El etarra Pipe niega ante el juez la conexi¨®n de HB y ETA

El etarra Felipe San Epifanio, Pipe, jefe del comando Barcelona, neg¨® ayer ante el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno cualquier vinculaci¨®n entre la banda terrorista ETA y Herri Batasuna, as¨ª como la existencia de v¨ªnculos entre la coalici¨®n abertzale y el bloque KAS, seg¨²n inform¨® su abogado, Txema Matanzas. Pipe fue citado para investigar la responsabilidad de HB, de cuya Mesa Nacional fue miembro, en el atentado cometido por San Epifanio contra el Gobierno Militar de Barcelona en 1994, en el que fue asesinado un transe¨²nte.Pipe neg¨® tener la doble militancia en ETA y HB en el momento del atentado, ya que entonces estaba en situaci¨®n de rebeld¨ªa y no manten¨ªa ning¨²n contacto estable con la organizaci¨®n. Su compa?era de comando, Rosario Ezkerra, se neg¨® a declarar ante el magistrado.

Los abogados de la Asociaci¨®n V¨ªctimas del Terrorismo (AVT) Juan Carlos Rodr¨ªguez Segura y Emilio Murcia dijeron que ser¨¢ dif¨ªcil establecer una conexi¨®n directa entre ETA y HB, por lo que habr¨¢ que discurrir por rodeos jur¨ªdicos hasta demostrar esa posible vinculaci¨®n.

A juicio del abogado Matanzas es "absurdo" que se busque un nexo entre ETA y HB a trav¨¦s de este atentado, ya que la militancia de Pipe en HB hab¨ªa terminado cuando pas¨® a ETA.

El ex jefe del comando Barcelona, es la figura m¨¢s representativa de la generaci¨®n de j¨®venes que tom¨® el relevo en ETA y HB. Su trayectoria, primero en Jarrai, despu¨¦s en KAS y en la direcci¨®n de HB y, finalmente, en ETA, le acredita como elemento importante de esta hornada de terroristas que no conocieron el franquismo y nacieron pol¨ªticamente en el delirante castillo propagand¨ªstico de sus mayores.

Al igual que algunos de los que ostentan hoy el m¨¢ximo poder en las estructuras pol¨ªtico-militares de ETA y HB, Pipe ha sido aleccionado desde su adolescencia en el desprecio por la mayor¨ªa, el discurso de la consigna, la simplificaci¨®n m¨¢xima y la ideolog¨ªa de los estereotipos. L¨ªder reconocido de esos grupos de j¨®venes amamantados en la cultura de la violencia y educados en la deslegitimaci¨®n de la democracia, San Epifanio es un exponente del ascenso de KAS en el mundo de la violencia.

Su trayectoria y su historial ilustran elocuentemente sobre la utilizaci¨®n simult¨¢nea de las estructuras legales y las de la organizaci¨®n terrorista, a las que Pipe sirvi¨® resueltamente rnientras estuvo al frente de las direcciones de Jarrai, de KAS y de HB.

Tras la ca¨ªda de la c¨²pula de ETA en Bidart, en abril de 1992, y en el posterior desconcierto interno, ETA dud¨® sobre la conveniencia de declarar "una tregua" para formalizar contactos con el Gobierno. Como ocurre tantas veces cuando la duda ronda en organizaciones de este tipo, quienes se negaban a suspender los asesinatos echaron mano de los j¨®venes, nunca vacilantes.

Apoyado por KAS, Pipe se mantuvo fiel a la consigna Jarrai (Seguir), que da nombre a su antigua organizaci¨®n juvenil y asumi¨® un papel protagonista en el rechazo a la tregua.

Despu¨¦s pas¨® al interior y dej¨® sus huellas dactilares en el coche utilizado para el asesinato del coronel Leopoldo Garc¨ªa Campos. El atentado enterr¨® los contactos con el Gobierno y frustr¨®, una vez m¨¢s, las perspectivas de una salida dialogada.