Tras los combustibles vegetales

Los carburantes franceses deber¨¢n contener una proporci¨®n ole componentes vegetales dentro de cuatro a?os. Aunque la proporci¨®n no ha sido establecida, para que se haga en Bruselas a nivel europeo, el gobierno de Alain Jupp¨¦ ha decidido apostar por componentes como el etanol, extraido de la remolacha y el trigo, o el diester, extraido de oleaginosos como la colza. La presencia de carburantes vegetales u oxigenados en la gasolina reduce las emisiones contaminantes y, adicionalmente, aligera la factura de las importaciones de petr¨®leo.El primer ministro, Alain Jupp¨¦, anunci¨¦ ayer su prop¨®sito de favorecer fiscalmente los combustibles vegetales y de hacer su presencia obligatoria en todos los carburantes no m¨¢s tarde del a?o 2000. Las gasolinas verdes son utilizadas con ¨¦xito en Estados Unidos, donde han conseguido reducir los niveles m¨¢ximos de contaminaci¨®n en las ciudades. El principal problema de los combustibles vegetales es actualmente su precio, que llega a triplicar el de los carburantes de origen mineral.

Jupp¨¦ afirm¨®, sin embargo, que exist¨ªa la tecnolog¨ªa necesaria para la producci¨®n masiva y que, con ella, los. precios ser¨ªan equiparables a los de los derivados del petr¨®leo. Para tomar su decisi¨®n, bien recibida por organizaciones ecologistas y sanitarias, Jupp¨¦ tuvo que enfrentarse con los grupos de presi¨®n petroleros y, sobre todo, con sus propios ministros de Finanzas e Industrial. Los responsables econ¨®micos se opon¨ªan a toda medida que redujera el consumo de petr¨®leo ya que los impuestos sobre gasolina y gas¨®leo son una de las grandes fuentes de ingresos para las arcas p¨²blicas.