Hachuel prueba que Conde controla los 1,3 millones de Carburos

El financiero Jacques Hachuel, a requerimiento del juez del caso Banesto, Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, aport¨® al juzgado cinco documentos con varios extractos de cuentas bancarias en los que se registra la transferencia de 17,099 millones de francos suizos (algo menos de 1.344 millones de pesetas de abril de 1990) a una cuenta bajo control de, un abogado que representa a Mario Conde y cuyo nombre es Peter Schwarz. Hachuel amaga con revelar el secreto de un acuerdo fiduciario entre ¨¦l y Conde que podr¨ªa involucrar a terceros. Pero, de momento, no lo ha destapado.

El dinero procedi¨® del pago que realiz¨® la multinacional Air Products por la compra, el 6 de abril de 1990, de una opci¨®n del 5,9% del capital de la empresa Carburos Met¨¢licos, cantidad que no ingres¨® en Banesto. Por indicaci¨®n del entonces responsable de empresas de la entidad financiera, Arturo Roman¨ª, respaldado por Conde, que hab¨ªa participado en febrero en las negociaciones con los dirigentes de la multinacional Air Products.A cambio del pago de 1.344 millones de pesetas, Banesto cedi¨® a Air Products una opci¨®n de compra del 5,9% de Carburos Met¨¢licos. Si bien esta opci¨®n ten¨ªa un plazo de materializaci¨®n de cuatro a?os, hasta julio de 1994, y a un precio contenido de 10.230 pesetas por t¨ªtulo, la multinacional obtuvo en junio de 1990 -es decir, tres meses despu¨¦s de pagar el dinero citado- los derechos pol¨ªticos equivalentes al 5,9% del capital social de Carburos y una reforma de los estatutos de la sociedad para adoptar pactos de mutuo acuerdo entre los socios, despu¨¦s de un periodo de pugna abierta.

Pero el dinero no entr¨® en Banesto. Arturo Roman¨ª dio orden a la multinacional para que lo transfiriera a la direcci¨®n de un bufete de abogados suizo, Homburger Achermann, para que ¨¦ste, a su vez, lo ingresara en una cuenta, a la que dicho bufete ten¨ªa acceso: Mariella Real Est¨¢te Holding Establishment (Vaduz, Liechtenstein). Esta cuenta pertenece a Jacques Hachuel.

Sin embargo, el dinero no permaneci¨® en la citada cuenta del financiero. Jacques Hachuel, en virtud de un acuerdo con Mario Conde, seg¨²n reza la correspondencia privada aportada por el primero hace varios meses al juzgado, dio orden a su abogado, Peter Widmer, para realizar una transferencia (dos cheques, uno de 14,8 millones de francos suizos y otro de 2,2 millones de francos suizos) y a la persona que Mario Conde le indic¨®: el doctor Peter Schwarz. Se trata de un abogado con direcci¨®n en Zurich, pero que, al parecer, trabaja en Liechtenstein.

La filducia

Ese dinero respond¨ªa a la modalidad de un dep¨®sito inmovilizado (en franc¨¦s d¨¦p?t en s¨¦questre) que Hachuel y Conde acordaron en funci¨®n de un acuerdo de fiducia, cuyas caracter¨ªsticas y detalles son guardados en secreto. Seg¨²n Hachuel, el dinero fue inmovilizado como parte de una operaci¨®n en la que ¨¦l actuar¨ªa como fiduciario del grupo Banesto "hasta el momento en que este grupo estuviera en posici¨®n de encontrar un comprador que sustituyera a Hachuel y permitiera as¨ª poner fin a la relaci¨®n fiduciaria concluida", seg¨²n uno de los cinco documentos aportados al juez del caso Banesto, Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n.En ese documento -una carta enviada por Jean-Pierre Jacquemoud, abogado del financiero, a Peter Schwarz, abogado de Conde, de fecha 13 de abril de 1995- se afirma: "Nuestro cliente ha efectuado a su bufete -cuyas se?as le han sido comunicadas por el presidente del Grupo Banesto- dos dep¨®sitos de 2,2 millones y 14,8 millones de francos suizos que usted deb¨ªa custodiar hasta el fin de la operaci¨®n".

El abogado dice tambi¨¦n que "no habi¨¦ndose realizado la operaci¨®n de venta de t¨ªtulos [no aclara de qu¨¦ t¨ªtulos se trata] el mandato fiduciario de mi cliente a tocado a su fin y por ello se le ha pedido el reembolso de las cantidades que usted guardaba a t¨ªtulo de custodia (...) Usted ha invocado, despu¨¦s de esta petici¨®n, de noviembre de 1994, diversos pretextos dilatorios (viajes...) para diferir la ejecuci¨®n de sus obligaciones".

El dinero que deb¨ªa entrar en Banesto en abril de 1990 lo controla, pues, Mario Conde, a trav¨¦s de Peter Schwarz. ?ste se ha negado a reintegrarlo a Banesto cuando el banco se lo exigi¨®, hace algunos meses. Pero Jacques Hachuel, como es natural, dice s¨®lo, como mucho, la mitad de la verdad. En la fiducia secreta hay una clave.