"Ni perdono ni odio"
Ana Ir¨ªbar, 32 a?os, viuda del asesinado dirigente del PP asesinado por ETA, preside la Fundaci¨®n Ord¨®?ez, dedicada a apoyar a las v¨ªctimas del terrorismo.
Ana Ir¨ªbar dice que no entiende de que se puede negociar con los terroristas, pero que llegado el caso ese proceso se debe iniciar despu¨¦s de que la justicia act¨²e sobre los que practican la violencia, una vez que cese ¨¦sta, y con la participaci¨®n de las v¨ªctimas del terrorismo en la hipot¨¦tica mesa de negociaci¨®n.
Pregunta. ?Cu¨¢ndo se plantea crear la Fundaci¨®n Gregorio Ord¨®?ez?
Respuesta. Es una idea que surge de un grupo de amigos que creen que no es posible que el trabajo de Goyo se diluya con su muerte. Ten¨ªamos que hacer algo, y nos planteamos trabajar sobre los mismos ideales por los que ¨¦l luch¨®: la defensa de la vida. No hemos descartado trabajar junto a los grupos pacifistas que existen en el Pa¨ªs Vasco, pero nuestra actividad va a estar centrada sobre todo en la educaci¨®n.
P. ?Cu¨¢les van a ser sus primeras iniciativas?
R. Vamos a convocar un premio de redacci¨®n para adolescentes entre 12 y 16 a?os y otorgaremos otro a la persona o instituci¨®n que en 1995 se haya destacado en defensa de los ideales que promueve la fundaci¨®n. Queremos dar tambi¨¦n bolsas de estudio a estudiantes de Arquitectura y Periodismo, y para ello promover alg¨²n tipo de concurso. Goyo fue periodista y era un apasionado del urbanismo. Hay una labor muy importante que hacer en la educaci¨®n y la ense?anza. Las pr¨®ximas generaciones tienen que tener las cosas muy claras, ya que de ello va a depender nuestro futuro. Vamos a trabajar tambi¨¦n en lo posible con la Asociaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo y recaudar fondos para las v¨ªctimas de acciones terroristas.
P. ?Cree que las v¨ªctimas del terrorismo quedan desamparadas, despu¨¦s de un atentado?
R. Yo, afortunadamente, he tenido el respaldo de un partido. Ha sido el partido el que me ha arreglado todo para cobrar las indemnizaciones y dem¨¢s. Desconozco c¨®mo est¨¢ la situaci¨®n en otros casos, pero lo importante es que desde el primer d¨ªa est¨¦n informados, que sepan a qu¨¦ tipo de indemnizaciones tiene derecho. Creo que las instituciones tienen que sentir nuestra voz. En muchos temas que nos afectan estamos ah¨ª como los marginados. Parece que damos cierto miedo, y tiene que ser todo lo contrario. Tenemos que salir, luchar, trabajar y defender nuestros derechos.
P.?Se ha sentido rechazada en la ciudad?
R. He pasado unos meses muy malos, y se me sigue haciendo muy duro pasear por San Sebasti¨¢n.
P. ?Ha pensado abandonar esta ciudad?
R. Me lo han planteado m¨¢s desde fuera que desde m¨ª misma. Pero no. Yo estoy en la ciudad en la que he nacido, donde trabajo, donde tengo mis amigos y mi familia. Era la ciudad que Goyo amaba. No, no contemplo abandonarla. Tengo que reconocer que hoy todav¨ªa hay zonas que para m¨ª es como si hubiesen dejado de existir. A la Parte Vieja todav¨ªa no me he atrevido a ir.
P. ?Qu¨¦ siente cuando se habla de dialogar, conversar o, negociar con ETA?
R. Lo primero que quiero es que se haga justicia. Yo creo que como ciudadana de este pa¨ªs lo primero que le corresponde al Estado es que haga justicia, que se encuentre a la persona que mat¨® a mi marido o a quien orden¨® matarle y que pague su pena. Despu¨¦s me gustar¨ªa que desapareciese la violencia, que empez¨¢semos un poco a respetarnos y que se respetasen todas las ideas. Y que se instalase en esta sociedad el respeto y la libertad para opinar cada uno como quiera y expresarse en el idioma que estime oportuno. A partir de ah¨ª, los pol¨ªticos nos tendr¨¢n que explicar qu¨¦ es lo que hay que negociar, y a lo mejor las v¨ªctimas tambi¨¦n tendr¨ªamos que estar en esa mesa de negociaci¨®n, si alg¨²n d¨ªa se plantea, si se cumplen los requisitos anteriores.
P. ?Usted no descarta un di¨¢logo con ETA?
R. Primero se tienen que cumplir premisas b¨¢sicas: que ETA deje de matar, extorsionar, secuestrar, que aprendi¨¦semos a ser tolerantes.... Despu¨¦s, las v¨ªctimas tendr¨ªamos que estar ah¨ª. No podr¨ªan dejarnos de lado, hay que resucitar la memoria hist¨®rica. Los pol¨ªticos y quienes est¨¢n en las instituciones parece que han perdido la memoria, y no se pueden olvidar los casi 900 asesinatos que se han cometido. No hay que olvidar, pero no para pedir venganza, sino para poner cada cosa en un sitio.
P. ?Siente odio hacia quienes mataron a su esposo?
R. Hay una confusi¨®n muy grande dentro de m¨ª. Tengo muy claro que no perdono, eso lo tengo clar¨ªsimo. Nunca he sentido el perd¨®n, pero tampoco he sentido odio. He sentido y siento un dolor profundo, hay un vac¨ªo en mi vida tremendo. Es como si a una mesa le quitas una pata. Yo cojeo todos los d¨ªas y seguir¨¦ cojeando todos los d¨ªas de mi vida porque me han arrancado algo muy importante de m¨ª. Yo no perdono, no olvido, y seguir¨¦ exigiendo justicia.
P. ?Es posible la reconciliaci¨®n entre los dos sectores de esta sociedad?
R. Eso habr¨¢ que pregunt¨¢rselo a los que practican la violencia. ?Est¨¢n dispuestos a dejar la violencia de lado y a sentarse a hablar sencillamente o a respetar al que piensa de forma diferente? Yo dudo de ello.
P. ?Cree que a medio plazo habr¨¢ paz en la sociedad vasca?
R. Ojal¨¢. Es importante que cada uno aporte su granito de arena y que se vea que somos muchos los que creemos en una convivencia pac¨ªfica. No s¨¦ si lo ver¨¦ yo, pero espero que lo vea Javier, mi hijo. Cuando llegue el momento de explicarle c¨®mo muri¨® su padre, le dir¨¦ que fue asesinado por defender unos ideales, por pensar diferente al que dispar¨® la pistola, y ojal¨¢ que cuando llegue ese momento la situaci¨®n haya cambiado.
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