Quique Seti¨¦n reclama ser sancionado

, "Mi actitud fue absolutamente reprobable. Perd¨ª los nervios y la cabeza y comet¨ª un tremendo error". Quique Seti¨¦n, 37 a?os, capit¨¢n del Racing, pidi¨® ayer p¨²blicamente perd¨®n con estas palabras. Su petici¨®n iba dirigida al club, compa?eros "y especialmente a Tom¨¢s". Seti¨¦n hab¨ªa agredido a su compa?ero Tom¨¢s en el transcurso de un entrenamiento y ambos fueron apartados del equipo. La situaci¨®n ha motivado la apertura de un expediente, una formalidad que, en el caso del Racing, no ha resuelto ning¨²n conflicto. Pero en esta ocasi¨®n hay un matiz: Quique pide ser sancionado.El Racing tiene un reciente historial a sus espaldas de expedientes sin resolver. Todos los que se abrieron quedaron sin resoluci¨®n p¨²blica. As¨ª ocurri¨® con el incidente de la pasada campa?a en el que Billabona y Radchenko se empujaron y recriminaron en el partido Racing-Valencia. Lo mismo sucedi¨® cuando Tom¨¢s, ahora v¨ªctima, se present¨® a una concentraci¨®n con el ch¨¢ndal que utilizaba en el Valencia, en lugar del uniform¨¦ de la firma que viste al Racing. Otro tanto aconteci¨® cuando en San Sebasti¨¢n de los Reyes, con motivo de un encuentro de Copa, Christiansen y un jugador de la cantera lanzaron una bolsa de 'agua sobre las cabezas de una pareja de ancianos. Ni siquiera, hace escasas temporadas, se adopt¨® decisi¨®n alguna cuando el ex yugoslavo Barbaric agarr¨® por el cuello y amenaz¨® gravemente en los vestuarios a un periodista santanderino.

Seti¨¦n, que juega su ¨²ltima campa?a en el Racing, agredi¨® en la ma?ana del pasado s¨¢bado a Tom¨¢s Gonz¨¢lez, 33 a?os, madrile?o, en el, ¨²ltimo entrenamiento antes del partido de Santiago de Compostela. Tom¨¢s entr¨® por detr¨¢s, en los minutos finales de la sesi¨®n a Quique Seti¨¦n, quien se revolvi¨® y le propin¨® una patada en el pecho adem¨¢s de varios pu?etazos, sin que el ex valencianista se defendiera. Desde el s¨¢bado ambos veteranos futbolistas est¨¢n apartados de la plantilla y no entrenan a pesar de la necesidad que el equipo c¨¢ntabro tiene de ellos. El Consejo de Administraci¨®n del Racing celebr¨® en la noche del lunes una reuni¨®n en la que se decim¨® a abrir diligencias informativas sobre la agresi¨®n, nombrando instructor al letrado y secretario del consejo, Eduardo Fern¨¢ndez Mateo.

Quique Seti¨¦n y Tom¨¢s est¨¢n dispuestos a perdonar pero no a olvidar. Seti¨¦n asegur¨®: "Aunque le d¨¦ la mano no acabar¨¢ mi sentimiento de indiferencia hacia ¨¦l". Tom¨¢s, que permanec¨ªa en su domicilio aquejado de una gripe, tambi¨¦n aceptaba estrechar la mano de Quique Y Olvidar pero con la condici¨®n de que "antes se haga justicia".

Colgar las botas

Seti¨¦n reconoci¨® que su Compa?ero no le replic¨® la agresi¨®n: "Yo fui quien se abalanz¨® sobre ¨¦l. Lo que menos necesita ahora el Racing es este problema que yo he generado. Merezco un castigo y estoy dispuesto a asumirlo". Record¨®, no obstante, que las diferencias entre ¨¦l y Tom¨¢s ya las hab¨ªa puesto en conocimiento de Miera, el entrenador, "quien no hizo nada a pesar de lo cual nadie puede decir que cuando hemos jugado juntos se hayan notado nuestras divergencias".

Las diferencias entre ambos se remontan a la pasada temporada, cuando Seti¨¦n reclam¨® con insistencia el puesto que entonces ocupaba Tom¨¢s (hoy reconvertido a libre) en el medio campo.

Seti¨¦n atraviesa ahora una grave crisis deportiva. Ha conocido la suplencia e incluso ha quedado fuera de varias convocatorias. El jugador insisti¨® en que atraviesa, desde que no juega, una situaci¨®n tan dif¨ªcil que cuando se vio fuera de la convocatoria del partido contra el Valencia estuvo a punto de "tomar una determinaci¨®n importante", dando a entender que baraj¨® la opci¨®n de anticipar su retirada.

Quique Seti¨¦n pidi¨® que el consejo de administraci¨®n resuelva lo antes posible el expediente incoado "para evitar que dos jugadores ¨²tiles para el Racing sigan apartados". Acab¨® por solicitar que se le sancione y se olvide todo. "Tengo un gran pesar porque los conflictos han de solventarse con el di¨¢logo y no llegar a estos extremos. Desconozco si entrenador y directivos pod¨ªan haber hecho hace tiempo algo m¨¢s por evitarlo, pero pondr¨¦ todo mi empe?o para que jam¨¢s vuelva a suceder".