Perote jam¨¢s debi¨® salir de prisi¨®n, seg¨²n el Tribunal Militar

El coronel Juan Alberto Perote, ex jefe de operaciones del servicio secreto Cesid, no debi¨® salir nunca de la c¨¢rcel y en ella ha de permanecer, seg¨²n el Tribunal Militar Central. En un auto en el que desestima el recurso interpuesto por su abogado, Jes¨²s Santaella, contra el reingreso del coronel en la prisi¨®n militar de Alcal¨¢ de Henares (Madrid), el tribunal considera que no se ajusta a derecho la prisi¨®n atenuada en su domicilio de que disfrut¨® el ex agente entre el 15 de julio y el 29 de septiembre.

Perote fue detenido el pasado 18 de junio, a ra¨ªz de que su antiguo superior, el ex director general del Cesid Emilio Alonso Manglano, lo denunciara en el juzgado militar por sustracci¨®n de documentos secretos. Permaneci¨® en la c¨¢rcel militar de Alcal¨¢ de Henares hasta el 15 de julio, cuando el juez instructor del caso, Jes¨²s Palomino, le concedi¨® la prisi¨®n atenuada en su propia casa, que revoc¨® dos meses y medio despu¨¦s. El Tribunal Militar Central, que no pudo pronunciarse contra la salida de Perote de la c¨¢rcel porque nadie recurri¨® dicha decisi¨®n, afirma ahora que la reclusi¨®n en su domicilio es un "extraordinario privilegio" del que jam¨¢s debi¨® disfrutar el ex agente secreto, y desestima ¨ªntegramente el recurso de Santaella contra su reingreso en prisi¨®n.

El auto rebate los argumentos del abogado, quien consider¨® infundada la decisi¨®n del juez, record¨¢ndole que ¨¦l mismo pidi¨® y obtuvo una pr¨®rroga del plazo concedido para devolver los documentos robados al Cesid, a pesar de que el coronel sostiene que no guarda copia de los mismos. Se trata, en opini¨®n del tribunal, de una "circunstancia tan singularmente significativa que no precisa mayores comentarios".

Los jueces militares replican a las insinuaciones de Santaella de que su cliente ha sido coaccionado por el instructor reconociendo, ante el abogado al que se atribuye un intento de chantajear al Gobierno, que ellos son "totalmente inexpertos" en procedimientos como la "coacci¨®n o el chantaje".