Estalla una bomba en el Congreso colombiano sin causar v¨ªctimas

Seis mil polic¨ªas y soldados patrullando la capital colombiana evidenciaban ayer las medidas de emergencia adoptadas para contrarrestar una posible ola terrorista que recuerda a la serie de atentados que sacudi¨® Bogot¨¢ en 1991, en plena guerra al narcotr¨¢fico. En la tarde del jueves (madrugada del viernes en Espa?a), una bomba de diez kilos de dinamita estall¨® en la plaza de N¨²?ez, acceso trasero de la sede del Congreso y pr¨®xima a la sede presidencial, sin causar v¨ªctimas. Tan s¨®lo un empleado result¨® herido.El presidente Ernesto, Samper hizo p¨²blico un comunicado advirtiendo que no permitir¨¢ "que quienes pretenden sembrar el temor en el pa¨ªs contin¨²en adelante en su prop¨®sito"; el jefe de Estado se?al¨® que el objetivo de la acci¨®n terrorista es "perturbar" la actividad parlamentaria.

En la parte exterior del edificio qued¨® un enorme boquete. Y los escombros que dej¨® el impacto se a?aden a los desechos de unas obras de rehabilitaci¨®n iniciadas hace m¨¢s de un a?o. El trasiego de' alba?iles y de personal ajeno al Congreso pudo haber facilitado la colocaci¨®n del explosivo que, en principio, fue atribuida por el ministro de Gobierno, Horacio Serpa, a "delincuentes" comunes, al desestimar la veracidad de un comunicado en el que se atribu¨ªa la acci¨®n al Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional, una de las organizaciones guerrilleras con las que el Gobierno de Samper pretende llegar a un acuerdo de paz.

A cuatro d¨ªas de finalizar la legislatura, la sede del Parlamento estaba notablemente concurrida: unas 150 personas,, entre congresistas, ministros, escoltas, empleados y periodistas, se encontraban en los pasillos o participaban en los debates. En el recinto del Senado, donde minutos antes de la explosi¨®n se aprob¨® la ley estatutaria de la Administraci¨®n de Justicia, estaban unos 60 legisladores, el ministro de Gobierno, el de Justicia, N¨¦stor Humberto Mart¨ªnez, y el procurador, Orlando V¨¢zquez, quien, en medio de la confusi¨®n, dijo que cre¨ªa que ese atentado era contra ¨¦l. V¨¢zquez fue relacionado esta semana al, Proceso 8. 000, que investiga v¨ªnculos de pol¨ªticos con el cartel de Cali. "Discut¨ªamos leyes muy delicadas y controvertidas, que afectan la Actividad delictiva", afirm¨® ayer el presidente del Senado, Juan Guillermo ?ngel.

El atentado contra el Congreso prolonga una serie de actos terroristas iniciados el s¨¢bado anterior, cuando en un c¨¦ntrico parque de Medell¨ªn otra carga de diez kilogramos de dinamita hizo explosi¨®n causando la muerte a 22 personas.

Desde entonces, otros explosivos de menor importancia y sin consecuencias, han estallado o han sido desactivados en Medell¨ªn, Barranquilla y Bogot¨¢.

El jueves, la polic¨ªa de Medell¨ªn, que en un primer momento dijo que el atentado del parque ten¨ªa "el sello de la guerrilla", volvi¨® a responsabilizar a los guerrilleros de la colocaci¨®n de una carga de 50 kilos de dinamita, que fue desactivada, en las proximidades de una sede de la instituci¨®n, en la localidad de El Pe?ol, en la periferia de la ciudad.

Mientras tanto, el capo del cartel de Cali, Gilberto Rodr¨ªguez Orejuela, fue mostrado ayer a los periodistas en la peque?a celda de la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad de La Picota, en Bogot¨¢, donde est¨¢ internado.