Croacia concentra 20.000 soldadosen Eslavonia y Serbia env¨ªa otra columna de blindados

El Ej¨¦rcito de Croacia, que este fIn de semana desfila orgulloso entre los v¨ªtores de los ciudadanos de Zagreb, ha comenzado a concentrar al menos tres brigadas, unos 20.000 soldados, frente a Eslavonia oriental, la ¨²nica regi¨®n croata que sigue en manos de los serbios secesionistas tras la ca¨ªda de Krajina. La poblaci¨®n civil de Os¨ªjek (m¨¢s de 100.000 habitantes) y Vinkovci (80.000) cubre con maderos y sacos terreros las ventanas de ventilaci¨®n de los refugios ante eventuales bombardeos serbios, cuya artiller¨ªa est¨¢ emplazada a escasos kil¨®metros.

Frente a la concentraci¨®n de soldados croatas, muchos de los cuales ya han participado en las victoriosas operaciones de Eslavonia occidental, en mayo, y la de Krajina, ahora en agosto, Serbia ha enviado una nueva columna de carros de combate y blindados hacia la localidad de Sid, fronteriza con la disputada Eslavonia oriental. Estos blindados se suman a otros ya desplegados en los ¨²ltimos d¨ªas. La columna, que incluye veh¨ªculos-cisterna cargados de combustible, ha sido movilizada de d¨ªa con la intenci¨®n de que sea visible y refuerce su car¨¢cter disuasorio.A su paso por la autopista, los autom¨®viles serbios se deten¨ªan en la calzada y sus ocupantes sal¨ªan a darles vivas y animarles a vengar a los serbios de Croacia, derrotados en Krajina.

Mientras, los vecinos de Osijek y Vinkovci no pierden el tiempo. Ya han cubierto con aspas de cinta adhesiva sus ventanales antes de desaparecer de las calles. Intentan protegerse de la metralla de cristales hechos a?icos que desencadena cada onda expansiva de las explosiones. Y las paradas de tranv¨ªas y autobuses se asemejan a un igl¨² hecho con sacos de arena. Ambas ciudades, populosos centros comerciales de una regi¨®n campesina, parec¨ªan encontrarse ayer en cuarentena, con sus accesos sometidos a controles policiales y de soldados embozados en chalecos antibalas a pesar del sofocante bochorno. Y ni siquiera en las ¨¢reas supuestamente m¨¢s expuestas a los francotiradores del sur de Krajina se han podido ver, como en esta frontera del este, soldados croatas montando guardia con el casco de combate.

Cambio de guardia

Tres autobuses de soldados perfectamente uniformados con boina negra sobre el pelo rapado llegaron al mediod¨ªa de ayer al centro de Vinkovci, castigado por bombardeos que causaron varios muertos y heridos hasta el pasado mi¨¦rcoles. En nada se parec¨ªan los hombres de esta unidad de ¨¦lite a los desgarbados reservistas que vigilaban el puesto de control situado a las afueras.Desde Mirkovci, a unos dos centenares de metros de este ¨²ltimo destacamento, los tiradores serbios pueden observar sus movimientos. "Los rusos [los cascos azules que junto con los soldados belgas se interponen entre ambos contendientes] son hermanos de los chetniks [serbios], afirmaba el cabo que estaba al mando mientras acariciaba el pendiente que perforaba su oreja izquierda.

Los mandos militares croatas de la regi¨®n aseguran que tienen dispuesto un plan para romper las l¨ªneas serbias desde Os¨ªjek y Vinkovci, las franjas m¨¢s estrechas del territorio que ahora controlan sus enemigos: un 5% de Croacia. En resumen, la misma estrategia b¨¦lica que ha servido para conquistar, Krajina. Desmembrar el frente enemigo en dos o tres pedazos y acabar despu¨¦s con las bolsas de resistencia. Sin embargo, los generales croatas niegan que se vaya a lanzar en este momento un ataque contra Eslavonia oriental, aunque como ya ocurri¨® hace apenas dos semanas en los alrededores de Karlovac (al sur de Zagreb) los ¨¢rboles de los bosques croatas no dejan ver los ca?ones ni los carros de combate que apuntan hacia los serbios. "Antes de que vuelvan los ni?os al colegio [en septiembre] habremos recuperado todo nuestro territorio nacional", pronosticaba ayer con optimismo Kobb Ljudevit, un ex funcionario de la extinta Liga de Comunistas de Yugoslavia, que charlaba con sus vecinos a la sombra de un portal. Era unas de las pocas personas que se asomaban a la calle en Osijek en la tarde de ayer. A las cuatro de la madrugada de ayer cay¨® un proyectil en una zona c¨¦ntrica de Osijek, aunque sin causar v¨ªctimas. "?Miedo? Claro que tenemos miedo. Llevamos cuatro a?os sinti¨¦ndolo", confesaba este sesent¨®n.

Ataque sorpresa

Sobre la posibilidad de un ataque sorpresa croata en el frente del este pesa siempre la sombra del poder militar de Belgrado, muy vinculado econ¨®micamente a la rica Eslavonia oriental, que adem¨¢s sirve de tap¨®n ante un eventual choque directo entre Croacia y Serbia. Pero la memoria del sangriento asedio de Vukovar, que qued¨® pr¨¢cticamente destruida por la artiller¨ªa y la aviaci¨®n serbias antes de ser conquistada en noviembre de 1991, sigue quitando el sue?o a los croatas, que han prometido vengarse y recuperar la ciudad ba?ada por el Danuvio.En el sur de Croacia la estrecha franja costera que va desde Dubrovnik hasta la frontera con Montenegro (integrado junto con Serbia en la actual Yugoslavia) fue castigada ayer por la artiller¨ªa de los serbios de Bosnia, situada a escasos kil¨®metros del litoral, y que as¨ª parecen vengar la derrota de sus hermanos de Krajina. La televisi¨®n croata inform¨® de, tres heridos en el bombardeo y los responsables de la Defensa Civil en esta zona de Dalmacia decretaron la alerta general y ordenaron a la poblaci¨®n civil que acudiese a los refugios. Al otro lado del frente, al norte de Dubrovnik, en Trebinje, algunos serbios han comenzado a dejar sus casas por temor a un ataque croata.

Tras la Operaci¨®n Tormenta, las represalias militares serbias por la expulsi¨®n de 150.000 serbocroatas, de los que dos terceras partes son civiles, de Krajina se han sucedido en distintos frentes, tanto en Dubrovnik como en Osijek y en la zona industrial del este de Zagreb. Pero la venganza tambi¨¦n se ha cebado contra los croatas que viv¨ªan en regiones controladas por los serbios, como Voivodina (entre Belgrado, y la frontera h¨²ngara) o Banja Luka (norte de Bosnia). M¨¢s de dos centenares de familias croatas han sido expulsadas -"a palos", seg¨²n una organizaci¨®n de refugiados de Zagreb de Voivodina en direcci¨®n a Hungr¨ªa. La radio croata aseguraba ayer que otros 800 civiles croatas asentados en Banja Luka han tenido que abandonar sus hogares. Otros tantos han sido deshauciados de aldeas serbias m¨¢s pr¨®ximas a la frontera con Croacia por los serbios expulsados de Krajina. Como, antes, esos serbios de Krajina, como los bosnios de Srebrenika y Zepa....