Las municipales de hoy en Francia, prueba de fuego para la izquierda

La izquierda francesa se juega mucho en las elecciones municipales de hoy. Un buen resultado confirmar¨¢ que la digna derrota de Lionel Jospin en las presidenciales no fue una casualidad y que la recuperaci¨®n est¨¢ en marcha; un, mal resultado significar¨¢ que la traves¨ªa del desierto no ha concluido y que la derecha mantendr¨¢ durante a?os su hegemon¨ªa.Toda la atenci¨®n se centra en las 34 ciudades de m¨¢s de 100.000 habitantes. Derecha e izquierda se las reparten casi al 50%. La izquierda tiene el problema de que sus alcaldes son m¨¢s antiguos que los conservadores y, por tanto, pueden verse perjudicados por la voluntad de cambio de los electores. La derecha cuenta con el impulso conferido por la victoria presidencial de Jacques Chirac, y espera lograr en los ayuntamientos la misma hegemon¨ªa de que dispone en los dem¨¢s niveles pol¨ªticos.

Jospin ha preferido no participar demasiado en la campa?a, pero en la recta final ha insistido en un mismo mensaje: es peligroso que la derecha lo controle todo. Y, dentro de la derecha, los gaullistas de la Uni¨®n por la Rep¨²blica (RPR), que cuentan con la presidencia, la jefatura del Gobierno, la presidencia del Congreso y la alcald¨ªa de Par¨ªs.

La alcald¨ªa de Par¨ªs es el mejor ejemplo del riesgo denunciado por los socialistas: la falta de oposici¨®n (19 de los 20 distritos son dominados por los conservadores) ha propiciado una corrupci¨®n generalizada en el sector de la vivienda de protecci¨®n oficial. Sin embargo, el hombre designado por Jacques Chirac para sucederle, Jean Tiberi, tiene posibilidades de hacer el pleno: 20 distritos sobre 20.

Otra denuncia de los socialistas se centra en Burdeos, donde el primer ministro, Alain Jupp¨¦, se presenta como sucesor del tambi¨¦n gaullista Jacques Chaban-Delmas. Chirac critic¨® durante la campa?a la acumulaci¨®n de cargos pol¨ªticos. Y jupp¨¦ espera sumar una alcald¨ªa importante a sus cargos de primer ministro y presidente del RPR. "La alcald¨ªa es para seis a?os, en los otros dos puestos puedo durar meses", se defiende Jupp¨¦.