La realeza europea se volc¨® en la boda de Pablo de Grecia

Ser un rey destronado desde 1973 y en el exilio desde 1967 no le impidi¨® a Constantino de Grecia una presencia masiva de las casas reales europeas -con o sin trono- en la boda de su hijo mayor, Pablo, celebrada ayer en Londres. La lista fue apabullante, empezando por la familia real espa?ola y la danesa en pleno, y siguiendo con la reina de Inglaterra, su esposo el pr¨ªncipe Felipe y su hijo Carlos, adem¨¢s de los soberanos de Suecia y los de Jordania. Todo ello contribuy¨® a convertir la boda de Pablo Glucksburg en el acontecimiento social de la temporada en Europa.

Los regios invitados vinieron a confirmar las. previsiones de la prensa conservadora brit¨¢nica, que hab¨ªa catalogado el enlace del hijo mayor del ex rey de Grecia y Marie-Chantal Miller, como la m¨¢s importante boda real a celebrar en Londres desde la de los, Duques, de York, en 1986.El nombre del contrayente que figuraba en todo el material informativo distribuido a la prensa era el de pr¨ªncipe Pablo de Grecia, lo que no habr¨¢ sido recibido con especial entusiasmo en el pa¨ªs, cuyos ciudadanos votaron a favor de la abolici¨®n de la Monarqu¨ªa en 1973.

Pero la ceremonia en pleno, oficiada con todo el fasto de la iglesia ortodoxa, constituy¨® una fiesta de encuentro para la- gran familia mon¨¢rquica europea. Rostros habituales. en este tipo de eventos, como los de los ex reyes Miguel de Ruman¨ªa o Sime¨®n de Bulgaria, figuraban en filas posteriores, en la preciosa catedral ortodoxa de Santa Sof¨ªa, construida por los residentes griegos en el Reino Unido en 1879.

La novia, la norteamericana Marie Chantal Miller, de 26 a?os, luc¨ªa una larga mantilla de blonda blanca sobre un vestido del mismo color con la parte superior de encaje. El novio, Pablo, de 28 a?os, hijo mayor de los ex reyes Constantino y Ana Mar¨ªa de Dinamarca, chaqu¨¦ gris.

Familia real espa?ola

La familia real espa?ola en pl eno, y la princesa Irene, hermana de la Reina Sof¨ªa, ocuparon un lugar destacado en la iglesia, a la derecha del altar, junto al resto de los familiares del novio. La ceremonia, oficiada por el arzobispo Gregorios y su segundo, lokim, tuvo toda la brillantez y el esplendor de la vie a tradici¨®n griega. Una nota incluida en la informaci¨®n de prensa hac¨ªa especial hincapi¨¦ en la carencia de simbolismo "real" del intercambio de coronas que figura en toda boda conforme al antiguo ritual. La aclaraci¨®n est¨¢ directamente relacionada con la acre pol¨¦mica suscitada en Grecia por una ceremonia a la -que el ex rey Constantino hab¨ªa invitado a los miembros del Parlamento. Sin embargo, s¨®lo una docena de diputados del partido derechista Nueva Democracia acudieron ayer a la catedral.

El pr¨ªncipe Felipe de Borb¨®n, que actu¨® como padrino del no vio, tuvo considerable protagonismo en la complicada ceremonia en la que participaron decenas de sacerdotes vestidos con impresionantes casullas bordadas. El heredero de la corona espa?ola, que vest¨ªa como casi todos los invitados masculinos un chaqu¨¦ negro, intervino en el intercambio de anillos y sostuvo la corona sobre la cabeza de su primo Pablo. Las c¨¢maras de la televisi¨®n ITN que ofreci¨® las im¨¢genes de la boda en circuito cerrado para los periodistas, se detuvieron especialmente en la figura del rey de Espa?a y de la Reina Sof¨ªa -hermana del ex rey Constantino- una de las pocas damas sin sombrero, que luc¨ªa un vestido de llamativo tono rosa bajo una chaqueta estampada en la que predominaba el mismo color.

Las infantas quedaron engullidas en la multitud de elegantes damas, todas vestidas con colores chillones y luciendo imposibles pamelas que hac¨ªan dif¨ªcil la identificaci¨®n de princesas y damas de la alta sociedad.

Los novios tienen previsto instalarse tras la luna de miel en Nueva York, ciudad d¨®nde Marie-Chantal, hija de una pareja de acomodados burgueses -su hermana mayor se cas¨® con un nieto del multimillonario G¨¦tty-, proseguir¨¢ sus estudios de arte mientras su marido pasar¨¢ a trabajar para una firma financiera norteamericana.