El hombre sedado

, "Creo que he llegado a una especie de punto en el que ya no me cabreo", reconoce Oliver Stone, a quien la prensa americana ha rebautizado con el adjetivo "sedado" con motivo de su nuevo estreno. "Uno se puede llegar a cabrear demasiado, y lo que hay que hacer es separarse un poco de la pol¨ªtica contempor¨¢nea de vez en cuando. Adem¨¢s, yo, para ser honesto, no soy un experto en nada. Leo el peri¨®dico como todo el mundo. S¨¦ vagamente lo que est¨¢ ocurriendo, pero no conozco las entra?as de la noticia. No estoy haciendo pel¨ªculas todo el rato".

Para el director de Salvador, Platoon, Nacido el 4 de julio y JFK, cada pel¨ªcula es "un parto con dolor. Para ti es algo bello, pero cuando lo pones ah¨ª fuera, en el mundo, la gente lo mira y dice: 'No es para tanto'. Mis pel¨ªculas, en cualquier caso, lo ¨²nico que hacen es abrir las puertas de la jungla para la gente. Son s¨®lo un manual de principiantes".

"Primero, con Platoon", recuerda Stone, "la gente me llam¨® un veterano de guerra enloquecido, un machote que torturaba a sus actores. Aqu¨ª empez¨® la mitolog¨ªa. Luego me acusaron de mis¨®gino. Luego, por supuesto, de ser un obsesionado con las teor¨ªas conspiratorias. Yo esperaba que con Nixon podr¨ªamos superar la pol¨ªtica y hacer una pel¨ªcula sobre un hombre y sus contradicciones".