El camale¨®n y el chow-chow

Hay dos modos b¨¢sicos de encarar la supervivencia biol¨®gica en la sociedad del espect¨¢culo, y en concreto en los shows de televisi¨®n. Uno es el del camale¨®n, y el otro, el del chow-chow. El modo camale¨®n exige un constante cambio de apariencia y estilo, un permanente y anfetam¨ªnico estado de vigilia para sorprender al p¨²blicoEl mecanismo del camale¨®n puede ilustrarse de la siguiente forma: una presentadora anteayer modosa y recatada se enfunda en cuero y aparece de repente en plan Linda Fiorentino. Un sesudo presentador que parec¨ªa leer las noticias en papiro de El pensamiento navarro se ti?e el pelo de verde y decide emular a Alice Cooper. Mientras el espectador se inmoviliza con el pasmo, va el camale¨®n y se lo zampa como una mosca. El camale¨®n, por supuesto, es animal de prime time. No importa lo que haga ni c¨®mo lo haga. Lo importante es que se zampe moscas y espectadores.

El chow-chow, en cambio, es un perro chino, m¨¢s fiel a s¨ª mismo que a su amo. No es que sea rebelde, sino que anda a su aire y no le hace pu?etero caso a los cr¨ªos, adultos o no, salvo que est¨¦n en peligro. El chow-chow reh¨²ye las zalamer¨ªas y, por supuesto, no se obsesiona con la caza de moscas.

A ?ngel Casas le han tentado con el modelo camale¨®n, pero ha decidido seguir siendo ?ngel Casas. Es decir, un chow-chowman televisivo. Y eso que el diablo tentador no era un cantama?anas, sino el gran Chicho Ib¨¢?ez Serrador. Quer¨ªa a Casas para su nuevo invente, de El sem¨¢foro. Y apuntaba bien. El showman catal¨¢n tiene un saludable aspecto de pay¨¦s pop, campechano, cosmopolita, que le ir¨ªa muy bien para compensar la respetable atracci¨®n de feria.

As¨ª que ?ngel Casas ha seguido su camino. En el estreno, con Assumpta Serna de musa, demostr¨® una vez m¨¢s que su mejor arma es la entrevista. Con inteligente naturalidad consigue que la gente cuente cosas que no soltar¨ªa si se las arrancasen con bistur¨ª. Y muestra de que no ha borrado sus propias huellas, las de aquel mozo con bufanda que presentaba Musical express, su nuevo programa incluye una parodia bastante ¨¢crata de la actualidad.

Esto es lo que hay se emite de martes a viernes, y en horario fronterizo de madrugada. A esa hora, los viernes, medio pa¨ªs est¨¢ en manos de los expendedores de bebida, como una reserva india. Reconforta saber que, en la pantalla, al menos podremos encontrar a alguien que no nos zampe como moscas.