"Nadie sabe cu¨¢ndo habr¨¢ elecciones"
Sali¨® aventajado el alumno de Giorgio Almirante. Con s¨®lo 43 a?os Gianfranco Fini, enterr¨® el fascismo y el Movimiento Social Italiano el pasado enero para confirmarse, al frente de Alianza Nacional, como uno de los pol¨ªticos con m¨¢s futuro. Apoya la formaci¨®n de una Asamblea Constituyente y confiesa que "nadie sabe cuando habr¨¢ elecciones" en Italia.
El cambio, previsto como la apoteosis de una Alianza Nacional (AN) en el Gobierno, se realiz¨® en la oposici¨®n, porque Umberto Bossi, el l¨ªder de la Liga Norte, rompi¨® la coalici¨®n e hizo caer al Gabinete de Silvio Berlusconi. Desde entonces, la situaci¨®n se ha complicado, y en el llamado Polo de la Libertad, el bloque de centro-derecha, crecen las discrepancias. Los ¨²ltimos sondeos dan a AN un fuerte crecimiento, con una cuota electoral potencial de m¨¢s del 19%, similar a la de Forza Italia. Ello la convierte en la alternativa al actual l¨ªder del Polo.Pregunta. Tras las elecciones de 1994 se habl¨® de Segunda Rep¨²blica. ?C¨®mo ve el proceso de cambio pol¨ªtico en Italia?
Respuesta. Un a?o y medio despu¨¦s, es justo decir que fuimos demasiado optimistas cuando dijimos que Italia hab¨ªa pasado de la Primera a la Segunda Rep¨²blica. Obtuvimos los votos para ir al Gobierno, pero no ten¨ªamos claro entonces que, para proceder a una modificaci¨®n profunda del Estado, no bastaba con eso. Y sobre todo, ten¨ªamos un flanco expuesto y amenazado, como luego se vio, con la posici¨®n adoptada por Bossi.
P. Usted pas¨® en pocos meses de alabar la figura de Mussolini a reconocer las degeneraciones del fascismo. ?Fue el fruto de una reflexi¨®n o una simple opci¨®n t¨¢ctica?
R. No fue una opci¨®n t¨¢ctica. Celebramos un congreso en Fiuggi en el que naci¨® Alianza Nacional, que hizo cuentas precisas con el pasado, con la historia, con todo lo que, en cierto modo, nos ped¨ªa una opini¨®n p¨²blica que, de todos modos, nos hab¨ªa dado los votos suficientes para estar en el Go.bierno. Fue una opcion estrat¨¦gica y definitiva, que ¨ªncluso nos cost¨® una peque?a escision por la derecha.
P. En las elecciones administrativas del pasado mayo, AN no creci¨® como usted esperaba. ?Teme quesu partido tenga un techo?
R. No. Es verdad que estaba convencido de que en las administrativas, obtendr¨ªamos m¨¢s votos, pero tambi¨¦n lo estoy de que AN crecer¨¢ todav¨ªa. Tengo una gran confianza en el futuro.
P. ?Por qu¨¦ AN sigue sin pertenecer a una internacional y est¨¢ sola en el Parlamento Europeo?
R. La derecha, a diferencia de la izquierda y el centro, no cree en el internacionalismo. En el Parlamento Europeo hemos iniciado toda una serie de contactos con el centro-derecha y estoy seguro de que dentro de alg¨²n tiempo, Alianza Nacional estar¨¢ en un grupo.
P. Berlusconi, que ha hecho ya en Estrasburgo grupo con los neogaullistas franceses al que usted quiere incorporarse, quiere un presidencialismo a. la americana, por el que el presidente de la Rep¨²blica de Italia ser¨ªa, tambi¨¦n el presidente del Gobierno. ?Est¨¢ de acuerdo?
R. En Italia tenemos bipolarismo, no bipartidismo. Hay dos polos pol¨ªticos, y en el interior de cada uno puede ocurrir que se est¨¦ de acuerdo sobre el principio del presidencialismo y que haya posiciones distintas sobre la aplicaci¨®n del principio.. Cuando nos presentemos ante los electores y tengamos el deber de proponer un solo modelo, ciertamente estaremos de acuerdo sobre cu¨¢l es el modelo de presidencialismo m¨¢s adecuado para Italia.
P. Luego ahora no lo est¨¢n.
R. No hemos hablado a fondo. Yo, en otras ocasiones, expres¨¦ una preferencia por el modelo franc¨¦s, que sigue siendo el m¨ªo. Pero lo importante es que el Polo sea presidencialista en su conjunto y que se llegue a una posici¨®n com¨²n sobre el modo.
P. Tambi¨¦n los ex democristianos del Polo hablan de presidencialismo a la francesa. Y el principal asesor pol¨ªtico de Berlusconi, Giuliano Urbani, se ha desmarcado en esto de su jefe. ?Est¨¢ en decadencia del liderazgo pol¨ªtico de Berlusconi?
R. No. Eso es la, esperanza de las izquierdas, pero no la realidad pol¨ªtica ? Si tuvi¨¦ramos el mismo mal gusto de buscar todas las contradicciones dentro de la izquierda, la imagen de la pol¨ªtica italiana en el extranjero seria todav¨ªa m¨¢s complicada.
P. Si Berlusconi fuese procesado en septiembre por corrupci¨®n de funcionario fiscal, ?har¨ªa usted una campa?a electoral con un candidato en tales condiciones?
R. Veremos, en septiembre.Creo que tambi¨¦n eso es m¨¢s la esperanza de los adversarios de Berlusconi que la realidad.
P. ?Pero si lo fuera?
R . Yo estoy acostumbrado a afrontar los problemas cuando se presentan, no imagin¨¢ndolos. ?se es el realismo de la derecha.
P. ?Cree que Berlusconi habr resuelto su problema de conflicto de intereses si retiene el 30% o 40% de sus televisiones?
R. Creo que ha comenzado a resolverlo. Ha dado el primer paso. El conflicto subsistir¨ªa si ¨¦l tuviera cargos de Gobierno, pero, mientras sea s¨®lo diputado, como es hoy, no se puede hablar de conflicto de intereses, a no ser que se quiera hablar de tantos otros, como la se?ora Agnelli [Susana, ministra de Asuntos Exteriores], que tiene una peque?a cuota del grupo de su hermano. Si ma?ana Berlusconi volviera a tener cargos de Gobierno, deber¨ªa congelar sus acciones, como ¨¦l mismo ha dicho, o venderlas.
P. Los sondeos sit¨²an a AN casi al nivel de Forza Italia. ?Tampoco eso puede influir en un cambio de l¨ªder del Polo?
R. No me he planteado el problema. Dentro del Polo, cuando ha habido cuestiones, las hemos examinado y resuelto de com¨²n acuerdo. Cuando, eventualmente, se plantee esa cuesti¨®n, la afrontaremos.
P. Usted es partidario de abrir una reforma de las instituciones a trav¨¦s de una Asamblea Constituyente, antes de las elecciones. ?Por qu¨¦?.
R. Para ver si la izquierda es sincera. Ellos han dicho: 'Abramos una fase constituyente', y yo quiero saber si dicen la verdad. Para m¨ª, la fase constituyente es el paso de un modelo de Estado a otro. No es una modificaci¨®n de ciertas reglas. En Italia ha habido s¨®lo una fase constituyente, en 1946, tras la ca¨ªda del fascismo. Si la voluntad de la izquierda es pasar de la Primera a la Segunda Rep¨²blica, a un nuevo modelo de Estado, yo estoy de acuerdo, y entiendo que el lugar adecuado para hacerlo es la Asamblea Constituyente.
P. ?Cu¨¢les ser¨ªan las condiciones de ese cambio?
R. La implicaci¨®n directa de los electores. Yo no puedo decir que el modelo ideal sea el presidencialismo, porque ¨¦sa es mi presunci¨®n. Esa reforma no se puede hacer en un Parlamento que no tenga mandato directo de los electores para modificar a fondo la Constituci¨®n. El procedimiento es una ley que permita la elecci¨®n de la Asamblea Constituyente por el sistema proporcional", ya que, debido a su objetivo, esa asamblea debe incluir hasta las minor¨ªas m¨¢s exiguas; debe tener un plazo definido de tiempo para trabajar y competencias espec¨ªficas. Al final, su trabajo deber¨¢ ser sometido. a la aprobaci¨®n de todo el cuerpo electoral a trav¨¦s de un refer¨¦ndum.
P. En esa hip¨®tesis, ?cu¨¢ndo se celebrar¨ªan las elecciones y qui¨¦n gobernar¨ªa entretanto?
R. Eso es mucho m¨¢s complicado, y ah¨ª est¨¢ el verdadero problema. La asamblea se podr¨ªa elegir hacia la primavera del a?o pr¨®ximo, luego habr¨ªa un a?o de mandato para su trabajo, y durante ese periodo tendr¨ªa que haber un Gobierno. Todo el problema italiano es ¨¦se. El actual d¨¦ficit de gu¨ªa pol¨ªtica se resuelve s¨®lo con un Gobierno pol¨ªticamente homog¨¦neo y fuerte. Un acuerdo program¨¢tico con las izquierdas es muy dif¨ªcil. Por ello, la pregunta de qui¨¦n gobernar¨ªa encuentra respuesta muy dif¨ªcil en la situaci¨®n actual. El centro-izquierda dice que hace falta un Gobierno de amplio acuerdo y que hay que retrasar el voto, yo digo que lo ¨²nico que puede justificar ese Gobierno de amplio acuerdo no puede ser m¨¢s que un hecho hist¨®rico como la Asamblea Constituyente.
P. Esta posici¨®n, ?no le aleja de Berlusc¨®ni, que pide las elecciones inmediatamente?
R. No. He hablado ayer con ¨¦l, despu¨¦s de volver a proponer la Asamblea Constituyente, y se da cuenta de que mi posici¨®n no va contra nadie, sino que responde a un problema real.
P. En definitiva, ?ve las elecciones generales cerca o lejos?
R. No lo s¨¦, y creo que no lo sabe nadie.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.