Gasolina de saldo

, La libertad de precios de la gasoIina ha abierto una guerra entre los grandes distribuidores y el peque?o comercio espa?ol. La posibilidad de comprar gasolina a precios rebajados, practicada desde hace algunos meses en las grandes superficies como Eroski, Caprabo, Alcampo o Pryca, ha generado un movimiento de respuesta de los peque?os detallistas. Comerciantes y estaciones de servicios han acordado una experiencia piloto en Catalu?a por la que se ofrecer¨¢ gasolina 20 pesetas m¨¢s barata en m¨¢s de 800 gasolineras a cambio de comprar en los peque?os comercios.Un signo claro de que se quiere plantar cara a los grandes hipermercados de alimentaci¨®n. Este proyecto, que tendr¨¢ car¨¢cter indefinido, quiere trasladarse r¨¢pidamente al resto de Espa?a. La Asociaci¨®n de Operadores Petrol¨ªferos (OAP), que agrupa a las grandes empresas del sector petrol¨ªfero, no oculta su preocupacion por la "banalizaci¨®n" de un producto en¨¦rgetico de primera necesidad.

El peque?o comercio ha tomado conciencia de la encrucijada en la que se encuentra. O se organiza para hacer frente a los grandes grupos o est¨¢n condenados a la desaparici¨®n. Y la estrategia es la de luchar con sus mismos argumentos. El secretario general de la Confederaci¨®n Catalana de Comercio (CCC), Miguel Angel Fraile, recalca que el acuerdo alcanzado en Catal¨²?a es una reacci¨®n "a las pol¨ªticas de las grandes cadenas de alimentaci¨®n". Fraile no oculta que tras el acuerdo hay una lucha "para situarnos en el mercado, porque de lo contrario nos quedaremos fuera en poco tiempo".

En Catalu?a, el pacto lo han ratificado 90.000 comerciantes, en un acuerdo que afectar¨¢ a 800 estaciones de servicio. Fraile pone ¨¦nfasis en que la venta de gasolina a cambio de una compra "ser¨¢ "la misma acci¨®n que hacemos al ofrecer a nuestros clientes el aparcamiento gratuito si compran en nuestros establecimientos". Algunas asociaciones de comerciantes de Catalu?a, pese a calificar como buena la medida, estiman que el efecto no ser¨¢ el deseado al ser un proyecto con car¨¢cter permanente.

La rebaja de 20 pesetas en el litro de gasolina repercutir¨¢ fundamentalmente sobre los comerciantes. El presidente de la Federaci¨®n Catalana de Estaciones de Servicio, Manuel Amado, es consciente que todo el peso corresponder¨¢ al comercio "por que nosotros tenemos unos m¨¢rgenes irrisorios y no podremos aportar nada m¨¢s que algo simb¨®lico, como diez c¨¦ntimos" a?adi¨®.

Las negociaciones entre la Confederaci¨®n Espa?ola de Comerciantes (CEC) y la patronal estatal de las estaciones de servicio est¨¢n ya "bastante avanzadas", seg¨²n fuentes conocedoras de las mism¨¢s. La pr¨®xima semana habr¨¢ una reuni¨®n entre las partes para trasladar la experiencia piloto a toda Espa?a.

Reacci¨®n positiva

De momento, la reacci¨®n entre las estaciones de servicios catalanas ha sido positiva. La federaci¨®n ha recibido un buen n¨²mero de llamadas de gasolineras que no estaban agremiadas para darse de alta y aprovecharse de este acuerdo.La cadena Caprabo y Eroski fueron la primeras en romper el acuerdo t¨¢cito de precios que exist¨ªa en el sector pese al fin del monopolio. La distribuidora Exxon y la cadena catalana decidieron unirse para vender tres pesetas m¨¢s barata la gasolina s¨²per, como original campa?a de lanzamiento de un gigante complejo comercial cerca de Barcelona. Desde su apertura en el mes de mayo de Barnasud, han pasado por sus instalaciones unos cinco millones de personas, debido entre otras razones, al efecto de la oferta de rebajar el carburante.

En centros comerciales de Pryca de Alcampo o de Eroski, el aumento de consumidores se ha notado gracias a esta agresiva pol¨ªtica de captaci¨®n de clientes. Desde entonces, otras grandes superficies se han lanzado a esta pol¨ªtica de rebaja de precios. Sin embargo, otras distribuidoras como Repsol, la m¨¢s importante, pidieron que las distribuidoras no bajaran sus precios. El mercado espa?ol de carburantes est¨¢ dominado por Cepsa, BP Oil y Repsol.