La terna coincide en que tuvieron el ambiente muy en contra suya

"El ambiente estuvo muy raro y en contra nuestra desde un principio". Esta opini¨®n de Enrique Ponce al finalizar la corrida era compartida, con expresiones muy similares, por sus compa?eros de terna, Litri y Juan Mora, y hasta por el ganadero, Gabriel Aguirre, quien reconoc¨ªa que los toros "fueron descastadillos y de una nobleza enorme, puede que excesiva; quizas fuera esa la causa de la frialdad con que el p¨²blico juzg¨® todo".

Aguirre, al que le pareci¨® bien que el presidente Moronta no devolviese ninguno al corral, "pese a las r¨¢pidas, y como se vio despu¨¦s, injustificadas protestas de los aficionados", parte de la culpa fue de los picadores, "que dieron mucha le?a a los toros, y a¨²n as¨ª, ¨¦stos se vinieron arriba en la muleta y no se cayeron".

A pesar de las protestas, tanto Ponce, quien estimaba que quiz¨¢s el p¨²blico "vino un poco en contra porque est¨¦ harto de esta divisa con no muy buenos resultados aqu¨ª ¨²ltimamente", como Litri estaban satisfechos de sus respectivas actuaciones. El valenciano cre¨ªa haberse lucido fundamentalmente con su primer enemigo, "que no era f¨¢cil ni ten¨ªa ritmo y al que met¨ª en la muleta a base de pas¨¢rmelo cerca hasta sacarle buenos muletazos". Y conclu¨ªa as¨ª: "En cualquier otra plaza y en esta misma con un ambiente normal habr¨ªa calado m¨¢s y habr¨ªan pedido la oreja".

Litri valoraba su faena al quinto "como una de las m¨¢s relajadas, lentas y en las que he toreado m¨¢s a gusto en Madrid y en muchos sitios", y a?ad¨ªa que al ver que el p¨²blico no reaccionaba mayoritariamente se desconcert¨®, aunque yo respeto siempre su opini¨®n, que para eso paga". Mora, que not¨® el "ambiente antip¨¢tico desde el mismo pase¨ªllo, cuando ni nos aplaudieron como en otras ocasiones", calificaba a los toros de sosos y malos, "y eso fue el remate para que la gente ya no reaccionase".