"Hice algo malo y ya est¨¢"

Ha llegado la hora de dar la cara. La gira mundial Autoflagelaci¨®n 95 comenz¨® para Hugh Grant el lunes por la noche en un estudio de televisi¨®n de Los ?ngeles, donde el actor brit¨¢nico reconoci¨®, ante las risas y aplausos del p¨²blico, haber hecho "algo abominable" (no refiri¨¦ndose a su nueva pel¨ªcula con el director de Solo en casa, Chris Columbus, sino a haber pagado 7.000 pesetas a una prostituta para que le hiciera una felaci¨®n en su coche).Dos semanas despu¨¦s de que la se?orita Darnelle Williams fuera sorprendida con las manos en la masa de Hugh Grant, el esc¨¢ndalo sexual del a?o entra en su, segunda etapa, la de superar el engorro y pedir perd¨®n a un p¨²blico que, a base de pasar por taquilla, estaba empe?ado en elevar al protagonista de Cuatro bodas y un funeral a la categor¨ªa de estrella de Hollywood de pleno derecho. "No hago m¨¢s que leer teor¨ªas psicol¨®gicas", dijo en el popular programa nocturno de Jay Leno, "sobre que estaba bajo presi¨®n, demasiado cansado, solitario, que me hab¨ªa ca¨ªdo por unas escaleras de peque?o... Ser¨ªa una estupidez esconderme detr¨¢s de eso. Hice algo malo y ya est¨¢".

Tartamudeando y haciendo gala de la timidez que le ha hecho mundialmente famoso, con una mano temblorosa sobre la boca y la barbilla, Grant sobrevivi¨® con notable alto al interrogatorio de su entrevistador, que comenz¨® con la pregunta que aparentemente centra el debate de la actualidad en el hemisferio occidental: "?En qu¨¦ demonios estabas pensando?".

El actor, que se entrevist¨® con Jay Leno para cumplir un compromiso prefellatio de promocionar su nuevo filme, Nueve meses, dijo tambi¨¦n que su novia, Elizabeth Hurley, le est¨¢ prestando un gran apoyo. "Vamos a intentar arreglar la situaci¨®n", prometi¨®.

Mientras tanto, las perspectivas no pod¨ªan ser mejores para Nueve meses, que se estrena hoy. Voces malignas han corrido el rumor, a duras penas cre¨ªble, de que todo esto es un malabarismo publicitario de la Fox. Los trailers de la pel¨ªcula llevan semanas levantando aullidos y carcajadas en las salas de cine de Estados Unidos.

Aparte de que Hugh Grant ha adelantado el agosto de la prensa y la televisi¨®n sensacionalistas, lo cierto es que su carrera no parece en peligro, y el episodio est¨¢ provocando m¨¢s sonrisas ligeras de complicidad asgamiento de vestiduras. que r, El modo en que Hugh Grant ha decidido afrontar la situaci¨®n le coloca en una posici¨®n de gran ventaja respecto a otros recientes esc¨¢ndalos sexuales. A Woody Allen ni se le ocurri¨® ofrecer disculpas p¨²blicas por su romance con la hija adoptiva de Mia Farrow. El actor Pee Wee Herman hundi¨® la cabeza bajo tierra tras ser sorprendido masturb¨¢ndose en un cine porno, y no se ha vuelto a saber de ¨¦l. Por su parte, Michael Jackson ha optado por la estrategia de chillar como una urraca ante unas acusaciones de pederastia que a¨²n no se han disipado del todo. Grant ha sabido aprovechar una noci¨®n bastante extendida de que irse de putas es en el fondo algo aceptable, e incluso gracioso.

El actor abandon¨® el programa de Jay Leno con un semblante muy distinto al exhibido ante las c¨¢maras. Rodeado de dos guardaespaldas de tama?o familiar, a Grant se le escap¨® una mirada de profunda desolaci¨®n ante los reporteros que vigilaban la salida, y desapareci¨® dentro de su limusina negra sin pronunciar palabra.