"Me consta que la afici¨®n de Madrid est¨¢ conmigo"
Aunque aborrece la infidelidad, su ¨²nico novio lleva siempre los cuernos puestos. Cristina S¨¢nchez, madrile?a de 23 a?os. A primeros de junio cruzaba a hombros las puertas grandes de las plazas de Getafe y Coslada, con cuatro orejas y un rabo, el recuerdo de esos bichos que, para un torero, son al mismo tiempo el- peor amigo y el mejor rival. En la Escuela Taurina de El Rat¨¢n encabez¨® las promociones del 90 y 91 desde su 1903, ronda triunfal el umbral de Las Ventas, impaciente y casi furiosa por lo mucho que se le resiste la Monumental. Para ese d¨ªa se est¨¢ ha ciendo un traje que guarda con el mismo sigilo que una novia. ?Qui¨¦n le, iba a decir a su padre, el banderillero Antonio S¨¢nchez, que con cuatro hijas, mujere¨¢ todas, -alg¨²n d¨ªa ser¨ªa apoderado de una de ellas, empe?ada en imitar su oficio! Cristina pudo a base de tes¨®n, pero el d¨ªa que se corte la coleta lo har¨¢ s¨®lo -en sentido figurado.Pregunta. ?Por qu¨¦ se retrasa tanto su? deb¨² en Las Ventas?
Respuesta. No s¨¦ qu¨¦ pensar. Las conversaciones con Jos¨¦ Luis Lozano, empresario de la plaza, comenzaron en marzo y aun siguen. Torear all¨ª es mi mayor ilusi¨®n y casi me enfadan tantas largas, por que me consta que la afici¨®n de Madrid est¨¢ conmigo.
P. ?Qu¨¦ recuerda de su paso por la escuela de El Bat¨¢n?
R. Cosas buenas. Por parte de mis, compa?eros, todo era, carino, apoyo, y sinceras alabanzas. Entre m¨¢s de 100 chicos, sal¨ª dos veces primera de mi promoci¨®n, pero para ellos las cosas han sida m¨¢s f¨¢ciles. Por ser mujer, te miran con lupa.
P.?Lo llama usted zancadilla?
R. S¨ª, una de tantas, pero, prefiero callar. Estoy harta de andar con la pol¨¦mica detr¨¢s, cuando lo ¨²nico que quiero es ser torero. Pero me he metido en un mundo muy machista y hay que apechugar.
P. ?No prefiere decir torera?
R. No. Por supuesto soy ante todo una mujer, pero me siento torero. "Torera" me suena poco serio. Estoy acostumbrada a un mundo de hombres.
P. ?Su ropa de trabajo es especial?
R. A?ado a mis trajes alg¨²n detalle femenino, sin que resulte cursi ni hortera. Para mi deb¨² en Las Ventas me est¨¢n haciendo algo muy e9ecial, pero es un secreto.
P. ?Por qu¨¦ raz¨®n se cortar¨ªa la coleta?.
R. S¨®lo por un hijo. Estar¨¦ en activo mientras pueda entrenar tan duro c¨®mo el toreo exige.
P. Usted vive en Parla, ?hay algo de Madrid que le guste m¨¢s que Las Ventas?
R. El carisma de esa plaza es especial para cualquier torero. Madrid me encanta y en Parla me he criado, noto el cari?o de la gente y a?oro, los tiempos en que aquello era mucho m¨¢s pueblo.
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