"El madrile?o sabe re¨ªrse de s¨ª mismo"

Acaba de cumplir 47 a?os y 120 kilos de peso. Semejante volumen, que preserva de dietas, porque no junta "la suficiente voluntad", no le impedir¨¢ bailarse una chacarera en el Centro Cultural de la Villa, donde por primera vez entonar¨¢ un palo flamenco de cara a la galer¨ªa. Bromeando en serio, como siempre. Su espect¨¢culo con Olga Manzano es un inventario de sus vidas. Infancia en Buenos Aires, con mezcla de un presente y un futuro que ya son de Madrid. Mucho antes de que Rafael Amor viniese al mundo, su padre quiso viajar a Europa, pero se demor¨® festejando la partida y el barco zarp¨® sin ¨¦l. En 1973, Rafael consum¨® el trayecto. Sus canciones de ida y vuelta son un homenaje a todos los sudacas.

Pregunta. El t¨¦rmino sudaca es, a menudo, insultante.

Respuesta. As¨ª es como me siento despu¨¦s de haber pasado en Espa?a la mitad de mi vida. Ya no soy d¨¦ all¨¢, pero tampoco totalmente madrile?o. Nuestra interaci¨®n no existe, por eso somos sudacas. Las expresiones populares suelen ser muy exactas. Si conseguimos limpiar el t¨¦rmino, se nos aceptar¨¢ c¨®mo una veta m¨¢s de la cultura espa?ola.

P.?Por qu¨¦ un recital con Olga Manzano?

R. Ella canta sola desde la muerte de Manuel Pic¨®n, y le suger¨ª la idea de presentar juntos temas que no hacemos habitualmente. Olga ten¨ªa ganas de cantar la Bien pag¨¢, por ejemplo, y a m¨ª me apetec¨ªa El garrot¨ªn. Cantamos las nanas de nuestras abuelas, que eran gallegas. As¨ª decimos de d¨®nde venimos y por que estamos aqu¨ª.

P. Usted lleg¨® para trabajar.

R. S¨ª, pero el buen recibimiento me anim¨® a quedarme.

P. ?Por que vuelve la canci¨®n pol¨ªtica en pleno desencanto?

R. Porque los elementos de que se sirve el sistema para distraer dejan de funcionar. Sobre todo entre los j¨®venes.

P. ?No le extra?a precisamente que baje la edad de su p¨²blico?

R. No todos los j¨®venes son reaccionarios, hay muchos que practican la solidaridad. Est¨¢n saliendo nuevos cantautores con mucho ¨¦xito: Pedro Guerra o Paco Bello son buena prueba. Yo sigo haciendo lo mismo, cr¨®nicas cotidianas con mucho sentido del humor. El humor es ¨²til para denunciar hasta las cosas mas serias.

P. ?Sabe el madrile?o re¨ªrse de s¨ª mismo?

R. S¨ª. Le ayuda el car¨¢cter abierto, y hasta su forma de hablar. Madrile?os y porte?os (nacidos en Buenos Aires) tenemos una entonaci¨®n muy parecida. Aunque son los andaluces quienes tienen fama de chistosos, y lo son, el madrile?o castellano es gracios¨ªsimo.

Olga Manzano y Rafael Amor. 7 de diciembre, a las 22.30. Centro Cultural de la Villa. Plaza de Col¨®n. 1.600 pesetas.