Huir del tedio y redimir pena, principales incentivos para el estudio en prisi¨®n

No deja de ser una c¨¢rcel. Y conviene tenerlo presente porque, por instantes, uno puede llegar a olvidar que est¨¢ en la prisi¨®n de hombres de Carabanchel o que para entrar tuvo que franquear barrotes, controles y las medidas de control de toda c¨¢rcel. Ocurre que en la galer¨ªa cultural de la prisi¨®n de hombres de Carabanchel, en una de las aulas donde se imparten las clases, uno puede llegar a creer por instantes que est¨¢ en un centro de estudios cualquiera. Los profesores trabajan con completa normalidad mientras los alumnos, una babel de lenguas, repartidos entre los cursos que van desde la Alfabetizaci¨®n hasta la Universidad, se esmeran en tomar apuntes con la disciplina de un colegio religioso.Mientras dura la clase, por los pasillos de la galer¨ªa cultural s¨®lo se oye el retumbar de voces que llegan desde el patio de la, prisi¨®n, mezcladas con la m¨²sica qu¨¦ suena en la emisora de radio interna que dirige un grupo de reclusos. Ni una voz, ni una palabra m¨¢s alta que otra; s¨®lo hombres aprendiendo a leer y escribir, a utilizar ordenadores o a preparar la licenciatura en Derecho, mientras esperan a que se celebre su juicio. Una espera que a veces dura hasta cuatro a?os.

1 De los casi 2.000 internos que esperan juicio (1.949 al pasado d¨ªa 20 de noviembre), alrededor de 400 se han matriculado en alguno de los cursos que imparten los 16 docentes adscritos al Ministerio de Justicia o al de Educaci¨®n. Un n¨²mero que ha ido creciendo en los ¨²ltimos a?os como resultado de la pol¨ªtica de "captaci¨®n" que realizan los propios docentes, -en el per¨ªodo que va desde 1990 a 1994, el n¨²mero de reclusos de todo el Estado que particip¨® en actividades educativas aument¨® en un 100%, de los cuales 700 siguen en la actualidad estudios universitarios, seg¨²n la Secretar¨ªa de Estado de Asuntos Penitenciarios-, aunque los propios maestros reconocen que la posibilidad de redimir condena (37 d¨ªas por trimestre) sigue siendo un factor decisivo para que el recluso se matricule.

Aprender es lo importante

Lejos de considerarlo un inconveniente, los profesores aceptan esta motivaci¨®n como algo "l¨®gico". "Lo importante es que vengan a las clases y aprendan. Este y no otro es el verdadero camino de la reinserci¨®n"', sentencia uno de los docentes.Angel Parra lleva quince a?os como profesor en Carabachel. Coordinar el trabajo docente le permite tener una visi¨®n de conjunto tanto de los programas como de los internos. "Ha aumentado el n¨²mero de reclusos matriculados, buscan redimir, claro, pero tambi¨¦n buscan aprender y salir del patio".

El patio es el enemigo a evitar en la prisi¨®n. "Es una cosa tremenda", se?ala al un¨ªsono un grupo de reclusos del curso de alfabetizaci¨®n y de Universidad, "hay que salir del patio para no volverse loco, ah¨ª todo el d¨ªa tirado, dando vueltas, sin nada que hacer y meti¨¦ndote en l¨ªos".

Evitar el patio y aprender son los principales argumentos para explicar por qu¨¦ est¨¢n estudiando, aunque algunos creen ver, en es tos momentos, otras razones m¨¢s sutiles: "Todos esperan la entrada en vigor del nuevo C¨®digo Penal con la esperanza de que sus condenas sean m¨¢s leves. Es tudiar supone, adem¨¢s de redenci¨®n, una actitud positiva que puede influir en el informe que la prisi¨®n haga llegar al Juez", comenta un maestro que es r¨¢pida mente atajado por sus compa?eros menos proclives a aceptar este argumento: "La redenci¨®n es importante pero no lo ¨²nico porque aqu¨ª hay gente que sabe que nadie les va a quitar ocho o diez a?os de c¨¢rcel, y vienen. Tambi¨¦n hay que contar con que el perfil del recluso ha cambiado mucho. Est¨¢ ingresando en prisi¨®n una poblaci¨®n que, mayoritariamente, ha tenido contacto con la escuela. Son las v¨ªctimas del llamado fracaso escolar", revela ?ngel Parra. No obstante, en algunos colectivos las cosas no cambian. Los gitanos arrojan los ¨ªndices m¨¢s altos d¨¦ analfabetismo total.

Estas son las cifras de reclusos siguiendo estudios en Carabanchel: 26 en alfabetizaci¨®n; 40 en. neolectores; 80 en Certificado Escolar; 60 en Graduado Escolar; 10 en EGB y 15 en Bachille-. rato a trav¨¦s del CIDEAD (Educaci¨®n a Distancia que sustituye al IMBAD); 60 en Educaci¨®n Presencial de Adultos (Graduado); 17 en el curso de Acceso a la Universidad y 9 en - distintas carreras universitarias principalmente Derecho). A esto hay que a?adir programas. complementarios como el Aula Mentor, de inform¨¢tica, q ue en estos momentos cursan 32 internos.