Arganzuela inaugura una ciudad sobre el tren

Un formidable proyecto urban¨ªstico que pretende reanimar ocho kil¨®metros de ciudad moribunda en el coraz¨®n de Madrid encara su recta final. Seis a?os de obras entre Pr¨ªncipe P¨ªo y M¨¦ndez ?lvaro, 21 empresas constructoras y 34.000 millones de pesetas han dejado a Madrid 6.100 plazas de aparcamiento, 3.500 viviendas, 200 oficinias, ocho kil¨®metros de carril-bici, siete, kil¨®metros de calles, seis parques, tres polideportivos y una l¨ªnea de cercan¨ªas que unir¨¢ el noroeste de la capital con el sureste. Es el Pasillo Verde Ferroviario, la mayor acci¨®n urban¨ªstica emprendida nunca en Espa?a,seg¨²n sus promotores.Renfe y el Ayuntamiento de Madrid firmaron en 1989 un matrimonio de conveniencia para enterrar la abandonada v¨ªa qu¨¦ enlazaba las estaciones de Pr¨ªncipe P¨ªo y Delicias y ensayar as¨ª un servicio de transporte p¨²blico de viajeros. Los terrenos liberados por la operaci¨®n, robados al tren, han servido para hacer ciudad: parques, calles, viviendas, oficinas y polideportivos regalan hoy calidad de vida a los vecinos del que fue el corredor m¨¢s deprimido del territorio de Arganzuela.

Y gratis. Se han subastado 34 parcelas para recaudar el dinero con el que hacer todas estas obras p¨²blicas. En su tramo final, el presupuesto no llegaba y se a?adieron algunos suelos para cuadrar las cuentas. Los primeros c¨¢lculos, en 1989, sumaron 17.000 millones de pesetas para toda la operaci¨®n. Ahora ya supone el doble.

La maquinaria arranc¨® hace seis a?os y seg¨²n el informe del consorcio Pasillo Verde sobre obra contratada, los ¨²ltimos trabajos finalizar¨¢n en diciembre.

Los cuatro tramos de la obra ferroviaria est¨¢n ejecutados al 85%. En los pr¨®ximos d¨ªas comenzar¨¢ la instalaci¨®n de los b¨¢culos de las catenarias en toda la l¨ªnea. De las tres estaciones, Pir¨¢mides (en la foto) y, M¨¦ndez ?lv¨¢ro est¨¢n muy avanzadas.

Los trabajos en Delicias, que tendr¨¢ un apeadero en superficie, se han emprendido estos d¨ªas. De las 31 obras en que se divide el proyecto, s¨®lo 13 no han terminado. Y de ¨¦stas, ocho est¨¢n sobre el 75% de ejecuci¨®n.

El dise?o inicial, tras seis a?os de gestaci¨®n, ha sufrido grandes trueques. Se eliminaron el auditorio previsto y miles de oficinas. El consejero delegado del consorcio, Manuel Ayll¨®n, arquitecto autor y gestor del proyecto, se justifica: "La cultura urban¨ªstica de moda en 1989, era calificar mucho suelo para terciario [sector servicios]. Esa cosmovisi¨®n fall¨® y no tuvimos reparos en obedecer a la realidad que solicitaba m¨¢s viviendas". Sobre el corredor ferroviario se hab¨ªan previsto hace seis a?os tan s¨®lo 1. 500 viviendas. y m¨¢s de 100.000 metros cuadrados de terciario. Al final, habr¨¢ 3.500 casas -cuyos precios oscilan entre 20 y 35 millones de pesetas, salvo los 750 pisos de protecci¨®n oficial- y s¨®lo 200 oficinas. El.90% de las parcelas subastadas, incluida una esquina calificada para uso industrial, son residenciales.

El cambio m¨¢s llamativo fue el de la promotora inmobiliaria Fonfir, que compr¨® por 14.000 millones un extenso latifundio junto a la estaci¨®n de Pr¨ªncipe P¨ªo para levantar oficinas. Cuando ese negocio quebr¨®, Fonfir, que a¨²n no hab¨ªa comenzado sus obras, pidi¨® un permiso especial para edificar viviendas. Hace un a?o se desbloque¨® el conflicto, pero los ladrillos no han aparecido por la zona, en la que se levantar¨¢n seis bloques de seis alturas donde caben 885 pisos.

Desde 1989, las obras se han repartido desde el Puente de los Franceses hasta M¨¦nd¨¦z ?lvaro, pasando por el paseo Imperial, y los barrios de Pir¨¢mides, Pe?uelas y Delicias ?ste ha sido el resultado.

Pr¨ªncipe P¨ªo. Entre el Puente de los Franceses y la estaci¨®n de Pr¨ªncipe P¨ªo ha crecido un parque, el de La Bombilla, con polideportivo especializado en tenis y gestionado por la federaci¨®n madrile?a de este deporte. Las gr¨²as contin¨²an activas en esta zona, pues todav¨ªa se construye una pasarela sobre las v¨ªas del tren que servir¨¢ como mirador excepcional del paisaje de los Austrias. Junto a ese puente se prepara un templete sobre el que se posar¨¢ un monumento a Goya: un dado de piedra recordar¨¢ al enamoradizo pintor. Detr¨¢s del monumento, los operarios se afanan en la ampliaci¨®n del parque del Oeste. Una finca vallada guarda las ¨²nicas mulas que tienen autorizaci¨®n para utilizar la calzada de los bulevares madrile?os y hacer el pase¨ªllo en la plaza de toros de Las Ventas. Junto a estos terrenos las excavadoras vacian una parcela que se convertir¨¢ en Museo de la Rosa, un edificio proyectado con grandes paneles met¨¢licos y de vidrio.

Por ¨²ltimo, aprovechando un espacio di¨¢fano que existe sobre Casa Mingo, los obreros construyen una plaza dura a la que se podr¨¢ acceder mediante una pa sarela de pendiente suave. En ella se instalar¨¢n dos grandes pantallas para el futuro cine estable de verano. Ayll¨®n recuerda que cuando arranc¨® el proyecto se top¨® con una expropiaci¨®n que no deseaba: "Casa Mingo forma parte de la cultura urban¨ªstica madrile?a. Y su pollo y su cabrales, del ambiente universitario. Por eso evit¨¦ que avanzara su expediente de expropiaci¨®n". Ahora, encima del caser¨®n se instalar¨¢ el cine al aire libre, cuyo proyecto corresponde a Ricardo S¨¢nchez Lampreave.

El dise?o de las distintas piezas del Pasillo Verde tiene firma desconocida. Ayll¨®n presume: "He preferido dar una oportunidad a los arquitectos que no la tienen, chavales j¨®venes con ganas de lucirse".

Imperial. Las carboneras que abastec¨ªan Madrid estaban junto a la estaci¨®n Imperial. Las ruinas de aquellos chiribitiles a¨²n permanecen en el barrio. Aqu¨ª hay previsto un parque que a¨²n no se ha iniciado y un polideportivo que ser¨¢ el m¨¢s grande de Arganzuela. Pasillo Verde ha sacado a concurso la privatizaci¨®n del polideportivo. El Instituto Municipal de Deportes ceder¨¢ durante 25 a?os la explotaci¨®n de este equipamiento a la empresa privada que ponga los 800 millones de pesetas que vale su construcci¨®n. S¨®lo se ha presentado una oferta, que ser¨¢ adjudicataria en las pr¨®ximas semanas. El equipamiento, de 37.420 metros cuadrados, seg¨²n el proyecto, tendr¨¢ una piscina cubierta, otra al aire libre, un pabell¨®n polideportivo, un gimnasio, seis pistas de tenis, cuatro de frontenis y cuatro de paddle.

Pe?uelas. La antigua casa del jefe de estaci¨®n de Pe?uelas, donde viv¨ªa hasta hace unos a?os el ferroviario Francisco Naranjo, portavoz de CC OO, permanece en pie. "Es mi ¨²nica frustraci¨®n", confiesa Ayll¨®n. "No la pude tirar porque el camarada Eduardo Mangada [que fue concejal de Urbanismo y consejero de Pol¨ªtica Territorial] la incluy¨® dentro del cat¨¢logo de edificios protegidos". Junto a la casa reposa un terreno reservado a centro educativo. Y dominando el paisaje, un parque de moderno dise?o bajo el que existen mil plazas de aparcamiento. Junto al parque hay una piscina municipal y cientos de nuevas viviendas. Tambi¨¦n conserva Pe?uelas la primera corrala que rehabilit¨® el equipo de Enrique Tierno y una plaza remozada llena de vida: ni?os gozando en los columpios y ancianos julepeando en las mesas. Tan s¨®lo falta una parroquia cuyo terreno, ya cedido a la Iglesia, bendijo hace unos d¨ªas el obispo de Madrid.

Delicias. Junto al Museo Ferroviario arranca un parque pensado para el paseo con una monumental pasarela. Le contin¨²a otro parque, el del Bronce, construido a espaldas de la ciudad industrial. En esta zona se levantan tres plataformas de hormig¨®n que sirven de mirador sobre el parque Tierno Galv¨¢n.

Pasillo ferroviario. Del nuevo tramo de cercan¨ªas, s¨®lo est¨¢ perfectamente rematado el comienzo: Pr¨ªncipe P¨ªo. El resto sigue en obras. La estaci¨®n de Pir¨¢mides ha situado su entrada frente al hotel del mismo nombre. En Delicias, un enorme barranco junto a la esquina con la calle del Ferrocarril se dispone a dejar hueco a la estaci¨®n. En M¨¦ndez ?lvaro, las obras est¨¢n muy adelantadas: hace d¨ªas se instalaron las escaleras mec¨¢nicas. A unos metros, los camiones retiran tierra para levantar la nueva terminal sur de autobuses.

Hasta el momento se han gastado 32.641 millones de pesetas. Ayll¨®n calcula que llegar¨¢n a 40.000 millones, de los que 21.000 se comieron las infraestructuras ferroviarias. El consejero delegado del Pasillo Verde se queja de la falta de colaboraci¨®n entre instituciones, un inconveniente que, seg¨²n dice, ha encarecido el proyecto en 1.000 millones de pesetas. Como ejemplo, recuerda la necesidad de contratar un escudo o topo mec¨¢nico para hacer en mina el t¨²nel bajo el Campo del Moro, cuando habr¨ªa sido m¨¢s barato a cielo abierto. En el final del camino, Ayll¨®n concluye que lo m¨¢s complejo fue el desv¨ªo de los servicios -que cost¨® 3.000 millones- sin detener el pulso de la ciudad. "Por la falta de planos sobre zonas muy antiguas, nos encontramos dos veces con el t¨²nel del metro, lo que nos oblig¨® a parar las obras", se?ala.