500 millones en Iodos y p¨®lizas

Una pareja de coru?eses con la final futbol¨ªst¨ªca aguada y el coche enlodado, un taxista en paro forzoso o un vecino del Manzanares cuya casa se inunda "cada vez que mea un p¨¢jaro" aguardaban ayer con impaciencia. Estaban api?ados en la puerta de la delegaci¨®n regional del Consorcio de Compensaci¨®n de Seguros. Hab¨ªa all¨ª una riada de quejas en busca de indemnizaci¨®n. Pero en muchos casos los damnificados por la tromba de agua del pasado s¨¢bado tendr¨¢n que adelantar de su bolsillo el coste de las reparaciones."Dejarnos el coche escondido en el garaje de un familiar para que no nos rompieran las ventanillas por tener matr¨ªcula gallega,". El remedio que adoptaron Rosa Chico y Diego Latas, coru?eses llegados en pos de la victoria del Deportivo, fue peor que la enfermedad. No s¨®lo se empaparon en el estadio Bernab¨¦u, sino que se han quedado sin coche para regresar a casa.

El Hyunday de la chica, comprado hace dos meses, apareci¨® con las ventanillas a salvo... y un metro de agua alrededor. La riada convirti¨® en un lago el garaje de la zona de Coraz¨®n de Mar¨ªa donde qued¨® cobijado el autom¨®vil. "Lo dej¨¦ con el dep¨®sito en la reserva y lo encontr¨¦ mediado, pero de agua", dice la due?a. "Ahora no me dejan subir el coche al tren porque no ¨¢rida. Lo que intento es que, por lo menos, me lo arreglen aqu¨ª lo antes posible", contin¨²a Rosa. Diego rebusca en la cartera las entradas futbol¨ªsticas. Si el Depor gana al Valencia en segunda convocatoria habr¨¢ al menos una alegr¨ªa entre tanto desastre.

La pareja de j¨®venes coru?eses son los ¨²ltimos de una fila compacta que llega hasta la puerta de la delegaci¨®n del consorcio, en el paseo de la Castellana, 44. Por delante, una veintena de, ciudadanos quejosos.

A eso de la una de la tarde, Antonio Alonso es ya un experto en siniestros. A las ocho de la ma?ana estaba en su compa?¨ªa de seguros para dar "el primer parte en 14 a?os". "All¨ª me han dicho que si quiero una reparaci¨®n r¨¢pida era mejor presentar los papeles directamente aqu¨ª". Decidido a poder utilizar cuanto antes su BMW, a las nueve se plantaba en la puerta del consorcio. "Pero me faltaban las fotocopias de la p¨®liza y el recibo". Ahora vuelve con ellas en la mano. Calcula que la reparaci¨®n costar¨¢ "un mill¨®n y medio de pesetas". Su coche es uno de los 60 que quedaron atrapados en el garaje-balsa de la calle de Inglaterra, 1, en Pozuelo de Alarc¨®n.

-?Sabe usted qu¨¦ pasa con los coches viejos? -pregunta la propietaria de un veh¨ªculo de m¨¢s de cuatro a?os, "pero con s6lo 17.000 kil¨®metros".

-Pues rece para que no le den siniestro total -tercia otro colista.

Siniestro total

La recomendaci¨®n tiene fundamento. A unos. 200 metros d¨¦ all¨ª, la directora de operaciones del Consorcio de Compensaci¨®n ?te Seguros, Pilar Gonz¨¢lez de Frutos, se?ala: "Los grandes-paganos ser¨¢n los due?os de coche viejo". Se aplica la normativa: si el valor del coche es inferior al coste de la reparaci¨®n, siniestro total. 0 sea, no se arregla y la indemnizaci¨®n para el due?o es el recio de su autom¨®vil, fijado, en funci¨®n de su antig¨¹edad.,

Los de coche viejo no son las ¨²nicas v¨ªctimas previsibles. A ellos se sumar¨¢n los ciudadanos sin p¨®liza que cubra los da?os naturales y tambi¨¦n los propietarios de coches -nuevos o no cuyos sistemas electr¨®nicos se hayan visto afectados por el agua. "En estos casos, la reparaci¨®n tambi¨¦n puede ser superior al valor", se?ala la directora. Pilar Gonz¨¢lez proporciona una f¨®rmula general: "Si el agua s¨®lo ha cubierto las tres cuartas partes de las ruedas, la reparaci¨®n ser¨¢ f¨¢cil y barata". Cuanto m¨¢s haya subido el nivel del l¨ªquido, peor para la viabilidad y/o el coste de la reparaci¨®n.

Pero los coches (100 casos) no eran la mayor¨ªa de las reclamaciones presentadas ayer en ¨¦l consorcio. Otras 140 se refer¨ªan a da?os en inmuebles. Los da?os asegurados rondar¨¢n los 500 millones de pesetas. Entre los afectados que ya se han dirigido a este organismo p¨²blico figuran el Zoo de Madrid, el centro comercial La Esquina del Bernab¨¦u, el propio estadio del Real Madrid y el Club de Campo.

Tanto en el caso de coches como en el de edificios, los propietarios se arriesgan a tener que adelantar el coste de la reparaci¨®n. "Si los operarios que arreglan los desperfectos no se avienen a cobrar directamente del consorcio, los afectados tendr¨¢n que pagar directamente la factura.. Luego, nosotros se la abonaremos, a partir de una semana despu¨¦s de hecho el arreglo", puntualiza Gonz¨¢lez.