profesional de Paloma Hurtado "est¨¢ peligrosamente amenazada de muerte, pues resulta dif¨ªcil trabajar con ella debido a las secuelas que sufre", indic¨® al tribunal el realizador de televisi¨®n Jaime Azpilicueta.
El abogado de Paloma Hurtado centr¨® sus alegaciones en el da?o que, en su opini¨®n, ha provocado el disparo a la vida profesional de la actriz. Por eso quiere que el Ministerio de Justicia e Interior (el polic¨ªa estaba de servicio) le indemnice con 456 millones de pesetas.
Fueron tantas las cuitas que le, atribuyeron los testigos, que el tribunal dictamin¨¦ que la actriz subiese al estrado para observar directamente su estado. Hasta ese momento, Paloma Hurtado hab¨ªa estado sentada entre el p¨²blico, acompa?ada de su marido; sin decir nada, y presa de las c¨¢maras. Insconcientemente dirig¨ªa su mano a la parte derecha de su rostro, donde sus secuelas son mas visibles, cuando arreciaban los fogonazos.
Las l¨¢grimas, envueltas en palabras de impotencia ("por qu¨¦ he tenido que sufrir yo esto"), afloraron en sus ojos m¨¢s iniciar su intervenci¨®n. Se?al¨® que a ra¨ªz del accidente su actividad profesional se ha desgraciado: "S¨®lo me llaman para entrevistas y como jurado para concursos de humor. No s¨¦ que va a pasar con mi vida". Le irritaron algunas preguntas del abogado del polic¨ªa en las que cuestionaba su r¨¢pida incorporaci¨®n al trabajo t¨ªas el accidente. Asegur¨® que sus amigos (entre ellos, Narciso Ib¨¢?ez Serrador, a quien aludi¨® como Chicho), le hab¨ªan alentado a que trabajase para luchar contra la depresi¨®n que le embarga desde entonces.
"Tengo que trabajar, porque si no lo hago, no cobro", sentenci¨®. Y agreg¨®, entre sollozos: "?Por qu¨¦ tengo que vivir mal [econ¨®micamente]? Por qu¨¦ ahora, despu¨¦s de tantos a?os de trabajo, tengo que privarme de mis caprichos, de poder comprarme un traje...? Ten¨ªa que trabajar y lo hice".
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