Una historia de Boudin a C¨¦zanne

La exposici¨®n Impresionistas franceses, de la colecci¨®n del Museo Fuji de Tokio, cobra una importancia excepcional desde la perspectiva de su exhibici¨®n en Espa?a donde, salvo en el Museo Thyssen y un par de obras en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, no hay nada al alcance de la mirada p¨²blica de este movimiento capital del arte contempor¨¢neo. Por lo dem¨¢s, basta recitar el nombre de los autores de las obras seleccionadas para la ocasi¨®n para que se comprenda la calidad y el alcance del empe?o, pues, entre otros, ah¨ª est¨¢n Boudin, Manet, Monet, Pisarro, Sisley, Renoir, Degas, Morisot, Cassat, Caillebotte o C¨¦zanne. Con este recitado nominal se aprecia asimismo que hay los mimbres imprescindibles para, con la veintena de cuadros reunidos, poder seguir sint¨¦ticamente la historia del impresionismo, desde los preliminares de Boudin hasta la superaci¨®n del impresionismo por C¨¦zanne.El normando Boudin fue, en efecto, el iniciador en la pintura de paisaje al aire libre del adolescente Monet, el personaje central del genuino impresionismo; pero tambi¨¦n Manet, objeto de esc¨¢ndalo en los salones parisienses de comienzos de la d¨¦cada de 1860, se convirti¨® en un punto de referencia esencial para estos revolucionarios pintores. La disc¨ªpula, modelo y cu?ada de Manet, Berthe Morisot, cuya obra, como la de la americana Mary Cassat, est¨¢ hoy en plena fase de merecid¨ªsima reivindicaci¨®n cr¨ªtica, aportan con su presencia un aliciente m¨¢s a la muestra, algo que le ocurre, aunque en este caso, si cabe, con mayor estruendo, a Gustave Caillebotte, pintor y coleccionista extraordinario, hasta hace poco escasamente popular, pero que deslumbr¨® al gran p¨²blico con motivo de su gran retrospectiva celebrada en Par¨ªs el a?o pasado, en conmemoraci¨®n del centenario de su muerte.

Con Pisarro y Sisley tenemos, junto. a la figura central de Monet, a los verdaderos protagonistas del impresionismo, ese movimiento con el que tambi¨¦n mantuvieron relaci¨®n, aunque m¨¢s epis¨®dica, grandes artistas como Renoir, Degas y C¨¦zanne. Por ¨²ltimo, se nos ofrece tambi¨¦n la posibilidad de contemplar algunos maestros menores como Loiseau, Martin y Le Sidaner, que, ya en una fase hist¨®rica posterior, fueron ¨¦mulos de lo que se conoce como neoimpresionismo. En definitiva, se trata de una iniciativa formidable que no puede perderse ning¨²n buen aficionado espa?ol al arte.