"Con el GAL hay mucha hipocres¨ªa y traici¨®n"
Ex secretario de Estado para la Seguridad
Rafael Vera est¨¢ relajado y con ganas de hablar. Empieza confesando que su primera noche de libertad, tras cinco meses encarcelado en Alcal¨¢-Meco, ha.dormido mal. Lo achaca "al cambio de cama y de lugar", pero se niega a admitir que las emociones del d¨ªa le hayan influido. "All¨ª estaba m¨¢s tranquilo", apostilla con una sonrisa. A pesar de su extrema sobriedad, se deja fotografiar en el columpio y en el tobog¨¢n del jard¨ªn. Aunque no ha abandonado la corbata, viste vaqueros. Est¨¢ a¨²n m¨¢s delgado y con m¨¢s canas.En las dos horas y media de entrevista se extiende en explicarlo todo, en recurrir a ejemplos de otros pa¨ªses, pero no baja jam¨¢s la guardia. Mantiene con terquedad rocosa la falta de pruebas sobre todos los cargos que se le imputan. Admite que ha cometido errores, aunque rechaza cualquier decisi¨®n ilegal suya en todo lo que se relaciona con su procesamiento. Es consciente de que el asunto de los fondos, reservados, superpuesto al caso GAL, le ha hecho perder cr¨¦dito, pero "al final resplandecer¨¢ mi inocencia", afirma. S¨®lo en un momento parece dar cabida a la posibilidad de una sentencia en su contra: "Por m¨ª y por mi familia voy a llevar siempre la cabeza alta. Y, si la cosa al final sale mal, los a?os que vaya a vivir luego en libertad no los quiero vivir escondido".
Pregunta. ?No piensa ahora que han sido in¨²tiles sus 1, 1 a?os al frente de la Secretar¨ªa de Estado para la Seguridad?
Respuesta. No. Todav¨ªa me he reafirmado m¨¢s en que mi trayectoria ha sido esencialmente correcta. Otra cosa es que haya cometido errores propios o compartidos. Analizas en qu¨¦ han podido afectar a la lucha antiterrorista y te plantean dudas esas informaciones que hablan de grandes retrocesos. Pero mi conclusi¨®n es que el retroceso, si lo ha habido, es m¨¢s aparente que real y es por otras razones.
P. ?Es decir, que incluso el grave error jur¨ªdico y pol¨ªtico de los GAL era algo necesario?
R. Puff! Es muy dif¨ªcil contestar. Primero, porque la respuesta puede molestar a muchos y, segundo, porque en el plano personal no estoy seguro.
P. Antes se ha referido a errores...
R. Desde el punto de vista ¨¦tico es evidente que el fen¨®meno GAL es reprobable. Sin duda alguna. Desde el punto de vista de la eficacia es dudoso. Pero desde el punto de vista de la moral ciudadana, a lo mejor tuvo sus efectos sobre la actividad terrorista. Lo que pasa es que vivimos una etapa de la acci¨®n pol¨ªtica y de la informaci¨®n period¨ªstica en la que, con el asunto GAL como con otras cosas, lo que hay es mucha hipocres¨ªa, cobard¨ªa y traici¨®n. Eso es la conclusi¨®n que he sacado en estos cinco meses.
P. ?Hipocres¨ªa de qui¨¦n y sobre qu¨¦?R. Hipocres¨ªa de la opini¨®n p¨²blica y de la clase pol¨ªtica. A m¨ª, sin ser instigador, ni organizador ni financiador de los GAL, en el Congreso o en la calle hab¨ªa diputados y pol¨ªticos que me daban en el hombro cuando hab¨ªa alg¨²n atentado de los GAL y me dec¨ªan: "Eso est¨¢ muy bien ?eh?"
P. Y usted ?qu¨¦ les dec¨ªa?
R. ?Por qu¨¦ me lo dec¨ªs a m¨ª? Y ellos: "Bueno, t¨² ya sabes...".
P. ?Cobard¨ªa?
R. Cobard¨ªa de algunos pol¨ªticos y hombres p¨²blicos. Y traici¨®n de unos pocos.
P. ?De Amedo y Dom¨ªnguez?
R. De algunas personas mas importantes. Creo que Amedo y Dom¨ªnguez no significan demasiado en este panorama, no tienen un papel fundamental.
P. ?Se est¨¢ refiriendo a instigadores o conspiradores?
R. Posiblemente, pero ni siquiera eso. Les llamar¨ªa simplemente manipuladores.
P. ?Qui¨¦nes y con qu¨¦ fin?
R. Es que estamos en un momento muy complicado de la vida pol¨ªtica y ah¨ª est¨¢ la clave. Se mezclan muchas cosas. En esta manipulaci¨®n confluye gente desairada y agraviada con el Gobierno por posiciones antiguas de poder en el campo econ¨®mico y financiero. A ello se a?ade el desgaste fuerte del Gobierno, las prisas de algunas personas interesadas en adquirir un poder pol¨ªtico importante por la v¨ªa r¨¢pida y, luego, una pol¨ªtica informativa de algunos medios no demasiado leal con el sistema y con la ciudadan¨ªa. Algunos medios son cobardes y otros -Forman parte de esa manipulaci¨®n.
P. Ponga nombre y apellido.
R. No, porque todav¨ªa me siento vinculado a la posici¨®n. del Gobierno y del PSOE. Tampoco es una conspiraci¨®n organizada, sino la. confluencia de diversos intereses en una situaci¨®n cr¨ªtica.No creo que haya un ¨²nico cerebro. Pod¨ªa dar alg¨²n nombre, pero no lo voy a hacer.
P. Incluso si esto es as¨ª, hay unas evidencias que le inculpan a usted en actividades delictivas.
R. Soy menos presunto inocente o m¨¢s presunto culpable que hace unos meses. Est¨¢ claro.
P. Pero ahora parece haber pruebas de que entreg¨® fondos reservados para financiar...
R. Lo sigo negando. Nunca di fondos reservados para fines il¨ªcitos. No he visto esas pruebas.
P. Est¨¢ el cheque que dio al comisario Francisco ?lvarez.
R. El informe del fiscal dice que no encuentra elementos procesales sobre este punto. Ya dije ante el juez Garz¨®n que le hab¨ªa dado ese tal¨®n por razones que afectaban a la seguridad del Estado. Y punto. Alvarez explic¨® por qu¨¦ apareci¨® en esa cuenta. No s¨¦ d¨®nde est¨¢ el delito.
P. Pero s¨ª autoriz¨® la entrega del mill¨®n de francos que, al parecer, sirvi¨® para financiar el secuestro de Segundo Marey.
R. Eso tampoco est¨¢ demostrado. Ah¨ª no hay nada m¨¢s que se produce en una fecha, no precisamente pr¨®xima a la que dicen que se efectu¨® esa entrega, alg¨²n cambio de divisas en el Banco de Espa?a... Pero no se sabe a qui¨¦n fue entregado. No hay ninguna prueba.
P. Est¨¢n adem¨¢s los pagos a Amedo y Dom¨ªnguez.
R. Ellos y sus esposas dicen que estaban cobrando. Lo niego. Hay resguardos de las visitas de las mujeres a la Seguridad del Estado, pero no del dinero.
P. ?Tambi¨¦n niega los ingresos en sus cuentas en Suiza y el pago de una operaci¨®n quir¨²rgica a la esposa de Amedo?
R. Lo niego, como mantengo que como secretario de Estado nunca di fondos para los GAL.
P. ?Empe?a su palabra de honor?
R. ?Por qu¨¦ hay que llegar a eso? Simplemente, en funci¨®n de mi responsabilidad como secretario de Estado, digo que no. Esas pruebas de que se h¨¢bl¨¢ habr¨¢ que mantenerlas en el juicio oral, y ah¨ª demostraremos que no tienen base.
P. Su defensa numantina choca con las acusaci¨®nes del juez Garz¨®n y con el, auto de libertad provisional de la A¨²dienca Nacional en el que se le hace responsable de "un grav¨ªsimo ataque al sistema constitucional"
R. Sin duda, pero me mantengo en las mismas posiciones.
P. Luis Rold¨¢n declar¨® que se le pagaron 50 millones a las esposas de Amedo y Dom¨ªnguez y que parte de los fondos reservados se usaban en sobresueldos.
R. Las declaraciones de Rold¨¢n nunca me ser¨¢n favorables. Parece que esos fondos que ¨¦l dice que recib¨ªa como sobresueldo son anteriores a la fecha en la que ¨¦l afirma que los altos cargos" de Interior nos hab¨ªamos fijado unas indemnizaciones. Y luego las cantidades tampoco se corresponden con lo que ha declarado. Y las conclusiones a que llega la juez Ferrer es que esos ingresos de Rold¨¢n no parecen tener su origen en sobresueldos.
P. Pero usted repart¨ªa los fondos.
R. Es que mi obligaci¨®n era dar a los directores generales esos fondos. En esto los medios de comunicaci¨®n han conseguido superponer al. tema GAL el de los fondos reservados y, con ello, dar una imagen todav¨ªa m¨¢s sucia. Los casos de corrupci¨®n yo creo que son puntuales, nunca colectivos. Hay que recordar que en el manejo de los fondos reservados no hab¨ªa ninguna norma. Ahora hay una ley, pero entonces no. Lo primero que hice fue funcionar igual que lo hicieron los ¨²ltimos Gobiernos de UCD. Pero introduje un factor de garant¨ªa, y es que en vez de estar en manos de una sola persona, como ocurr¨ªa hasta entonces, exig¨ª que la cuenta del Banco de Espa?a necesitara dos firmas. P. Tambi¨¦n est¨¢ en tela de juicio el origen de su patrimonio.
R. Mi situaci¨®n en prisi¨®n ha debilitado mi cr¨¦dito y ha afectado a mi credibilidad en el asunto de los GAL y en todo lo dem¨¢s. Yo puedo estar en entredicho en el caso GAL. Sin duda. Porque adem¨¢s, mi responsabilidad en la Seguridad del Estado me compromete con eso. Pero en el tema del dinero y del enriquecimiento, eso no es posible.
P. ?Empe?ar¨ªa su palabra de honor?
R. Ah¨ª s¨ª que la empe?o. Yo no me he llevado jam¨¢s dinero ni me he enriquecido con los fondos reservados. He tenido protecci¨®n, coches blindados.... pero ning¨²n premio. No me parece correcto. Por la operaci¨®n de Bidart [contra ETA] no recib¨ª un duro. Tampoco Rold¨¢n ?eh?
P. Repetidamente ha insinuado la oportunidad de pasar la esponja o conceder una especie de indulto para los GAL.
R. Es que el fen¨®meno hay que analizarlo en su contexto. Sigo pensando que Amedo y Dom¨ªnguez deber¨ªan ser indultados. Se producen esas actividades en una situaci¨®n de amenaza al sistema democr¨¢tico, de intranquilidad en determinadas instituciones -ll¨¢mense fuerzas de seguridad, ll¨¢mense fuerzas armadas- y de respuesta muy agresiva de la opini¨®n p¨²blica contra el terrorismo. Siempre he hecho menci¨®n a que hab¨ªamos salido de un golpe de Estado muy serio [del 23-F] y de otros que no prosperaron. Hab¨ªa un mundillo en ebullici¨®n y nos jug¨¢bamos mucho.
P. Pero parece claro que hubo miembros de los cuerpos de seguridad vinculados a los GAL.
R, Pues en algunos casos, s¨ª. Y tambi¨¦n sectores de la sociedad. Ya dije en alguna ocasi¨®n algo de los empresarios vascos y se echaron encima. Pero entonces ellos estaban asustados y me ofrec¨ªan de todo. Cuando digo de todo es de todo. No hab¨ªa un GAL: eran varios Gales.
P. ?Acatar¨¢ las decisiones judiciales?
R. ?C¨®mo no las voy a acatar? Aunque est¨¦ profundamente en contra, es que no hay m¨¢s remedio que aceptarlo.
P. ?Prosperar¨¢ la recusaci¨®n que tiene planteada contra el juez Baltasar Garz¨®n?
R. Sin duda, sin duda. Es una recusaci¨®n fundad¨ªsima. Y no me quiero callar y me voy a defender porque quiero ir con la cabeza alta, sin tener que esconderme. Si tengo que pagar alg¨²n error, lo pagar¨¦ y punto.
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