"Si se nos margina, en Moncloa brindar¨¢n con champa?a"
El sector cr¨ªtico de CC OO es consciente de la dura batalla que le espera en el VI Congreso del sindicato, que tendr¨¢ lugar del 17 al 20 de enero. Su l¨ªder, Agust¨ªn Moreno, lanza esta advertencia al secretario general del sindicato, Antonio Guti¨¦rrez: "No puede desatar una caza de rojos en el seno de CC OO". Y asegura. que si se les margina de las tareas de direcci¨®n, "en Moncloa [sede de la Presidencia del Gobierno] brindar¨¢n con champa?a".Pregunta. ?Este congreso de CC OO va a pasar a la historia como un puro enfrentamiento entre dos sectores del sindicato?
Respuesta. Este congreso va a pasar a nuestra historia como el congreso de m¨¢s debate. Nunca ha habido una discusi¨®n tan amplia ni una relaci¨®n de fuerzas. que indicase que hay dos proyectos y dos estrategias para dar soluci¨®n a los problemas de los trabajadores.
P. ?Qu¨¦ har¨¢ el grupo de oposici¨®n si queda excluido de las tareas de direcci¨®n?
R. Vamos a ser coherentes con el discurso que estamos manteniendo en el debate precongresual. Eso significa apostar por lo que siempre ha. sido nuestra cultura: el. reconocimiento de la pluralidad. Y tenemos. todav¨ªa dudas respecto' a que se pueda mantener una actitud de exclusi¨®n, porque eso, desencadenar¨ªa una din¨¢mica muy peligrosa.
P._?Por qu¨¦ tienen dudas?
R. Es un mal secretario general aquel al que le produce alergia la cr¨ªtica y aquel que en un mandato, excepcional excluye a medio sindicato.
P. ?Antonio Guti¨¦rrez aborrece la cr¨ªtica?
R. Eso parece bastante constatable. Un buen secretario general debe tener, capacidad, de integraci¨®n, no pecar de soberbia y ser el secretario general de todos.
P. Usted va a encabezar una lista alternativa a la ejecutiva, ?Pero ir¨¢ como secretario general?
R. Es un debate pendiente que tiene que decidirse de, manera colectiva. De todos modos mi trayectoria es bastante clara: cuando pude ser secretario general no quise. Si ahora se decide presentar candidatura a la secretar¨ªa general lo har¨ªamos conscientes de los apoyos que tenemos para demostrar que aqu¨ª hay solvencia y un proyecto sindical y que estamos convencidos de que en el ano 2000 vamos a ganar el congreso.
P. ?Marcelino Camacho le ofreci¨® hace ocho a?os ser secretario general?R. Marcelino no daba ni quitaba; Marcelino abri¨® el debate Y en aquella coyuntura hab¨ªa un par de candidatos. Esa discusi¨®n la tuvimos Antonio Guti¨¦rrez y yo. Yo dije que no. quer¨ªa ser secretario general y que me Parec¨ªa bueno que lo fuera ¨¦l. Y ¨¦l, generosamente, dec¨ªa exactamente lo contrario, ?Acert¨¦ o no? Puedo tener una, sensaci¨®n parecida a la de Nicol¨¢s Redondo con el congreso de Suresnes.
P. ?Qu¨¦ le parece la lista a. la ejecutiva que prepara Guti¨¦rrez?
R. De ser cierta la informaci¨®n de su peri¨®dico, me parece una ejecutiva de continuidad, floja, con una connotaci¨®n pol¨ªtica muy clara. Recoge un espectro que va de Nueva Izquierda al PSOE, fortaleci¨¦ndose las posiciones filosocialistas. Si al final se configura una ejecutiva donde se margina al sector cr¨ªtico y cuyo perfil pol¨ªtico va de Nueva izquierda al PSOE, en La Moncloa brindar¨¢n con champa?a, como hicieron con la salida de Nicol¨¢s Redondo, de UGT.
P. ?Van a hacer alguna propuesta de integraci¨®n y de acuerdo?
R. La tradici¨®n de CC OO es resolver las discrepancias en los congresos y a veces se resuelven con diferentes listas, El problema no est¨¢ en nosotros, est¨¢ en aquellos que han enfocado el congreso como un ajuste de cuentas y para echamos a algunos.
P. ?No se va a aburrir como simple vocal?
R. No hay que adelantar acontecimientos. El Congreso es soberano y colocar¨¢ las cosas en su sitio. Los compa?eros votar¨¢n por la integraci¨®n y por no desatar una din¨¢mica cainita y de guerra civil.
P. Se han opuesto al preacuerdo sobre mediaci¨®n en las huelgas, ?por qu¨¦ razones?R. Esa negociaci¨®n la he llevado yo desde el principio hasta el final y siempre he apostado por un acuerdo sobre resoluci¨®n de conflictos. El acuerdo, que todav¨ªa no est¨¢ cerrado, se por haber culminado mejor si no hubiera habido prisas, fundamentalmente de Antonio Gut¨ª¨¦rrez en clave de congreso. Prisas que han llevado a no amarrar suficientemente bien algo tan funda mental como el derecho de huelga. La objeci¨®n que tengo es que implica un aumento de los plazos reales, no los legales, para la realizaci¨®n de la huelga; puede generar problemas de ilegalidad de las huelgas que se realicen sin someterse a la mediaci¨®n previa; y prima a terceros sindicatos que no suscriban el acuerdo. Antonio Guti¨¦rrez ha tenido mucha prisa para presentar el acuerdo como. parte de la cosecha del sosiego y ten¨ªamos que haber seguido negociando.P. ?Cree que para un sindicato es m¨¢s importante la movilizaci¨®n que la negociaci¨®n?R. No estamos por el conflicto. Nuestra posici¨®n es algo muy arraigado en la cultura de CC OO y es combinar inteligentemente la propuesta y la alternativa. con la movilizaci¨®n cuando sea necesaria.
P. ?Qu¨¦ pens¨® cuando vio . a Guti¨¦rrez, en medio del congreso del PCE, decir "basta ya de injerencias"?
R. No tiene raz¨®n; en el Congreso del PCE no se plante¨® ninguna injerencia en CC OO. Yo creo que Guti¨¦rrez aprovech¨® el Congreso del PCE para irrumpir de manera abrupta en las discusiones y para ocultar la alianza con el PSOE, en concreto la alianza de Antonio Guti¨¦rrez y de Juli¨¢n Ariza. M¨¢s que defender la autonom¨ªa, Guti¨¦rrez lo que hace es obstrucci¨®n pol¨ªtica y no s¨¦ si es casualidad que en EL PA?S hiciera unas declaraciones el 2 de febrero pasado, acusando a Julio Anguita de ser un desastre para la izquierda, cuatro meses antes de unas elecciones. Sus declaraciones en medio del Congreso del PCE se realizan, tambi¨¦n cuatro meses antes de otras elecciones. ?Casualidad? Me parece bastante evidente que esas declaraciones no buscan la autonom¨ªa del sindicato y objetivamente dan votos al PSOE.P. Pero ?existen injerencias? Parece que Julio Anguita le apoya a usted...
R. Yo no se lo he escuchado decir directamente. En cualquier caso yo niego que sea el hombre de Julio Anguita en CC OO y siento una profunda molestia por este tipo de etiquetas. Le devuelvo la pregunta. ?EL PA?S es el peri¨®dico gubernamental?
P. No.
R. Pues la misma sensaci¨®n de molestia tenemos nosotros cuando nos adjudican esa etiqueta.
P. ?Sabe si se va a organizar un voto de castigo contra Marcelino Camacho?
R. Parece bastante evidente y es un disparate. Equivaldr¨ªa a descolgar de la sede de UGT el cuadro de Pablo Iglesias. Marcelino es una persona que simboliza la unidad en CC OO, es la persona m¨¢s sensible en la defensa de la democracia y la pluralidad y que est¨¢ en las enciclopedias y en los libros de historia del sindicalismo.
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