El vuelo imperfecto
Los pies de Pedroso rebasaron tras la ca¨ªda los nueve metros, pero no la espalda
Los pies de Iv¨¢n Pedroso (22 a?os, Cuba) aterrizaron m¨¢s all¨¢ de los nueve metros, pero la marca que dejaron los talones sobre el foso fue inmediatamente borrada por la rabadilla, que reban¨® la arena en sentido contrario hacia donde quer¨ªa llegar el atleta. Esos 30 cent¨ªmetros robados por el gl¨²teo y la espalda a consecuencia de la imperfecta ca¨ªda dejaron la medida en 8,70 metros, insuficiente para figurar como r¨¦cord, pero sobrado para ganar el t¨ªtulo, o sea, que ah¨ª concluy¨® toda la incertidumbre levantada en tomo a la final del salto de longitud.Bastaron dos saltos de cada atleta para confirmar que no hab¨ªa duelo posible. Mike Powell (31 a?os, EEUU) compet¨ªa por intentar ganar a Pedroso y ¨¦ste, por arrebatar el r¨¦cord mundial (8,95 metros) a su propio rival, una vez que los 8,96 logrados en Italia sabe que nunca se los van a homologar.
Imposible en esas circunstancias concentrarse debidamente para llegar de un salto a donde jam¨¢s se ha asomado el hombre. El t¨ªtulo mundial no era poca cosa, porque significaba para un cubano acabar con el absolutismo de los saltadores estadounidenses, ganadores de cuantas medallas de oro se han puesto en juego en los Mundiales, as¨ª que el r¨¦cord quedar¨ªa para mejor ocasi¨®n. Ocupar un lugar en la historia -pues tal honor recaer¨¢ sobre quien alcance primero los nueve metros-, bien merece toda la concentraci¨®n del privilegiado que lo consiga, sin distraerse con banalidades mundanas, cual pudiera ser un t¨ªtulo mundial.
Powell intent¨® sacar provecho de la desmotivaci¨®n que a Pedroso le entr¨® tras sus 8,70 metros y quiso llegar muy lejos en el quinto salto. Lo hizo, pero pisando m¨¢s all¨¢ de donde deb¨ªa. Fue un prop¨®sito encomiable y que hizo pensar al mismo Powell que a¨²n estaba vivo. Volvi¨® a intentarlo despu¨¦s y super¨® otra vez el l¨ªmite de lo permitido en un acto desesperado para exprimir sus capacidades. Por no conformarse con su destino, ser segundo tras Pedroso, perdi¨® tal posici¨®n, pues arriesg¨® para ganar y no para distanciarse del resto de competidores. Al final le alcanz¨® James Beckford (20, Jamaica), que hab¨ªa fracasado en el triple salto, y Powell acab¨® tercero. Realmente ya est¨¢ lejos de poder saltar tanto como Pedroso lo hizo ayer. La ¨²ltima vez que logr¨® 8,70 fue hace dos a?os.
Pedroso, en cambio, inicia ahora su progresi¨®n. Y lo hace muy por delante de cuando comenz¨® Powell. El cubano salt¨® con 19 a?os 8,53 metros y esta temporada ya posee dos marcas, 8,71 y 8,70 metros, que no las superaron m¨¢s que los superclase en su ¨¦poca de mayor esplendor.
Otros reveses USA
El de ayer, no fue el ¨²nico rev¨¦s de Estados Unidos en la jornada. El relevo masculino 4 x 100 pod¨ªa presumir tambi¨¦n de estar invicto en los Mundiales y, fue descalificado. Sobre Greene, Drummond, McCall y Marsh cay¨® tal deshonra, aunque quiz¨¢ evitara otra peor, la de ser derrotados hoy por los velocistas canadienses.Los espa?oles estuvieron tan discretos que pasaron inadvertidos. Superaron la primera ronda y fueron ¨²ltimos en la semifinal. A las mujeres les fue peor. Como actuaron en el 4 x 400 en vez de en el 4 x 100 las diferencias se notaron m¨¢s y su llegada a la meta recordaron los tiempos en que daba verg¨¹enza que salieran a competir al extranjero.
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