Un embargo perverso
Recuerdo Irak en 1975. Era un pa¨ªs con un porvenir radiante, ya pr¨®spero y desarrollado, un pa¨ªs abierto, tolerante con otros partidos que no fueran el partido oficial, el Baaz. Sadam no era a¨²n presidente. Dirig¨ªa el pa¨ªs Irak Ahmed Hasan Bakr, un militar nacionalista, casi padre adoptivo de Sadam. Se permit¨ªa un esfuerzo especial en la educaci¨®n y la cultura. En cuanto Sadam lleg¨® al poder, atac¨® a Ir¨¢n, pensando que la joven revoluci¨®n isl¨¢mica era fr¨¢gil. Error de c¨¢lculo: la guerra dur¨® ocho a?os y caus¨® centenares de miles de muertos. Nada m¨¢s terminar esta guerra, Sadam se ocup¨® de los pa¨ªses del Golfo, que no s¨®lo no le ayudaron durante el periodo negro, sino que le hicieron la competencia en el mercado del petr¨®leo. La anexi¨®n de Kuwait se convirti¨® en una idea fija y se concret¨® una ma?ana del mes de agosto de 1990. Fue el segundo gran error de Sadam.Hoy, este pa¨ªs que ten¨ªa todas las posibilidades de convertirse en un gran Estado en el seno del mundo ¨¢rabe vive en la miseria, la exclusi¨®n y la humillaci¨®n. La derrota de Sadam la ha sufrido sobre todo su pueblo, que ha sido castigado por Naciones Unidas no s¨®lo por haber perdido la guerra, sino tambi¨¦n por tener a su frente a un jefe totalitario.
Doble castigo, pues, como si el pueblo pudiera decir algo. No estamos en una democracia. El pueblo ha hecho dos guerras sin que se le pidiera su. opini¨®n. En la actualidad sufre los efectos del embargo que la ONU impuso a Irak. Seg¨²n un estudio de la Organizaci¨®n. para la Alimentaci¨®n y la. Agricultura (FAO) de la ONU hecho p¨²blico el 30 de noviembre de 1995, "el embargo ha. acarreado la muerte de 560.000 ni?os desde el final de la guerra del Golfo, en febrero de 1991". Esto supone m¨¢s de: 100.000 ni?os muertos por, a?o. Muertos por falta de alimentos y medicinas. Intelectuales y hombres pol¨ªticos franceses y espa?oles han denunciado esta situaci¨®n, entre ellos Jean-Pierre Ch¨¦v¨¨nement, ministro de Defensa durante la primera semana de la guerra, del Golfo, que dimiti¨® como protesta contra el error de la intervenci¨®n francesa al lado de los norteamericanos.
El 14 de abril de 1995, el Consejo de Seguridad de la ONU adopt¨® la resoluci¨®n 986, basada en la f¨®rmula "petr¨®leo contra alimentos". Permite a Bagdad exportar petr¨®leo por valor de 1.000 millones de d¨®lares trimestrales a condici¨®n de que un porcentaje sirva para indemnizar a las v¨ªctimas de la invasi¨®n de Kuwait y para financiar las misiones de desarme de la ONU en Irak. Sadam rechaz¨® esta propuesta pues consider¨® que "atenta gravemente contra la soberan¨ªa de Irak".
Francia y Rusia han presionado a Sadam para que acepte este compromiso. De este modo, el pasado martes 6 de febrero comenzaron en Nueva York las primeras conversaciones entre los representantes de Irak y de la ONU sobre la resoluci¨®n 986. Irak exportar¨¢ petr¨®leo este a?o. Seg¨²n la FAO, necesitar¨¢ importar por lo menos 2.700 millones de d¨®lares en productos b¨¢sicos. Este dinero s¨®lo puede provenir del petr¨®leo.
El embargo ha ten ido efectos perversos que Sadam ha utilizado en su provecho; ha invitado a la prensa internacional a visitar su pa¨ªs y comprobar cu¨¢nto sufre la infancia. Ha logrado conmover a los visitantes. Algo que, despu¨¦s de todo, es leg¨ªtimo. Se dice que los norteamericanos est¨¢n bastante satisfechos con Sadam. Las monarqu¨ªas del Golfo no tienen ning¨²n inter¨¦s en que el petr¨®leo iraqu¨ª vuelva al mercado, pues les gustar¨ªa seguir controlando el precio del barril bajo la mirada norteamericana. Desde que se dio la noticia de las conversaciones entre Irak y la ONU, el precio del barril ha ca¨ªdo y la moneda iraqu¨ª se ha afianzado. Si las negociaciones tienen ¨¦xito, todo el mercado petrolero se ver¨¢ violentamente agitado. Quiz¨¢ eso d¨¦ que pensar al coronel Gaddafi, que tambi¨¦n sufre un embargo muy severo.
La propia resoluci¨®n 986 prev¨¦ adem¨¢s una deducci¨®n de 130 a 150 millones de d¨®lares en beneficio de los kurdos del norte de Irak. Ahora bien, Bagdad no aceptar¨¢ nunca que este dinero vaya a una poblaci¨®n contra la que lucha y a la que en estos momentos ayuda Ir¨¢n.
La guerra del Golfo est¨¢ lejos de haber terminado. El sistema del embargo no logra doblegar a Sadam, y lo ¨²nico que consigue es hacer sufrir privaciones al pueblo. Occidente no ha comprendido que hay que salvar a ese pueblo, ayudarlo a vivir y a soportar los tr¨¢gicos errores de su l¨ªder, y que haciendo pasar hambre a ni?os y ancianos no se establecer¨¢ la democracia en un pa¨ªs que ha sufrido tanto. Bajo la apariencia de moralizaci¨®n, la pr¨¢ctica del embargo oculta, de hecho, la preservaci¨®n de grandes intereses. A la ONU no le interesa la suerte del pueblo iraqu¨ª. A los norteamericanos, que tienen medios para influir en las decisiones de Naciones Unidas, no les preocupa la suerte de la poblaci¨®n iraqu¨ª, y en cambio hacen todo lo posible por no disgustar a los pa¨ªses del Golfo que tratan de poner de rodillas a Irak. Es una pol¨ªtica perversa.
Hace m¨¢s de 35 a?os que Cuba vive bajo el embargo norteamericano. Fidel Castro sigue ah¨ª. Su pueblo sufre. El comunismo ya no es un peligro. Y sin embargo se mantiene a la isla bajo est¨¢ presi¨®n cuyos efectos s¨®lo hacen pasar hambre al pueblo. Es la misma pol¨ªtica que se ejerce en Irak y Libia. No es ni moral ni humana y, en todo caso, no es eficaz.
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