COMERCIO ESPA?A-URUGUAY.

referencias que emplea Nicolini para comparar precios llegan a niveles casi delirantes".En la creencia de que la operaci¨®n no fue buena, se manifiesta el director del Hospital Pasteur, Jaime Luksenburg, responsable de una comisi¨®n encargada por el actual ministro de Salud P¨²blica, Alfredo Solari, del Partido Colorado, despu¨¦s de su posesi¨®n. "No tiene car¨¢cter investigativo. Queremos ver qu¨¦ se compr¨®, la aplicabilidad de los que se compr¨® y qu¨¦ se pag¨®", asegura el director. "Hemos pedido a todos los hospitales que nos informen sobre la situaci¨®n del material comprado a Focoex, si est¨¢ instalado, si tienen dificultades...". En total: 1.299 equipos con entrega t¨¦cnica 8.574 sin ella y 203 veh¨ªculos.

Sergio Medina, responsable de la oficina de ejecuci¨®n de la sociedad en Uruguay recuerda que ejecutivos de la entidad espa?ola viajaron para entrevistarse con las nuevas autoridades locales "y ¨¦stas les dijeron que hasta all¨ª donde hab¨ªan visto, Focoex hab¨ªa cumplido con su parte". Sin embargo, la comisi¨®n ministerial de Solari, dos m¨¦dicos y dos t¨¦cnicos, redact¨® el primero de octubre de 1995 un informe con cr¨ªticas conclusiones con la operaci¨®n por estimar que pudieron haberse conseguido mejores precios al tratarse de una compra importante y observar, asimismo, la existencia de material muy caro, sin destino aparente, defectuoso o de complejo funcionamiento.

"Eso es culpa nuestra"

"Creo que no se utiliz¨® el monto de la operaci¨®n para buscar un precio m¨¢s adecuado pero, ojo, eso es culpa nuestra, no de Focoex, que vendi¨®. Yo har¨ªa lo mismo. Focoex hizo su negocio y me parece perfecto. Y l¨®gicamente vendi¨® lo que le pidieron. El problema es nuestro", admite.

Otra es la postura del m¨¦dico Julio Macedo, director general de la Administraci¨®n de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) en el anterior gobierno del conservador Partido Nacional, cuyos hombres redactaron la relaci¨®n de equipos y cursos t¨¦cnicos pedidos a los proveedores espa?oles de Focoex, 30 de ellos con oficinas abiertas en Montevideo y muy indignados varios por los perjuicios sufridos.

Macedo acepta que puedan darse diferencias de criterios sobre el contenido del plan de dotaci¨®n hospitalaria llevado a efecto bajo su supervisi¨®n, pero afirma que la oferta espa?ola fue la m¨¢s beneficiosa de todas las analizadas, incluida una de Israel. "?Pero usted pidi¨® a voleo?" "De ninguna manera. Nada se improvis¨®. Los equipos eran necesarios, pero no tuvimos tiempos para instalar todo", asegura. "Fueron muchos meses de trabajo para elaborar la lista con m¨¢s de 10.000 equipos, muchas cabezas pensando", a?ade. El ministerio dispon¨ªa de un presupuesto de 200 millones de d¨®lares para pagar sueldos y atender 300 centros asistenciales, 60 hospitales y 800 camas.

"Nos eran imprescindibles fondos exteriores para mejorar la penosa situaci¨®n sanitaria de Uruguay; estudiamos varias posibilidades pero los cr¨¦ditos espa?oles eran los m¨¢s benevolentes". A Macedo se le imputa haber adquirido equipos sin la debida planificaci¨®n e ignorar la aprobaci¨®n de los organismos administrativos del ministerio. "Todos depend¨ªan de m¨ª, y el se?or al que dicen que deb¨ªa consultar era un cargo pol¨ªtico, no m¨¦dico". Lo cierto es que, efectuado el relevo de gobierno, algunos equipos todav¨ªa no hab¨ªan sido enchufados a la espera de una decisi¨®n ministerial.

El anterior director del ASSE se retrotrae a la lamentable situaci¨®n hospitalaria de hace cuatro a?os "con algunos equipos de la segunda guerra mundial, con localidades en las que hab¨ªa que hacer colectas para comprar ambulancias". El 85% de las salas radiol¨®gicas carec¨ªan de adecuada protecci¨®n.

"Pod¨ªamos haber ido presos", agrega. Con el nuevo Ejecutivo, arreciaron las cr¨ªticas en la prensa sobre precios, cargamentos, o equipos rechazados con da?os. Pero en los registros de Focoex figuran como atendidas las ocho reclamaciones presentadas. No hab¨ªa posibilidades de estafa la Agencia Internacional de Control SGS (Societ¨¦ Generale de Surveillance), internacionalmente aceptada, intervino en torno a 120 ocasiones para certificar las calidad de los embarques a Uruguay (v¨¦ase EL PA?S de ayer).

Todo se solicit¨®

La anterior administraci¨®n y la actual reconocen que nada lleg¨® sin haber sido solicitado antes. De hecho, no pocos hospitales pidieron toneladas de material sospechando que transcurrir¨¢ mucho tiempo hasta disponer de otra oportunidad de compra. Esto parece haber ocurrido en el Centro Nacional de Quemados, que adquiri¨® m¨¢s de 700.000 d¨®lares en trajes especiales. Los problemas surgidos durante la instalaci¨®n o el arrinconamiento de alg¨²n contenedor son generalmente atribuibles a muchas razones: problemas organizativos derivados de las rencillas entre blancos y colorados, a compras efectuadas sin haber asegurado el definitivo destino del equipo, a falta de presupuesto para las preinstalaciones, a la disoluci¨®n de la junta ejecutoria local por cambio de administraci¨®n, al desmadre observado en no pocos hospitales y tambi¨¦n a presiones de cl¨ªnicas privadas poco interesadas en que la salud p¨²blica disponga de tecnolog¨ªa punta. Admite Luksenburg que la pr¨¢ctica totalidad de los equipos est¨¢n ya en su destino "aunque alrededor del 20% o 30% no est¨¢ todav¨ªa instalado". Este porcentaje es m¨¢s reducido en la contabilidad de las firmas proveedores, que cuentan con los recib¨ªs.

En los libros de Focoex queda pendiente el acta de recepci¨®n de 189 de los 10.076 equipos. Un total de 82 permanecen en dep¨®sitos y hay constancia de que el resto, hasta los 189, lleg¨® a destino. De acuerdo a las fuentes consultadas, llega al 97% el porcentaje del equipo suministrado funcionando a satisfacci¨®n.

Ana Mar¨ªa es la secretaria del ministro Alfredo Solari. "El doctor no concede entrevista bajo ning¨²n concepto", responde. Se trataba de recabar informaci¨®n complementaria y abundar sobre sus cr¨ªticas a la operaci¨®n de Focoex efectuadas durante la campa?a electoral de 1994. El ministro calla. "Lo pisado, pasado", coment¨® durante su entrevista con una persona interesada en conocer sus reparos al convenio suscrito por el partido blanco. En el fragor del combate, Solari hab¨ªa anticipado la pol¨¦mica.